¡Deja de decirte eso!

El inicio.

Es un día tranquilo, los pájaros cantan y el sol brilla.

- ¡¿Que quieren que yo qué?! - grito una joven nemuri en sus veintes a dos personas con traje, a su lado estaban dos adolescentes Ryuko y Rumi.

- Por favor, señorita Kayama, mantenga la compostura - contesto uno de los de traje mientras hacía la mímica de calmar con sus manos.

- No le estamos pidiendo nada descabellado, solo que usted y las jóvenes aquí presentes cuiden de dos posibles candidatos a héroes, claro en un futuro - dijo el otro mientras mostraba fotos de dos niños que no superaban los 5 años.

- Nada descabellado, claro - menciono de manera sarcástica la coneja recibiendo un codazo a las costillas por parte de la rubia.

- Están locos, me voy - dijo la joven peliazul tomando de las manos a las adolescentes para retirarse.

Todo lo que escuchó fue que el gobierno vio poderes inmenso a futuro de dos niños y que querían que ella los educara para que los usarán a su favor.

-(Que cuide a este par no significa que sea una madre luchona) - pensaba a punto de abrir la puerta y salir de la oficina.

- Bueno, eso significa que los pequeños irán para Endeavor.

Esas palabras provocaron que Nemuri se detuviera en seco en su lugar y analizará la oración.

-(Están locos) - pensó recordando cuando conoció el interior de la vida del héroe de las llamas y el sufrimiento de sus hijos ante él -. Esperen - dijo volteando a verlos -. Ustedes ganan, voy a cuidarlos.

Las personas de traje solo sonrieron sabiendo que ganaron.

Time skip:

En frente de una casa de dos pisos se hallaban cinco personas.
Dos niños, dos adolescentes y una joven adulta.

- Bueno, será su nuevo comienza - dijo Nemuri con nervios en su voz mientras tomaba de las manos a los niños para entrar en la casa, o al menos eso intentaba ya que solo la niña le dio la mano mientras el chico la mantenía abajo.

Ya adentro de la casa Nemuri ayudo a los niños a instalarse en su nueva habitación, la cual anteriormente era un almacén de escobas y productos de limpieza.

Ahora todos estaban en la cocina a punto de comer unos fideos con algo de crema.

- Muy bien, mejor nos vamos presentando, yo soy Nemuri Kayama, seré quien los cuidé de ahora en adelante y soy la heroína profesional Midnight, mejor no me reconozcan cuando esté trabajando, créanme, no les gustará lo que veran - se presentó la peliazul oscuro y luego señaló a Rumi -. Esta chica con cara tierna es Rumi Usagiyama, estudia en una escuela de héroes en su primer año - dijo señalando a la peli blanca quien solo le saco la lengua en respuesta -. Y esta chica con cara muy sería es Ryuko Tatsuma, estudia en la misma escuela que Rumi - dijo ahora señalando a la rubia quien les sonrió a los niños - ¿Podrían presentarse?

- Yo, me llamo Ochako Uraraka - dijo una muy sonriente niña de pelo castaño y permanentes cachetes sonrojadas -. Y el es mi amigo Deku, o así me dijo que se llamaba - dijo con inocencia la mini mochi.

Tras la mención de ese nombre las tres personas mayores prestaron atención al chico.
Rumi dejo de comer los fideos y las otras dos miraron directamente al pecoso con los ojos abiertos.

- Perdón, pero, ¿tu nombre no era Izuku Midoriya? - pregunto la rubia con razgos de reptil al niño.

- ¿Eeeeeeh? - Ochako voltea a ver a Izuku tras escuchar las palabras de la rubia - ¿Ese es tu nombre?

El chico solo volteo los ojos atinando a voltear pero se detuvo antes de hacerlo.

- Si,  mi nombre real es Izuku, pero Deku es otra forma de decir mi nombre - dijo el chico mientras comía los fideos.

Lo dicho por el niño hizo sentido a las tres chicas más jóvenes y continuaron comiendo, sin embargo a Nemuri se le hizo extraño el como casi voltea, siendo que al momento de hacerlo un pequeño destello dorado paso por la ventana que estaba en el living atrás de la cocina donde estaban.

- Okey, bueno, coman y mañana Rumi los llevará a su nueva escuela - dijo la peli azul sin dejar de mirar la ventana.

Time Skip, en la media noche:

Ya con los niños durmiendo, Kayama salió un segundo afuera.

-... Ya, salga de ahí - dijo al aire sin que nadie estuviera cerca con su látigo en mano, mirando directamente a un callejón oscuro y vacío.

Obviamente, como estaba sola en la fría noche, nadie contestó.

- Está bien, está bien - dijo una persona casi esquelética saliendo del callejón -. No deseo pelear.

- ¿Quien eres y que haces aquí? - pregunto de inmediato preparándose para golpear al sujeto en frente de ella.

Pasaron unos segundos en el que el sujeto no se movía, y antes de intentar atacarlo, el látigo callo de las manos de Nemuri y su boca se abrió en sorpresa.

- Sé que es muy poco profesional presentarme así justamente con una futura colega, pero tengo que hablar contigo sobre el chico, Nemuri - dijo el hombre que se transformó en All Might.

El ambiente era tenso, al grado en que se podía cortar con un cuchillo.
Esto no era lo que tenía en mente la Kayama al salir para enfrentar al sujeto que consideraba un acosador del pequeño Midoriya, para nada.

Nunca se espero que su día, que inicio yendo a las oficinas de la comisión de seguridad pública para que le dieran dos niños, terminará con ella en frente del mismísimo símbolo de la paz afuera de su casa.....

Continuará.