NegativeBrain, una superheroína famosa se enfrenta a las adversidades de lidiar con su vida civil y su vida de superhéroes, sumado a sus nuevos amigos con un secreto biónico
Estaba con Adam, Leo y Chase, esperando a que Bree pasara por la inspección de mochilas sorpresa, al parecer Bree dijo algo que hizo molestar a la directora Perry, por lo cual la mando al final de la fila.
—Voy a guardar mis libros –avise y los chicos solo asistieron con la cabeza–
Al volver de mi casillero logré escuchar a Chase decirle a Bree que no podía usar sus poderes para saltarse las filas, pues provocaba vientos misteriosos que alertaban a la directora.
—Los únicos vientos misteriosos provienen de Adam –dijo Bree en broma y Adam asintió-
—Para que sepan hoy es la noche de padres y maestros y mañana es el día ¡de su castigo! Jajaja y…¡Suerte! –Exclamó con alegría la directora Perry-
—¿Qué es la noche de padres y maestros? –preguntó Chase ignorando el comentario de la directora–
—Los profesores les dicen a tus padres las cosas malas que has hecho: olvidar tareas, faltar a clases, protestar para tener mejor jabón en el baño –Cuando Leo terminó de explicar lo miramos extrañados —No me miren así, todos se beneficiarán con mi rebelión–
—Si Perry le dice a Dav… a papá las cosas malas que ha visto sabrá que usamos nuestros pode… quiero decir que nos hemos hecho cosas malas en la escuela y seguro nos sacará -dijo Adam trabandose un poco–
—No podemos darle a la directora Perry ninguna evidencia, nadie haga nada malo –dijo Chase, el era como el “líder” entre los tres hermanos–
—No que locura, ¿y que esperan que haga que camine? –preguntó irónicamente Bree–
—Si quieres vuelas –respondí irónicamente rodando los ojos–
—Yo planeó vencer esta noche ganándome a todos mis maestros, así mi mamá me dejara ir al concierto que he esperado el “Riff Raff Jimmy Jam” –explicó Leo convencido y con una sonrisa–
—Oh sí el “Riff Raff Jimmy Jam” –dijo Chase y empezó a bailar de forma vergonzosa–
—No si te mueves así –dije sería, como de costumbre–
—Miren esto, señorita Watkins vaya que lindo corte de cabello, creí que era Angelina Jolie –Leo halago a la maestro asiática y ella le respondió con una sonrisa —Eso basta para un seis–
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—Aquí estaban, comer sola en la cafetería no es muy lindo saben –dije a los hermanos Davenport y Leo, pues habían salido de la cafetería sin decirme nada–
—Perdona Issa, dejame contar cuántas monedas tengo y te compro algo de la máquina expendedora –Leo empezó a sacar las monedas de su bolsillo–
