12. Yuwon

49 6 8
                                    

Respiré hondo antes de abrir la puerta del restaurante. Cómo era normal a esas horas de la tarde, estaba lleno de gente. La hora de la comida era mortal, incluso había gente fuera susurrando si debían esperar para comer allí o no. Mi padre se había ganado la lotería con ese lugar.

Me abrí camino a paso rápido entre las mesas. Conseguí interceptar a Sang y Gang y pedirles silencio antes de que se me echaran encima. Nos abrazamos brevemente, ellos tenían platos que entregar y yo una sorpresa que dar. Observé la puerta de la cocina un par de segundos antes de abrirla sonriente. Se quedaron todos petrificados, menos mi padre. Él seguía concentrado en un bistec con muy buena pinta. Tardó unos segundos más en levantar la cabeza y encontrarse con mi sonriente rostro. Ahora sí, todos estaban petrificados.

—¿Yuwon?

Me acerqué con los brazos abiertos, estaba emocionada de verlo de nuevo. Me abrazó levantándome del suelo, fue feliz hasta que analizó la situación. Me soltó de pronto y, con su rostro serio, se cruzó de brazos. Sonreí nerviosa, sabía el interrogatorio que venía después.

—Tu madre no lo sabe.

Vaya, fue directo al grano. Me esperaba que preguntara desde "cuándo" en vez de esa afirmación tan verdadera.

Me balancee sobre mis pies, él me conocía lo suficiente como para saber que si ella me hubiera dejado él sabría de mi llegada.

—Vine a verte—murmuré—Además mamá no está, no me apetecía quedarme sola en casa.

—Pero debes avisarla, ¿y si llama a casa y no respondes? Se va a preocupar, Yuwon.

—Primero me llamará a mí...¿No?

—Estoy muerto, cuando se entere que viniste al pueblo...

—Que a ella no le guste no significa que yo no pueda venir...

Mi padre bufó dando una vuelta sobre sí mismo. Realmente estaba alterado, si no me sonreiría como siempre y me alborotaría el cabello, aunque con la gorra no podría.

—Llama a tu madre, y si te manda de vuelta, te vas.

—¿Pero por qué? ¿Me estás diciendo que te parece mejor que me quede dos días sola en casa que aquí contigo?

—Yo no dije eso.

—Pues es lo que parece—saqué mi teléfono del bolsillo bastante cabreada—Si fuera por mamá ni siquiera me dejaría llamarte.

Salí de allí conteniéndome todo lo que pude. Nunca supe lo que pasó entre ellos, pero mi madre odiaba a mi padre y todo lo que tuviera que ver con él; excepto yo. Si le llamaba tenía que irme fuera de su alcance, que viniera no le gustaba, pero me dejó claro que no le hablara de él en casa.

Cuando volví del pueblo no estuvo de buen humor, así que ahora venía una bronca importante por no avisar.

—¿Mamá?

Me senté en el banco en frente del restaurante, justo en la acera de enfrente. Respiré hondo al escuchar su voz calmada preguntando si necesitaba algo.

—Verás, no te va a gustar nada.

—Entonces no me lo cuentes.

—Si pudiera evitarlo lo hubiera hecho—el silencio se hizo incómodo entre las dos—Estoy en el pueblo.

—Cuando vuelvas estarás castigada, dile a tu padre que es un irresponsable por dejarte ir y-

—Él no lo sabía tampoco, me obligó a llamarte.

—Estás castigada tres semanas, no, cuatro.

Colgó de inmediato. Miré mi pantalla algo asustada, realmente estaba al borde de la muerte. Me dejé caer en el respaldo del banco antes de dar una pequeña patada al suelo.  

Part Of Me -YeonjunWhere stories live. Discover now