El romance entre dos adolescentes lleno de sorpresas,el amar es lindo pero ¿es fácil?ambos entenderán que aveces el amor simplemente llega e incluso aveces son de personas a las cuales jamás pensaste amar pero el amor es así nunca llega con algún av...
Pasaban los días y la amistad de Abraham y Alfredo se mantenía igual y bueno ambos no tenían nada que hacer y llevaban días aburridos así que Alfredo invito al contrario a su casa sólo para perder el tiempo ya que al final de cuentas Alfredo técnicamente vivía solo más que con su madre, era hijo único, sus padres estaban divorciados y su padre vivía algo lejos de la ciudad sólo iba con el en vacaciones aún que no le gustaba mucho.
-Después de la escuela ambos fueron a casa de Alfredo como habían planeado y al entrar Abraham se sorprendió que al ver la madre de Alfredo eran demasiado parecidos saludó para después dirigirse a su habitación.-
¿Limpiaste antes que viniera? -ríe.-
No iba a dejar que vieras mi desastre -ríe entrando- ¿pedimos una pizza? -deja su mochila en el suelo.-
Si me la invitas si -mira al rizado sonriendo como Niño pequeño.-
Quisieras -levantó el dedo de en medio al contrario- mitad y mitad.
Bieeen -Bufa pero ríe,pidieron la pizza mientras se sentaron viendo la computadora de Alfredo,al llegar la pizza decidieron ver un partido en la compu reían e insultaban quejándose por los errores de cada jugador incluso apostaron por cual equipo ganaba y cómo se esperaba con su suerte Abraham perdió, el rizado no paraba de hacerle burla.-
¿Cómo pudiste apostar por ese equipo?estás idiota -ríe mientras le daba una mordida a su rebanada de pizza-
¿Yo que carajos iba a saber que iban a perder? -bufa.- ademas sólo tuviste suerte esta vez
Por mi diría que se repitan las apuestas -menea el billete que había ganado en la apuesta.- no sabes perder
Cállate -alborota todo su cabello viendo como el rizado se enojaba y empieza a reír-
Ahg -empiézanos a empujarse y poco a poco jugar con manotazos leves mientras reían,Abraham lo sujetó haciendo que cayeran ambos en la cama riendo mientras forcejeaban y sus rostros se juntaban al punto que recargaban sus frentes mientras reían ya que se hacían cosquillas.-
-Abraham al alzar la mirada vio tan cerca al rizado que se quedó por un momento así, mirándolo al punto que podían ver el reflejo de cada uno en sus ojos, perdiéndose en el café claro del contrario.-
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-Pero al darse cuenta de lo que sucedía baja la mirada distanciándose.-
-Alfredo al igual que el pelinegro estaba perdido, el estaba perdido en el color negro de sus ojos sonriéndose mientras que a la vez sus manos rozaban pero al ver que el contrario desvió la mirada el también tomó distancia apretando sus labios riendo nervioso-
-Abraham talla su nuca sonriendo levemente al rizado aún teniendo sus mejillas ruborizadas. Ambos sólo se miraban sin saber que decir o hacer Alfredo iba a hablar pero leves toques en la puerta lo callaron.-
-era su madre quien les dijo que bajaran a comer, aún que habían ya comida pizza en realidad ambos comían demasiado así que no se quejaron y bueno al menos así evitaron aquel silencio bajando al comedor, se sentaron. Su mamá empezó a hacerle charla al pelinegro.-
Ah me alegra que te lleves bien con Freddy, casi no trae amigos a casa más que uno que otro -ríe leve comiendo- ¿eres de su mismo salón?
¿Freddy? -el pelinegro volteó a mirar al rizado con una sonrisa- es lindo ese sobrenombre -Alfredo lo fulminaba con la mirada- ah no voy en su salón pero mi salón está a lado -sonríe.-
Oh si yo y su padre le decíamos así desde que era un pequeño -ríe- ¿quieres ver fotografías de él?
Aaah me encantaría verlas -dice con una sonrisa de oreja a oreja-
Mamáaaa-Alfredo mira a su madre.-
-al madre aún así le enseñó todo un álbum desde Alfredo que era un bebé, Abraham hacía algo de burla pero a la vez se le hacía muy tierno el ver a Alfredo de pequeño sobre todo en la fotografía que era su fiesta de 3 años, reía a carcajadas al ver una foto donde Alfredo lloraba por romper la piñata y la madre del rizado contaba el contexto de cada fotografía y Alfredo moría de la vergüenza, amo aquel rato ya que se sentía muy cómodo. Hasta que llegó la hora que se tenía que ir.-
-Alfredo lo llevaba a la puerta- Abraham habló en serio que no le digas a nadie de esas fotos.
Tranquilooo créeme que prefiero guardarlo para mi -ríe y acaricia su cabello- te veo mañana en la escuela,Freddy -dice el sobre nombre riendo mientras camina.-
-el rizado mientras insultaba al pelinegro quien se alejaba a risas, aún que ambos a la vez pensaban en aquella sensación al estar tan juntos.-
