CAPÍTULO 5

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Lilith

Si quieren pueden irse de compras—Jimenez nos hace un gesto despreocupado con las manos—Igual aquí se aburriran, nosotros solo hablaremos de negocios.

—Si niñas vayan a distraerse—La señora Schwarzenberg me mira fijamente cosa que no hace más que ponerme de los nervios.

—Bueno ya que insisten—Ana a mi lado sin previo aviso me toma de la mano llevándome con ella a rastras.

—Oye...—Detengo el paso porque literalmente me llevaba como una cometa—Esperame

—Oh, lo lamento—Suelta mi mano sonriéndome amable— Estoy ansiosa por irnos de compras

—Eso que dice me suena como una mentira pero para no rechistar me la trago—Espera, voy a preguntar si podemos llevarnos a Stefan y a Harry 

—Me mira confundida—Nunca salgo sin ellos. Somos algo así como los tres mosqueteros.—Explicó y asiente mirándome raro pero le entra una llamada. Tomo eso como señal para ir a buscar a los chicos y darle privacidad.

—Me regreso por donde me había llevado a rastras. Tarareando una de las tantas canciones que e bailado en el prostíbulo. Llegó hasta la sala de estar principal encontrándome con Jimenez y los señores Schwarzenberg

—Me quedo parada en la mural de la puerta—Con permiso—Musito educadamente haciendo que las miradas de los presentes se posen en mi.

—Adelante.

—Jimenez, crees que podría llevarme a los chicos?—Digo mirándolo sentando relajado lo cual me relaja a mi también. Jimenez me transmite paz 

—Claro lili, no tienes necesidad de pedir permiso. Se que ellos te transmiten seguridad. Así como también se que quieres que te acompañen siempre.

— está bien, gracias por todo Jimenez.—La mirada de la pareja presente están en mi mirándome con curiosidad.—Con permiso. Feliz tarde.

—No se si me responde porque abandono las sala de estar buscando a mis garrapatas.—¡¿GARRPATAS?!—grito

—¡¿CHICOS?!

—Por dios Lili, Cállate que me desesperas—Stefan aparece en mi campo de visión seguido de Harry y ruedo los ojos.

—Vamonos nos están esperando—los invito a seguirme, sintiendo sus pasos detrás de mi 

—Emprendo mi caminata hacia donde deje a Ana. Tarareando canciones como siempre 

—A donde vamos?—Pregunta El chismoso de Stefan.

—A buscarle la madre a la mai' tuya care chimba—Harry suelta una sonora carcajada al escucharme. Mi español a mejorado bastante y como no si tengo que aprender a defenderme de estos burlistas 

—Aveces me dan ganas de estrangular a la persona que te enseño a decir eso—El chismoso es el y encima se molesta

—Harry hay que ir preparando el velorio—Digo volteando un poco mi cabeza hacia atrás para ver. A un harry muy risueño y a su lado un Stefan muy irritado 

—Porque?—Ahí sigue de chismoso el Stefan 

—Porque te recuerdo que el que me enseñó a decir eso fuiste tu idiota—Me río sonoramente al igual que Harry. Tanto me río que hasta se me salen las lagrimas. Que limpio cuando llegamos a donde deje a Ana 

—Lista?—Pregunta con la vista pegada al teléfono. 

—Sip, Ellos son Harry y Stefan—Los presento mirándola.

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