Capítulo vigesimo octavo

498 68 10
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Taehyung miró el nerviosismo de Hoseok.

- ¿Estas bien? –

- N-no, estoy en celo, J-Jungkook dijo que iba a ayudarme – dijo sintiendo sus mejillas ponerse coloradas

- ¿Jungkook?, ¿por qué debería ayudarte?, es mi alfa –

- B-bueno.... Y-yo no lo sabía – dijo viendo la molestia de Taehyung

- Tendré que hablar seriamente con él sobre esto – dijo dejando de mirar a Hoseok - ¿te tomaste un supresor? –

- S-sí, pero creo que no está haciendo efecto – dijo sintiéndose más caliente

- Vamos a mi casa, sigue al GPS – dijo Taehyung colocando el GPS del auto – tenemos que asegurarnos de que estés bien –

Minutos después, los dos omegas estaban en la casa de Taehyung y Jungkook

- Puedes tomarte un baño, ahorita en un momento te doy otro supresor y un cambio de ropa –

- ¿Por qué eres tan amable conmigo? – preguntó Hoseok – eres amable aun así te dijera que tu alfa iba a ayudarme –

- Por que esta situación le pudo ocurrir a cualquiera, no soy un monstruo, ¿sabes?, que tu jefe me haya hecho ver como uno es muy diferente – sonrío levemente – anda, ve a bañarte, llamare a mi amigo Jimin –

- E-está bien – dijo Hoseok extrañado de la actitud de Taehyung, nunca creyó que la criatura que su jefe tenía en observación fuera capaz de comprenderlo

- Jimin – habló Taehyung

- ¡Tae!, ¿Yoongi esta ahí con Jungkook? –

- E-ellos, supongo que quisieron tener su tarde de chicos, ¿no te lo dijo Yoongi? – mintió

- No, que tonto – suspiró

- ¿Puedes venir a mi casa?, no quiero estar solito –

Diez minutos después

- Claro, en veinte minutos estoy ahí – dijo Jimin antes de colgar la llamada, haciendo que Taehyung fuera a preparar un té para dárselo a Hoseok junto con el supresor

- A-amm... ¿Dónde me cambió? – preguntó Hoseok acercándose en toalla

- Oh, sígueme – dijo yendo a la habitación de invitados, siendo seguido por Hoseok – tengo mucha ropa, se que te va a quedar – dijo entrando a la habitación para abrir el closet, dejando su ropa de plata a la vista

- ¡Wow!, ¿esto es tuyo? – preguntó mirando las prendas plateadas

- Oh, si – sonrío – así nos vestimos en mi planeta –

- El diseño es muy bonito –

- Por su puesto – dijo sacando un leggins de licra y una camisa floja, al igual que unos boxers para entregárselos – espero que te queden –

De otro Mundo (kookv)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora