¿Solo un deseo?

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Lucifer y Alastor llevan un año conociéndose, un año conociéndose un poco más, viven en el Hazbin Hotel pero en cada cierta temporada regresan al palacio del Rey donde no molestan a nadie por el ruido excesivo de sus pieles chocando o el incesante jadeo de ambos buscando su propia liberación.

Este aniversario de casados coincidió con su época de celo por lo que después de un par de copas y una cena preparada por su alfa Lucifer se encontraba entre sus brazos siendo aprisionado entre el cuerpo del más alto y la pared, sintiendo al mini Alastor restregarse contra su trasero estando aún vestidos.

El estaba impaciente por lo que en un chasquido de dedos los transportó a la cama en la que tantas veces se habían entregado.

-Al ¿Esa era tu forma de torturarme?_ pregunto lucifer con una sonrisa, estaba bajo el otro, podía ver por completo sus ojos rojos dilatados y oler por completo sus fermonas.

-Si eso era entonces fallé_ contestó el demonio comenzando a besarle el cuello mientras separaba sus piernas y se posicionaba entre ellas.

-Ya no me hagas o te hagas esperar cariño_ susurro el Omega tomando entre sus manos las orejas del pelirrojo sabiendo que este lugar era muy sensible.

-Luego no me vayas a pedir compasión por tus pobres caderas_ respondió el alfa sacando tentáculos oscuros de su espalda que comenzaron a desvestirlos, nunca se cansaba de ver el precioso cuerpo del ángel caído. Estaba pensando que se había vuelto adicto a él, a tomarlo de esa forma y marcarlo como suyo para que nadie se atreviera a quitárselo.

Lucifer se lamió los labios disfrutando la forma en que era tocado por su alfa quien siempre lo hacia entrar en abstinencia para que lo extrañara y disfrutará de sensaciones más fuertes. Pero el estaba bien con eso, respetaba su espacio pues recibía una muy buena recompensa difícil de olvidar, una semana completa de sexo desenfrenado, sintiendo como era llenado una y otra vez. Su entrada hinchada que no hacía más que encender al alfa nuevamente y nudo tras nudo en diferentes posiciones hasta que los dos terminaban completamente exhaustos y satisfechos. Lucifer río por lo bajo al sentir esa mañana sus piernas temblar aún sin estar levantado, se pegó al cuerpo moreno del otro y ronroneó.

«Jeje podrá ser más alto pero no puede ganarme en esto» pensó el soberano acariciando los cabellos rojos del ciervo, si alguien hiciera una encuesta sobre quien tenía el apetito sexual más alto la respuesta iría directamente a su persona, él sabía y sacaba provecho de Alastor cada que podían estar así, llenándose de amor y lujuria a la vez.

El demonio radio comenzó a moverse_ Buenos días manzanita_ murmuró tomando el cuerpo más pequeño entre sus brazos el omega se dejó hacer pues seguían medio adormilados.

-Debes sentirte orgulloso esta vez si me dejaste muy jodido, ni siquiera tuve el valor de levantarme_ dijo el soberano con una sonrisa, tenía el cabello muy despeinado.

-Lo siento, quizá estaba un poco más emocionado de lo normal_ respondió con una sonrisa acariciando sus mejillas rojas y luego dándole un beso en la frente..

-No te disculpes Al, fue una noche maravillosa. La volvería a repetir. Este pequeño dolor se me pasará más rápido si me sigues mimando_ dijo el soberano nunca se cansaría de la preocupación de su alfa por su cuerpo aunque el fuese mucho más fuerte y se curará más fácil_ Yo debería preguntar si no te rompí algo, recuerdo nuestro último round_ río al ver al otro comenzar a sonrojarse, ambos recordaban los gemidos fuertes y el sonido de pieles chocando cuando estaba montandolo.

-Te prepararé el baño y el desayuno, seguro debes tener hambre_ dijo el demonio levantándose de la cama para ponerse al menos algo encima, no podía andar desnudo.

-Gracias mi amor_ le guiño un ojo y le lanzó un beso, el demonio le sonrió acercándose a juntar sus labios dejándolo con las mejillas rojas.

-Volvere enseguida_ pero Lucifer ya no pudo continuar hablando, se quedó absorto en su peluche de patito por la vergüenza de ese beso sorpresa, su alfa siempre encontraba la forma de dejarlo sin palabras.
Luego de que Alastor lo bañara y lo alimentará Lucifer se quedó un poco pensativo.

-Siento no poder llevar nuestros cachorros_ comento de repente, Alastor siempre le decía que debía ser sincero con sus pensamientos y no guardarse nada, eso lo había ayudado a calmar la angustia que sentía al no percibirse como el padre perfecto para Charlie. Su encierro le seguía afectando aunque la alfa le decía que comprendía sus motivos.

-Pero querido eso no es tu culpa. Esa fue una decisión tomada por el cielo_ contestó Alastor poniendo en su cabeza el sombrero blanco con su corona_ No hay nada malo contigo.

Lucifer se abrazó a él_ Lo sé, es solo que quizá todavía mis hormonas andas sueltas o es un deseo subconsciente, soñe con ello a lo mejor y no lo recuerdo_ se quedó callado un momento_ volvamos al hotel, seguro Charlie nos está esperando_ su sonrisa se asomó al tomar el brazo del más alto para comenzar a caminar hacia el portal pero el demonio radio se quedo un momento procesando porque tan de repente había nacido ese sueño en su esposo.

Debía preguntarle a alguien que tuviera alguna idea de ello y que mejor que Rosie, ella sabía muchas cosas y nunca le negaría un consejo aún si Lucifer no le tomó tanta importancia sabía que tarde o temprano volverían a sacar a relucir el tema, ese pensamiento.

Charlie abrazó a su padre al llegar para luego proceder a contarle cada una de las nuevas actividades que se le habían ocurrido, el Omega escuchaba con total atención aún si no entendía del todo porque se esforzaba tanto en ayudar a los pecadores que residían en su dominio. Solo sabía que tenía un enorme corazón, si no fuera su hija pensaría que era un angel.

-Alastor, en su ausencia llegó una carta del barrio caníbal_ comento Charlie al más alto entregándole un sobre rosado_ y a tí papá, Nifty te hizo esto_ le entrego una hoja de papel que tenía un dibujo gracioso. Eran el y Alastor con trazos un poco desiguales tomándose de las manos.

Alastor amplio su sonrisa al ver al otro sonrojarse y poner el dibujo en su pecho. La chica al principio le asustaba porque era un poco rara pero ahora después de conocerla se dió cuenta que solo era excéntrica, un poco sádica en ocasiones pero tenía un buen corazón. En la parte de arriba del dibujo venía escrito "Rey y Reina cucaracha" soltó una risa.

Vengo a juntar firmas para ver si quieren el dibujo para el siguiente capítulo ha ha, este fanfic solo es para su entretenimiento, a mi en lo personal me gustó mucho la temática.
Los siguientes capítulos tendrán variación en la extensión pero cada cosa tiene su razón de ser.
Espero se queden y disfruten de esta aventura conmigo.

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