La princesa del cielo. La hija de la luna
Hace mucho tiempo una mujer quería quedarse embarazada, pero no lo conseguía, desesperada intentó recurrir a hechizos y demas, pero seguia sin funcionar, una noche frustrada por no poder tener un hijo, decidió salir a dar un paseo, llegó a una colina, y allí se quedó sentada viendo la luna llena, como último recurso le rezó a la luna que le otorgara el gran placer de ser madre y de darle un primogénito a su pareja, esta desde lo alto del cielo la escuchó y esa misma noche le otorgó su deseo. Semanas después aquella mujer se dio cuenta de que había conseguido quedarse embarazada, todo iba bien, era un embarazo normal, pero un dia, la mujer tuvo un sueño que decía que su descendiente tendría que llamarse de una manera específica, pero cuando se despertó se olvidó de aquel nombre. El día siguiente esa mujer dio a luz a una niña de piel blanca con cabello blanco y ojos rojos, la llamo Diana, el hombre se quedó mirando a la pequeña extrañado, dado que tanto el padre como la madre eran de pelo y piel morena y con ojos marrones, el hombre pensó que la mujer le había engañado, este con mucha ira empezó a atacar a la mujer, tanto con palabras como con sus manos, mientras la mujer se quedaba adolorida en el suelo, él cogió a la pequeña, se montó en su caballo y cabalgó hasta la colina donde su pareja pidió su deseo anteriormente, allí desenvaino su espada y se dispuso a matar a la criatura, pero al ver su sonrisa, su corazón se compadeció, no obstante no podía olvidar el dolor que sentía al pensar que su mujer le había engañado, al final la abandonó a su suerte, cuando ese individuo se alejó de la colina, la luna bajó hacia la niña, la cogió en sus brazos y esta sonrió, ante esa reacción la luna decidió que se la iba a quedar para que no muriera en el bosque. Junto a la pequeña volvió a subir al cielo, cuando subieron, los ojos de Diana cambiaron de rojo a una mezcla entre azul claro, azul oscuro y violeta, una especie de color noche
