Gardenias blancas {Finlandia x Estonia}

Problemas?

Aún mantenía la mirada baja sin formular palabra alguna. A pesar de que sus intenciones de no hablar habían quedado más que claras Finlandia la miraba atentó esperando la respuesta.

- No pienso hablar de eso

Sin más remordimientos hablo

- Y porque no? Tan malo fue lo que te ocurrió?

Oh... Grave error

- A ver IMBÉCIL eso es problema mío no tuyo

Exclamó molesta cruzándose de brazos y volteando a otro lado. Finlandia solo la miro sorprendido para después soltarse a reír a carcajadas ante la fulminante mirada de la jovén.

- PORQUE TE ESTÁS RIENDO IMBÉCIL?

Pensó que con gritarle a Finlandia dejaría su estúpida risa de lado pero claro esta que no fue así

- Enserio quieres saber porque me estoy riendo?

Pregunto aún sonriente pero al ver el silencio de la joven decidió responderse a si mismo.

- Justo ahora me iré a mi cabaña a descansar pero en cambio tú.

Se paró derrepente aún viendo a Estonia sentada

- Te tendrás que quedar aquí. Supongo que no te irás a quedarte en tu casa... O me equivocó?

Mierda... Había olvidado que no tenía un lugar donde pasar la noche y el bosque definitivamente no era una buena opción. Solo se digno a suspirar pesadamente para luego dignarse a responder

- Si, tienes razón. No tengo un lugar donde quedarme

- Bueno, sabes? Hoy vine exclusivamente a cazar algo. Pero como no encontré nada lo mejor será irme, hasta luego pequeña

Se despidió mientras se marchaba lentamente.

Estonia volteó a mirarlo asustada. Que carajos iba a hacer sola? y peor aún en medio del bosque

- Oye espera. Espera!

Al ver cómo el mayor se marchaba en compañía de su escopeta no dudo en gritar desesperada por un poco de humanidad.

- Que pasa linda?

- Es que. No quiero pasar la noche aquí sola pero... Tampoco tengo dinero para pagar una habitación de hospedaje

Finlandia la miró con lástima, el no era de los que sentía empatía por cualquier tipo de persona. Al contrario el siempre solía decir la tan conocida frase "Ese no es mi problema" aunque... Aquella niña se veía tierna cuando estaba apenada, dirigió su mano izquierda al pantalón de su bolsillo saco unas cuantas monedas y camino hacia la joven con una sonrisa para entregárselas

- Toma, usalas... Conozco un lugar barato dónde puedes quedarte

Afirmo sonriente mientras veía la carita de ilusión de la joven.

- Enserio? Te lo agradezco mucho!

Agradeció la bondad de aquel hombre con una bella sonrisa capaz de cautivar hasta al corazón más frío.

- Oh vamos cariño no tienes porque agradecer solo déjame acompañarte

Estonia lo miró extrañada, tanta amabilidad era normal?

- Mmh y como puedo creer que no me harás nada?

Cuestionó alzando una ceja

- Oh pequeña. Ten por seguro que si quisiera hacerte algo ya lo habría hecho... Eres tan linda que es difícil resistirse a tus encantos