La vida de Maddie es sencilla, despertar, arreglarse, despertar a su hermano menor por un año, desayunar, escuela, llegar a casa, bañarse, hacer tarea...
Pero un día toda su vida cambio. Un virus.
Acompañen a Maddie John a sobrevivir a un mundo que...
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Para mi, para nosotros
Maddie John
Pude observar como la rubia que no soltaba el cuerpo sin vida de una joven, pudo acabar con su vida antes de que ataque siendo ya un come-cerebros.
Un tal Jim, estaba infectado, no he podido hablarle, se ve buena persona.
"No matamos a los vivos" dijo Rick cuando Daryl intentó matar a Jim. Y no ha salido de mi cabeza.
Y todo eso fue de ayer.
Nicolás no le habla a nadie que no sea Glenn o Rick, el amigo del sherif: Shane, intentó hablarle pero este solo se fue de ahí.
Yo intentaba no ser grosera, podía ver como Rick, Lori, Carol, Daryl, Glenn, T-dog y los Morales hablaban de que harían con nosotros. Porque, al parecer nos iremos cada quien por diferente lado.
La menor de los Morales estaba a mi lado, acostada en mis piernas ya que no dejaba de llorar, tenía miedo de separarse de los demás y que les pase algo, Sophia, hija de Carol, estaba del otro lado intentando animarla.
Carl y Nicolás estaban enfrente de nosotras. Los 5 en el auto de Dale, quien nos estaba "cuidando" ya que hasta atrás se encontraba Jim en un mal estado.
No había hablado con nadie, en todo el día solo le hable a la niña que se encontraba llorando en mis piernas.
—Me da miedo, que nos separemos, miedo de no volver a verlos —siguió llorando, hablándole a sus amigos.
Carl y Sophia. A nosotros apenas nos conoció.
—No pienses así, ten esperanza, algún día nos volveremos a encontrar —le dijo Carl, intentando animarla.
Ella se levantó un poco de mi y me miro—. Apenas te conocí y no te volveré a ver.
Quería hablarle, decirle lo contrario. Pero sería mentirle. Las probabilidades son muy pocas.
Extendí mis brazos y ella no dudo en abrazarme.
Odio el contando físico con personas que apenas conozco, que no me caigan bien o que no sea de parte de alguien que le tenga cariño. Pero ella de verdad necesita uno.
Observe a Nico que se sorprendió ante mi acto, pero solo sonreí.
—Cuando el mundo mejore, nos volveremos a ver, lo prometo —le hablo Sophia quien le acarició la espalda.
