Dicen que la infancia es la etapa más feliz de tu vida pero para Noelle no es así, su etapa más feliz en su adolescencia dónde pudo conocer el verdadero amor familiar.
Por algún motivo que todos desconocen la menor de la familia Silva se vuelve una...
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Noelle se encontraba debajo de una mesa abrazando sus piernas con una mueca de temor.
Los demás miembros de los Toros Negros estaban sentados en completo silencio, ninguno sabía que hacer para poder hablar con tranquilidad con la menor.
Yami: okey... Lo h-.
Finral:¡No! Sin ofender capitán pero usted es...
Yami:¿Soy? -dijo con frialdad.
Vanessa: da miedo...
Gauche: asustó a Marie la primera vez que vino de visita.
Asta: y no creo que sea bueno con los niños, sin ofend r -dijo nervioso.
Yami se cruzó de brazos con el seño fruncido, se sentía realmente ofendido por las palabras de los demás pero sabía que se lo decían sin mala intención, él cuidaba de su hermana cuando el idiota de su padre estaba haciendo cosas "más importantes", Pero no dijo nada ya que ninguno de ellos sabía sobre eso y eso era cosa del pasado.
Finral:¿Que tal que se acerquen los menos aterradores? Sin ofender chicos.
Gordon/Magna/Gauche/Zora: no ofende.
Vanessa: ya sé, Charmy ¿Charmy?.
Todos buscaron con la mirada a la más pequeña del lugar hasta encontrarla debajo de la mesa junto a la pequeña Noelle.
Charmy; no debes temer... Todos son buenas personas y no te haremos daño.
Noelle: n-no entiendo...¿P-por qué... Me tratas... Bien? -murmurro confundida.
Desde que tenía uso de razón siempre le habían dicho que era una inútil, que si no fuera por su nacimiento su madre seguiría viva... Que ella no merecía llevar el apellido Silva y que merecía la muerte.
Charmy frunció el seño ante la pregunta de Noelle, había visto con sus propios ojos el miedo que siempre tenía Noelle cada vez que sus hermanos estaban en el mismo lugar que ella, como aquella confianza que la peliplateada mostraba se iba tan rápido y sólo dejaba ver a una niña asustada...
Vanessa: porque eres una chica genial, fuerte y adorable -dijo con una sonrisa.
Noelle mira a los demás del lugar y podía notar como sus miradas eran totalmente diferentes a como estaba acostumbrada...
Eran como las miradas que los Vermillion le daban, dulces y amables pero en ellos había un brillo más fuerte...
Noelle: no creo... Siempre me han dicho que no merecía nacer... Que soy una vergüenza y-.
Asta:¡Ellos están equivocados! -grito enojado.
Noelle tiembla un poco por el grito y Finral le da un golpe a Asta, él sabe mejor que nadie que los nobles vivían una vida bastante silenciosa y Noelle al ser una niña no estaba acostumbrada a los gritos, y menos a los gritos de Asta.
