Juntos hasta la vejez

¿enfermo? ⁴

Horacio: 16 años, cumplimos en abril.
Gustabo: 18 años, recién cumplidos en abril.

Narrador: Horacio

Otro día más, Gustabo no vino a la secundaría, poco a poco me estoy empezando a preocupar, pero, capaz esta demasiado ocupado con sus problemas, ¿cierto? Pero... ¿Faltar una semana entera?, esto ya es raro, no me escribe, no me contesta, es como si se hubiera esfumado de la tierra... Pero eso no había pasado, ¿o si?

—Mierda, debo ir a su casa.—

Me levante de mi cama algo rápido, generando un pequeño mareo seguido de un insulto bajo. Ya estaba todo listo, mi chaqueta, medicamentos por si tus necesita, sus papitas favoritas, mi móvil y dinero para el Uber. Cuando escucho una bocina de auto, bajo rápido por las escaleras, viendo a mi madre en la cocina sin entender que hacia. En el Uber mi pierna temblaba mucho, por miles de escenarios feos de mi Gus.

Cuando llegue pague el Uber y baje rápido, toque su timbre varias veces, desesperado, hasta que se escucha la puerta abrirse lentamente, miro al frente y no había nadie, hasta que.

—Señor, si es uno de las revistas no quiero nada, buenas noches.—

Después de eso quedé impactado, ¿Había salido un niño idéntico a mi novio? ¿Acaso me fue infiel?
Desde afuera de la casa pude escuchar como mi Gus gritaba.

—¡Peque! ¡¿Quien era?!—

—¡Un señor de las revistas creo papá!—

Escuche como la voz que me había hablado antes volvía a hablar, pero me asombró que se refiera a Gus como su papá, tengo que resolver estas dudas lo antes posible, volví a tocar la puerta, pero ahora, me abrió gustabo.

—¡Gustabo!— me abalanzó a abrazarlo.

—¿Donde estuviste todo este tiempo? ¿Por que ese niño te dice papá?— pregunte.

—Tengo muchas cosas que contarte, pasa Perla.—

Cuando entre con el de la mano me lleva a su sillón, me senté justo al frente de él, raro se me hizo cuando el pequeñin se sentó en el regazo de mi pareja.

—El se llama Toni, su mamá fue una ex mía, no se si recuerdas a Corina, nosotros una vez nos acostamos y salió esta cosita hermosa—

Dijo Gus mientras acariciaba los cachetitos de tono con ternura, pero algo no me quedaba claro, ¿por qué el niño era tan grande?

—¿Pero desde hace cuanto esta contigo?—

—El lleva ya 3 años, tiene 4 años, te lo estuve ocultando porque no sabía cómo ibas a reaccionar...—

¿Que? Mi cara era una obra sin enmarcar, no tenía expresión, me siento demasiado confundido, ¿estuvo 4 años con un pequeño? ¿Solo? ¿Lo tuvo a los 14 años? Mierda. Era muy chico.

—¿como lo cuidarte a tan temprana edad?¿por eso trabajas horas extras?—

—si, sabes que mi relación con mis padres era muy delicada, ellos se habían enterado del pequeño y fue ahí cuando me abandonaron, esa fue la razón que no te conté por años. Al principio se me dificultó demasiado cuidarlo. Pero ahora estamos bastante bien, los fines de semana le enseño a hablar, se que es pronto, pero siento que debe de estar preparado para el futuro ¿sabes?—

—Si, siento que será muy fuerte, si no te importa, siento que deberíamos mudarnos juntos y cuidar de ese pequeño juntos, ¿aceptas?—

—aceptó.—

Nos dimos un corto beso siendo observado por el pequeño Rubió de ojos celestes. Wow, realmente se parecía a gus.

—¿recuerdas que dijiste que no me besaría por que me pondría enfermo? —

Suelto una risa y acarició el pelo de Gustabito.

Una aventura más fue escrita, nos espera mucho por delante con esta joven y pequeña familia. ♡

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