Capitulo #34

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Después de despedir a su familia

Antonella, Helena, la princesa Leticia y Adelina estaban bebiendo el té

Mientras hablaban de diferentes temas y conociéndose un poco cada vez más

Gerad quien después de despedir a su familia había hablado con Antonella

Ya que si se iba a quedar un tiempo en el imperio no quería estar en el palacio sin hacer nada y no quería vivir de gratis

Así que Antonella le había dicho que podía ir a vivir a la mansión y entrenar a los soldados y así ayudar a Lionel yendo a los pueblos donde todavía había delincuencia

Al dia siguiente

se tiene que ir tan pronto — preguntó Antonella

Si pequeña, pero nos puedes ir a visitar, nosotros cuando tengamos tiempo vendremos, pero nos tenemos que ir no podemos dejar mucho tiempo el reino solo, pero tú hermana se quedará — habló la madre de Antonella

está bien — dice Antonella dándole un abrazo a cada familiar

Pequeña yo también me tengo que ir, pero te prometo que la próxima vez que nos veamos me quedaré más Tiempo y te enseñaré muchos lugares, de paso te traeré un regalo que te lo iba a dar de bebé— hablo su tío Aron

así Antonella se fue a despedir de su otra tía

Mientras que Aron aprovecho y se escapó un momento

hola Mi pequeño Helios — dice Aron apareciendo atrás de Helios

AAA rey Aron me asusto, no aparezca así — dice nervioso por la cercanía del vampiro

Po.. Podría alejarse está invadiendo mi espacio personal — dice cada vez más nervioso y su lobo no ayuda

Oh, pequeño estás muy nervioso, así te pongo — dice señalando un bulto en el pantalón de  Helios

yo... Yo — tartamudeo Helios nervioso

Sssh pequeño muy pronto vendré y te comeré  solo espera y no busque a nadie más porque los mataré, tu solo eres mío y de nadie más entendiste pequeño — dice Aron soltando su aura poderosa

Helios al sentir esa aura lo hace estremecer — asiente con su cabeza

Ahora me tengo que ir pequeño — dice Aron para robarle un beso a Helios e irse

Helios está súper rojo, avergonzado se fue a su habitación a arreglar su problemilla

****************


Así los días fueron pasando

todo iba muy tranquilo

Pero los problemas y la envidia nunca falta

Ese día a Antonella y Helena la había invitado a una fiesta de té

Al llegar

Una doncella las guía hasta el jardín todo se lleva a cabo la fiesta de té

bienvenida señoritas— dice toda las señoritas haciendo una reverencia

Gracia por su invitación señorita Ana — dice Antonella

Tomen asiento — dice Ana

así Helena y Antonella toman asiento

Así la señorita Ana ordena a las doncellas que sirva el té

Oh señorita Helena, que se siente quitarle el prometido a otra señorita — pregunta una de las amigas de Ana

señorita no entiendo lo que me quiere decir — dice Helena confundida

Oh no sabía que el archiduque y la señorita Ana se iban a casar, pero el Archiduque rompió el compromiso por usted

No, no sabía mi Máximo nunca me dijo que estaba comprometido — dice Helena

Si lo estaba y estaban muy enamorados, todo en el imperio sabíamos que ellos se iban a casar, pero usted se metió entre ellos — dice la joven intentando humillar a Helena

Pues no sé deberían de amar mucho, ya que el archiduque rogó, me suplico que lo aceptará como mi prometido, si la quisiera no la hubiera dejado — dice Helena

El sí me amaba este año anunciariamos el compromiso, pero apareciste tú zorra — grita Ana

Atención el emperador sol del imperio y el Archiduque van entrando

Así los dos entra con su aura poderosa

todos hacen una reverencia

Maxi, maxi es verdad que yo soy una rompe relaciones, las señoritas están diciendo que yo me metí entre tu compromiso con la señorita Ana, es verdad maxi — dice Helena llorando

No mi pequeña quien te dijo esa mentira tú no eres ninguna rompe relaciones, tú eres la única mujer que ha estado en mi corazón— dice haciéndole mimo a Helena

Quien se atrevió a decir esas calumnias y hacer llorar a mi prometida — pregunta el archiduque con una voz fría

Todos los presente temblado a tan imponente hombre

fueron la señorita Ana y la señorita Elisa quienes estaban diciendo todo eso — hablo Antonella, puesto que no se quedaría quieta al ver que intentaban humillar a su amiga

Señorita Ana y señorita Elisa sabes que lo que hicieron lo pagarán muy caro — dice el archiduque tranquilo, dando más miedo

Guardias agárrelas y dele 30 latigazo por calumnias y por intentar humillar a mi prometida y que quede claro que nadie sea capaz de volver a intentar o terminarán peor que ellas — dice el archiduque

No, no su majestad haga algo, archiduque perdón, no lo volveremos hacer — suplicaban las dos

Quiero aclarar que la señorita Ana si había pedido un matrimonio conmigo, pero yo la rechacen al no gustarme

Pero ella no lo acepto, fue tanto su enamoramiento o mejor dicho su obsesión que me drogo para meterse en mi cama y así tener que hacerme responsable, pero no lo logro

Por consideración a sus padres quienes son amigos de mis padres decidimos dejar pasar por alto esa ofensa, fue así como sus padres decidieron mandarla aún internado por años

pensé que al regresar dejaría está obsesión, pero ya veo que no, así que está vez pagará por intentar meterte con mi prometida y quiero que quede claro que sí intentas algo contra mi prometida está vez toda la ley caerá contra ti y ni tus padres te salvarán — dice el archiduque muy enojado

LA HÍBRIDA Y EL LOBO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora