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Otra vez, me encontraba en el cuarto de Billie, discutiendo. Si, discutiendo con mi "hija". La adopte cuando tenía 17 años, ella tenía 7. Ahora ella tiene 17 y yo 27.
Nos llevamos 10 años.

Flashback

Me encontraba en mi casa, asimilando como mis padres habían muerto, me sentía rara. No feliz, tampoco triste.
Simplemente rara... pero, ¿Cómo se supone que me sienta cuando mis supuestos padres me trataban de la forma más horrible? Supongo que nunca fui planeada, con tan solo 5 años me dejaban a mi suerte con algunas niñeras, pero siempre renunciaban. Aún que podría ser peor, al menos tenían dinero y no carecía de nada económica mente, solo me faltaba cariño, igual los quería.

El abogado me llamó, tenía que ir en 20 minutos a su despacho, para hablar sobre mi herencia, dinero, casas, coches...
Así que sin más, agarre las llaves de mi camioneta y me apresure a salir.

...

Entré, con todos los nervios que podría una chica de 17 años sentir.

El señor me dio un papel, lo leí, decía que las 4 propiedades, el dinero del banco, la empresa y los coches eran míos.
Sonreí, para la vida de una chica como yo, todo eso era lo mejor que le podría pasar.
Firme, solo que había un problema, yo era ilegal todavía. Pero me podría quedar 1 año en Valle de Bravo, para después largarme muy lejos.

Después de todo los iban a extrañar, así que abrí la boca para preguntar:

- ¿Cómo... murieron? -
Pregunte, sentí mis ojos aguarse.

- Un coche les choco, perdieron el control del vehículo. Lo siento por intrometerme señorita, pero ellos no merecen que usted los extrañe, yo veía como la trataban, lo mejor que puede hacer es disfrutar de todo lo que le dejaron. Con permiso. -
Dijo, me dio una pequeña sonrisa y salió.

...

Faltaban 3 meses para que por fin pudiera ser legal. Estaba sacando papeles y esas cosas, para poder salir del país.

...

Faltaba 1 puto mes, no podría estar más emocionada. Pero en ese lapso de 2 meses se me vino la idea de adoptar, seria buena mamá, había sido niñera a mis 14 años, amaba a los niños, y era experta con ellos, menos con los bebés, con ellos me iba fatal. Así que intente adoptar, hice la carta, el papeleo, fui a la casa hogar y explique el porque quería adoptar, mis posibilidades económicas, y en cierta parte mi madurez. ¡Me habían aceptado!
Iría de camino en busca del peque, ya que según mi entevista, yo era apta para cualquier nene, tenía excelente porcentaje de madurez y todo eso. La voz de uno de mis chóferes me sacó de mis pensamientos.

- Señorita, llegamos. -
Dijo viéndome a través de él retrovisor.

- Gracias Luis, oye, te puedes tomar el día libre. Yo iré sola con el peque. -

- Gracias señorita, será una gran mamá. -
Dijo sonriendo.

- Gracias. -
Dije sonrojada y salí de la camioneta.

Entre a la casa hogar.
Vi a niños llorando, jugando, peleando.
Pero una niña aislada me llamó la atención. Me acerqué a ella.

- Hola corazón, soy ____ ¿y tú? -
Mientras espere a que contestara, me di el tiempo de mirarla bien. Era rubia, con pecas, demasiado blanca, tenía unos ojos preciosos; azules, más aparte era de contextura delgada. Se veía de 7 años.

- Me llamó Billie. -
Dijo, mientras me observaba con el ceño fruncido. -

- Que precioso nombre, como tú. -
dije sonriendo con la comisura de los labios. Ella se sonrojo. -

- Gracias... -
Dijo, algo me dijo que ella era la pequeña indicada así que le dije:

- ¿Quieres venir conmigo? yo.. me pareces la niña más linda que he visto. Te juro que te divertirás mucho y no te arrepentirás. -
Dije ansiosa, esperando su respuesta.

- ¿¡Vivir contigo!? -
Dijo emocionada, eso me emociono más.

- Si.. si tu quieres. -
Dije con una sonrisa tonta.

- ¡Si! -
Salto encima de mí abrazándome, camine con ella en brazos hacia la oficina.

Fin del flashback

Por un gran tiempo le consentí, le mime los celos, pero estaba pasando los límites.

No soy tu 𝗵𝗶𝗷𝗮 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora