Yoshiro Bakugo, último hijo del tercer matrimonio fallido de Katsuki Bakugo el ex-héroe número uno, odia visitar a su padre ya que básicamente estuvo ausente durante toda su vida y cada vez que esta a su lado no se siente cómodo con su presencia.
Un...
Era una tarde y el sol comenzaba a esconderse detrás de los árboles, tiñendo el cielo de tonos rosados y morados. La familia Bakugo se preparaba para ir en camino al hogar de Red Riot, este momento podría cambiar sus vidas para siempre.
Durante semanas habían estado esperando este momento con ansias, y finalmente había llegado el día. Estaban a punto de partir hacia la dirección que consiguió Yoshiro.
La expectativa y la emoción se palpaban en el ambiente mientras se preparaban ¿Qué les depararía el destino en esta noche tan especial? Solo el tiempo lo diría.
-Viejo, hoy es el día. Estás a punto de reencontrarte con tu amor de la adolescencia.
Dijo alegre la rubia mientras planchada la camisa de su padre
-Sí, papá. Estamos aquí para ayudarte a prepararte para ese momento especial.
-¡No puedo creer que finalmente vaya a ver al pelos de mierda después de tantos años! -dijo algo nervioso Bakugo-¿Cómo me veo? ¿Estoy presentable?
Si ambos jóvenes son sinceros dirían que era algo tierno y escalofriante ver esa actitud muy oculta de parte de su padre, era indescriptible el sentimiento que sentian al pasar por todo esto junto con su progenitor
-Tranquilo, papá. -dijo con una sonrisa Tomiko-Te ves genial. Solo recuerda ser tú mismo y seguir tu corazón.
-¿la escuchaste? Me dijo papá, ¿tienes fiebre o comiste algo con hongos?
-tsk, ya viejo trato de ser amable-dijo algo irritada Tomiko- ten y ponte esto!
Cuando la chica le lanzó su camisa recién planchada, Bakugo río un poco, a el también le agrada este nuevo ambiente que formó con sus dos hijos, aparte nunca en los últimos años se imaginaba volver a estar al lado de Kirishima.
-Sí, si, y aquí tienes el ramo -dijo Yoshiro mientras le entregaba lo mencionado- Expresa tus sentimientos y dile lo que significó para ti en aquel entonces y cómo sigues sintiendo lo mismo.
-Gracias, chamacos. Estoy nervioso pero malditamente emocionado. -expresó sincero el más mayor,No puedo esperar para llegar a la puerta de Kirishima y recordar esos momentos tan especiales que vivimos juntos.
-Estamos contigo en esto, viejo. Te apoyamos y queremos que seas feliz
La familia decidida se dirigió al auto que los llevaría a la dirección del hogar del pelirojo, mientras Tomiko manejaba, el más mayor y Yoshiro se dedicaban a observar el paisaje, no se imaginaban que la dirección del héroe quedaba lejos, pero al final valdrá cada maldito segundo, ya que Bakugo y Kirishima van a volver a amarse como antes.
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El viaje fue algo largo, pero ese tiempo sirvió para que Bakugo ordene sus pensamientos, la ansiedad y el miedo comenzaron a brotar en su cabeza ¿que tal si no lo quiere volver a ver? ¿Seguirá enojado con él? ¿Y si vuelve a perder el control? ¿y si vuelve a hacerle daño? ....
