Capítulo 1

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¡Advertencia!
Este capítulo contiene violencia explícita, que a algunas personas les puede incomodar. Se recomienda discreción.

Sin más por decir, ¡Disfruten el capítulo!

El día había empezado con una ligera brizna mañanera, sin embargo, conforme avanzaba el día, el clima sólo parecía empeorar

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El día había empezado con una ligera brizna mañanera, sin embargo, conforme avanzaba el día, el clima sólo parecía empeorar. Los árboles que adornaban el jardín de la casa Toshinori eran salvajemente agitados por el viento cruel que soplaba esa noche, la tormenta arrasaba con todo lo que estaba en su camino, haciendo que todos corrieran a refugiarse en sus casas.

Fue cuando un relámpago lo suficientemente fuerte hizo despertar a cierta pecosa, la cual inmediatamente rompió en llanto al ser asustada de tal manera.

Unos segundos después, los pasos apresurados por el pasillo resonaron, la puerta de la habitación fue abierta por su hermana mayor y su madre, quienes al oír el llanto salieron corriendo a buscar la fuente de estos: Izuku Toshinori.

–Izuku, mi amor, ¿qué es lo que pasó? –Inko se sentó a su lado, abrazando a su cachorra soltando su aroma débil aroma a menta para tranquilizarla.

– ¡Un rayo, mamá! Un rayo me despertó y me asustó –exclamó la pequeña secándose las lágrimas con sus manos mientras se acurrucaba en los brazos de su madre.

–No tengas miedo, hermanita –Tsuyu avanzó hacia ellas –mamá y yo te protegeremos aunque tus miedos puedan ser algo raros.

Inko estaba a punto de reclamarle a la pequeña niña pero se vio interrumpida por otro relámpago que hizo a Izuku dar un pequeño brinco y le provocó un gritito. Tsuyu, siendo una buena hermana mayor, soltó una risita.

–Mamá –exclamó Izuku – ¿podrías contarme una historia para dormir? Así podría dormir.

–Claro, mi cielo. ¿Qué quieres que te cuente?

– ¡Cuéntanos cuando conociste a papá Toshi, a mi hermanita y a mí nos encanta esa historia! –De repente el interés de Tsuyu fue captado, ambas se sabían de memoria esa historia aunque siempre era grato escucharla para ellas. Inko tomó una posición cómoda al lado de la cama, por otro lado, Izuku y Tsuyu se acomodaron entre las cobijas, la mayor inhaló para suspirar lentamente.

 Inko tomó una posición cómoda al lado de la cama, por otro lado, Izuku y Tsuyu se acomodaron entre las cobijas, la mayor inhaló para suspirar lentamente

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El soldado de las montañasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora