Pretty Woman - Bruce Wayne X Tú

Chapter 18

Narrador omnisciente:

Tres semanas habían pasado desde esa cena, y nada había cambiado significativamente, hasta ese día.

Bruce nunca le habían dicho a () su secreto, pero tampoco le importaba a ella, honestamente, lo había olvidado.

El pequeño Richard iba de a poco ganando confianza con sus nuevos tutores, y ellos iban ganando confianza con él.

Ese día era viernes, y a la chica le tocó doble turno.

Al menos su día de trabajo había sido tranquilo, los paparazzis ya no estaban en cada lugar al que ellos estaban, ya habían pasado sus minutos de fama.

No hubo clientes molestos, ni intentos de robo, eso era un buen plus.

Y un gran grupo de estudiantes que repasaban para un examen habían dejando una buena propina en conjunto por aguantarlos las 6 horas que estuvieron allí

Por raro que parezca, () tuvo algo envidia de esos chicos, extrañaba esas tardes de estudio con sus amigos.

Extrañaba la universidad.

Pero bueno, tampoco era como si pudiera terminar sus estudios en Gotham, la única universidad de aquí era privada, muy privada.

"Podria pedircelo a Bruce..." Se le paso por la cabeza varias veces ese día, pero en seguida lo descartaba, no era capaz de pedirle algo así...ya vivía con él, no podía además pedirle que pagará la cuota de la facultad a la que se le pego el capricho de ir de nuevo.

Luego de unas agotadoras 12 horas de trabajo, pudo finalmente salir sin su uniforme por de ese local, estaba muy cansada, era muy de noche afuera, y hacía frío.

Pero había sido recompensada por su trabajo, le dieron dos viejas cafeteras italianas de 800 ml, ya que habían comprado nuevas e iban a tirar esas.

Pero lo malo de la situación era que Bruce no podía ir a buscarla ese día, y tenía que tomarse un autobús y un taxi para llegar medianamente cerca de su nueva casa.

Lo peor de todo es que aún así debía caminar.

Las calles se sentías extrañamente tranquilas, muy silenciosas, las luces de vez en cuando parpadeaban. El cielo nocturno eran solo nubes oscuras.

La chica de verdad no se sentía muy segura, sentía como...si alguien estuviera detrás de ella, siguiéndola.

Pero cada vez que se daba vuelta, no había nadie. Empezaba a preocuparse, pero talvez solo era paranoia.

Escuchaba ruidos de pasos cerca todo el tiempo, pero nunca había nadie.

Su ansiedad subía, quería empezar a correr, pero tampoco quería asustarse por nada, quería atribuirlo a su imaginación.

En eso, las primeras gotas empezaron a caer el suelo, y aumentaron tan rápidamente que ni le dio tiempo para sacar su impermeable antes de ya estar con un resfriado asegurado al día siguiente.

Una de las luces de la calle finalmente cedió y exploto detrás de ella. Eso era lo que necesitaba para apurar el paso.

Se dio vuelta sin detenerse, y vio el en mismo lugar donde exploto el foco una gran figura que se camuflaba con las sombras mirandola directamente.

Viendo como caminaba lentamente hacia un callejón detrás.

Un trueno retumbó por toda la cuidad.

Luego de unos pasos más, todo quedó a oscuras.

Un apagón.

Lo que le faltaba.

Y esas eran todas las razones que necesitaba para empezar a correr.