My little secret/ Bill Skarsgård

I. Encuentro

Era viernes, para muchos el mejor día de la semana, para mi un martirio. Los viernes el bar se llena mucho por lo cuál Sarah, yo y los otros trabajadores siempre estamos ocupados. Además que esos días entramos a las 5:00 pm y salimos a las 4:00 am, así que tienes que estar preparado para una jornada laboral dura. 

Ya eran las tres de la tarde por lo cuál me levante y me fui a bañar, me cambie, me arregle y al salir del baño encontré a Sarah con la peor cara que pudiera haber visto en mi vida. 

-Ufff, se nota que ayer tomaste de más. Ve a arreglarte y te prepare el almuerzo y un té.- Dije y ella asintió. Fui a la cocina y cocine una pasta y un té de manzanilla para Sarah. Cuando salió ya arreglada empezamos a comer y salimos de la casa.

-Llevas todo? Hoy nos iremos en mi carro.- Dije mientras entraba en mi carro.- Si creo que llevamos todo, de igual manera lo único que hay que llevar hoy son nuestros teléfonos y billeteras.- Después de eso fuimos al bar y como siempre ya había un montón de mafiosos tomando, jugando billar, dardos o a las cartas. Nos pusimos nuestros uniformes y empezamos a trabajar. Como ahorita estaba calmado me puse a hablar con Sarah sobre algunos rumores que habían de nuestro jefe Marcel. 

-Oíste que dicen que Marcel está saliendo con nuestra jefa Ángela?- Preguntó Sarah y me quede un poco sorprendida. 

-No Ángela estaba con Dylan? El mafioso británico.

-Si! El chisme está potente, pero no solo eso, sino también porque dicen que los vieron besándose en el almacén. Tu crees que Dylan y Marcel se peleen al punto de matarse?

-De seguro, típico de mafiosos. 

-Si pero Marcel también porque va de estúpido a meterse con Ángela- Mientras Sarah decía eso yo estaba secando los platos y pude ver que alguien se acercaba y al subir mi cabeza note a Marcel. Intente parar a Sarah dándole codazos, pero nada funcionaba, ella seguía con el tema.

-Déjame, y como te decía ojala Marcel reciba su merecido como es debido.- Marcel vio a Sarah algo enojado.- Sarah, el señor Andersson está enfrente tuya.- Ella lo ve con una cara de miedo, pero luego la cambia.- Nada que no sepas Marcel, después de todo tu fuiste el que se metió en ese lío.- Dijo Sarah con un descaro que según yo Marcel le iba a gritar, pero no fue así.- Tienes razón Sarah, todos los rumores son ciertos, pero en realidad yo no quería, me emborrache y ella también y eso pasó. Y lo peor de todo esto es que a mi me gusta otra persona.- Sarah y el empezaron a hablar bajito por lo cuál yo me fui a otro lado para no parecer entrometida. 

Estaba ordenando algunas cosas hasta que escucho como varias botellas se caen. Al ver vi a un hombre de pelo largo, borracho y vidrios alrededor. Vi que iba a ir una compañera, pero la detuve.- Iré yo, tu ordena para mientras.- Al decir eso agarre los utensilios de limpieza y me acerque. 

-Muy buenas noches señor, podría ayudarlo a limpiar esto? 

-Por favor, es que al parecer no me di cuenta y bote algunas cosas de la mesa.

-No se preocupe, lo limpiare todo.

Después de eso empecé a limpiar los vidrios tirados intentando no cortarme y lo logre. Luego metí todo en una bolsa y fui a la puerta trasera. Me dirigí a los contenedores de basura y tiré la bolsa, iba a volver al bar, pero escuche sollozos por lo cuál me acerque a ver. Al ver habían varios hombres con armas y un hombre tirado en medio de todos llorando. Luego vi a una hombre alto, delgado pero por su traje pude notar que estaba en forma, pelo castaño y estaba fumando un cigarro.

-Dónde está mi dinero?- Preguntó el hombre alto. 

-Señor, lo use para pagarle la universidad a mi hija, pero le juro que le devolveré el dinero. 

-Jajaja, y usted cree que le daré otra oportunidad? Llevó más de 1 año dándole más oportunidades. Esto acaba ahora.- Cuando dijo eso el hombre que estaba tirado se puso a llorar horrible. 

-¡No! Por favor, tengan piedad. Yo no quiero que mis hijos carguen con esto, no me maten por favor. 

-Lo hubiera pensado antes de pedirme dinero.

-Señor Skarsgard, se lo voy a pagar, lo juro. 

-Jurar es un pecado y usted ya cometió muchos, mejor páguelos. Ahora....

Un grito desgarrador y más de 8 disparos se escucharon. El hombre viendo para el cielo con una charco de sangre. Me asusté, jamás había visto algo así. Quería gritar, quería decir algo, pero mejor me tape la boca para no decir nada o hacer algún movimiento notorio. Pero al dar dos pasos atrás me tope con los contenedores de basura y los hombres me voltearon a ver y me apuntaron con sus pistolas. Ese era mi fin, adiós a Eveling Olfosson. Cerré mis ojos y espere a que dieran la orden de dispararme, pero no fue así. 

-Llévense el cuerpo, yo me encargare de está chica.- Los hombres se fueron y yo me quedé sola con el chico alto. 

-Disculpa, lo que acabas de ver no es nada importante, señorita....

-Por qué le daría mi nombre? Si se lo doy tendría mi información personal.- El chico esbozo una sonrisa.- Vaya eres inteligente, me sorprenden tus capacidades. Mi nombre es Bill Skarsgard, un placer. 

-Para mi no es un placer, y me llamó Eveling y si me disculpa yo no vi nada y no pasó nada. 

-Claro querida, este es nuestro pequeño secreto.- Dijo y me guiño un ojo y luego salió.