41: narración

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el nudo en su garganta parecía no irse ni siquiera con el quinto trago de agua en ese momento, karina estaba nerviosa, su corazón palpitaba mientras jungwoo le sonreía con una inmensa paz, como si quisiera transmitir lo mismo a la afligida muchacha, pero parecía no estaba sirviendo de nada. se encontraron antes de la última hora, en un pequeño salón donde nadie se acercaba, ambos con horas libres.

karina ni siquiera había dejado a jungwoo empezar a hablar cuando se soltó en una larga narrativa, explicando cada uno de sus sentimientos y jungwoo se quedó escuchando, en un silencio tenebroso, sentimiento que desapareció cuando karina le vio sonreír.

quería llorar, sintiendo el roce de la yema de los dedos de jungwoo, acariciando sus nudillos, no podía controlarse, era como un sueño extraño levantar la mirada y encontrarlo a él, un sueño con un final antes escrito, pero que aún quería disfrutar.

— kari — ese maldito apodo, el apodo que lo perseguía hasta en sus sueños. el apodo que abandona los labios de jungwoo y suena precioso, causando un remolino de emociones en su pecho, tomando aire por la conmoción que todo esto le estaba causando, no solo el ver a jungwoo después de días ignorando la realidad, sino el hablar con sinceridad por voluntad propia, el poner el punto final en algo que ni siquiera había iniciado — gracias por gustar de mí.

se supone que debía de ser una tonta compasión, jungwoo debía de sonar falso y vacío, incluso avergonzado de ver a la muchacha rubia llorar, pero eso no pasa, jungwoo parece ponerse en sus zapatos, todavía acariciando sus nudillos.

— de verdad es halagador que sientas todo eso por mí, más sabiendo que eres linda, eres amable, divertida, kari… cualquiera podría caer a tus pies.

la situación no era la mejor, pero aún karina ríe un poco por los halagos, evitando siquiera mover la boca, porque sino respondería un “eso ya lo sé” por costumbre, pero no está enfrente de sus amigas, está enfrente del crush de toda su vida, al que había observado en silencio, fantaseando con al menos ser reconocida y no vista solo como una estudiante más que lo seguía en silencio, mirándolo mientras caminaba entre risas con sus dos amigos y se rodeaba de gente.

— no agradezcas, sunbae — y karina responde, a pesar de estar al borde del llanto, mordiendo un poco la piel de su labio inferior. el toque de jungwoo es dulce, pero al mismo tiempo tan amistoso, no es ese toque que karina soñaba tener, pero al menos puede experimentar tomar su mano por unos segundos — no me arrepiento de gustar de ti, estos años viví una gran experiencia, no me importaba que fuera unilateral, con tan solo verte desde lejos tenía suficiente. había algo que deseaba demasiado… el que me reconocieras entre toda la gente que te seguía, quería ser alguien en tu mundo y puedo decir que lo logré, sabes quién soy entre todos los miembros del club y entre toda la multitud que te sigue en silencio. gracias, sunbae, gracias por notarme.

la incomodidad se fue con el mismo aire que azotó la ventana del salón, el mismo aire que movió la cortina y dejó entrar los pequeños rayos del sol ya casi escondido, aquellos que iluminaron a los dos muchachos, esos dos que sabían que este era su último encuentro.

— al menos, ¿podemos seguir siendo amigos?

jungwoo asiente, abriendo sus brazos con algo de duda, pero karina ni siquiera lo piensa dos veces antes de abalanzarse sobre el muchacho, sollozando cuando la calidez es la misma que tanto había soñado, el momento estaba ahí, pero no era como ella quería, no era una confesión correspondida, era una despedida, una dolorosa pero tranquila despedida.

karina se aferra, sabiendo bien que tardé o temprano jungwoo tendría que irse

— perdóname, kari, yo nunca fuí el indicado para ti — es el dulce susurro de jungwoo lo que llega con un beso en su frente, es lo último que karina escucha antes de soltar a jungwoo y dejarlo ir, quedándose sola en aquel salón.

karina no dice nada durante los próximos segundos, solo observa a la nada, en silencio consigo misma. el intenso dolor pareció pasar desapercibido, eso hasta que sus ojos se cerraron, sollozando de nuevo cuando la sensación de los brazos de jungwoo se estaba desvanecido, karina se abrazó a si mismo, tratando de recordar lo que había podido sentir hace poco, pero no quedaba nada, todo se desvaneció en un solo segundo.

 el intenso dolor pareció pasar desapercibido, eso hasta que sus ojos se cerraron, sollozando de nuevo cuando la sensación de los brazos de jungwoo se estaba desvanecido, karina se abrazó a si mismo, tratando de recordar lo que había podido sentir...

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a esto le queda muy poquito 🤏 es más, la próxima actualización probablemente será la última u u

♡.ᐟ ˙ ˖  jaewoo . .ㅤ─ 𝘼 𝘽𝙊𝙔 𝙄𝙎 𝘼 𝙂𝙐𝙉*.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora