Bajo los fríos copos de la nieve (Pablo Gavi)

𝑬𝒓𝒊𝒌𝒂 𝑷𝒂𝒍𝒂𝒖

- ¡Gavi toma el balón y corre tan rápido como si su vida dependiera de ello! ¡Dios mío! ¡Este chaval no para de sorprendernos!

Vamos Gavi, vamos un poco más, solo corre y mete este puto balón a la portería y seremos campeones del mundo, vamos joder ¡Vamos!

- ¡Gavi aquí! - Me grita Pedri, intento pasársela pero mi cuerpo no me hace caso, es como si mis piernas tuvieran vida propia...mierda sino la paso será un fuera de juego.

- ¿Qué es lo qué veo? ¿Ese es no es Vinícius Júnior? ¡Sí, sí que lo es y va directo hacía Gavi!

Giro hacia mi derecha y veo como Vinicius se acerca a mi con una velocidad sobrehumana, mis piernas corren aun más pero empiezan a arder. De un momento a otro caigo directo al suelo con un dolor que jamás pensé que iba a sentir, siento como si los huesos de mi rodilla derecha se convierten en polvo. La afición empieza a gritar mi nombre, en vez de estar acompañado de halagos y palabras de apoyo, son insultos...insultos que me recuerdan lo inútil que soy.

- ¿Gavi? Gavi...- Escucho como Pedri me llama pero el dolor me distrae.- Gavi...¡Joder Pablo despierta!- Siento como alguien zarandea mi hombro derecho haciendo despertar de esa horrible pesadilla. - ¿Tío estás bien? - Me pregunta de forma preocupada.

- Sí sí tranqui. - Le digo mientras agarro mi botella de agua y bebo de ella.

- De puta madre entoces. Venga prepárate que aterrizamos ahora y por lo que me han contado tu gatita te espera. - Me dice en un tono burlón haciendo que los demás se rían.

- ¿Qué coño? ¿Y tu cómo sabes eso? - Le pregunto a la defensiva.

- De Jong. - Me responde con su sonrisa burlona.

- Rubio del bote me cago en tus muertos.

- A mi me lo dijo Alejandro. - Me dice él alzando sus manos en modo de rendición.

Me giro hacia Balde y este me manda besos al aire.

- A la próxima ve a un lugar más privado para hablar con tu ''muñeca''. - Después de decir eso él y los demás no parar de reír y vacilarme. ¿Dios por qué me diste unos compañeros tan chismosos?

Minutos después el avión aterriza en el aeropuerto de Barcelona, los chicos y yo nada más entrar dentro del aeropuerto hemos sido rodeados por los fans, paparazzis y reporteros...en fin el precio de la fama supongo. Me dispongo de buscar con la mirada a Savannah, pero con la cantidad de personas que hay me resulta difícil. Avisé a los guardaespaldas minutos antes además de mostrarles una foto de ella para que le dejen acercarse a mi. Al no tener los resultados que yo quería decido mandarle un mensaje.

'Hey, dónde estas? Yo ya bajé del aeropuerto y te estoy esperando muñeca.'

Espero su respuesta sin poder evitar morderme las uñas, no sé porqué pero estoy sintiendo una rara sensación en mi cuerpo. Antes de volver a fijarme en la pantalla alguien toca mi hombro.

- Hola soy Erika, no sé si me conocerás pero soy una gran fan tuya. - Una chica rubia de ojos azules y casi de mi misma altura me saluda dejándome confuso, ¿Cómo fue que la dejaron acercarse a mi? No me malentiendan, me encanta estar en contacto con mis fans, pero en esta situación normalmente no dejan que se nos acerquen tanto para evitar problemas.

- Es una famosa tiktoker que confesó tener un crush en ti. - Me informa Pedri en un susurro mientras la mira de una forma que los chicos y yo solo entendemos...no le cae bien.

- Vaya, me alegra que seas una fan mía. - Le digo dandole mi 'mejor' sonrisa. - ¿Quieres una foto? - Le pregunto con todas las ganas de terminar esta situación y poder molestar a mi muñeca.

- Me encantaría, pero en realidad quisiera tener tu número. - Erika no para de mirarme a los ojos y en ellos veo una intención oculta.

Los fans al escuchar eso empiezan a gritar emocionados y todos ellos me piden que le diera mi número. Realmente estoy dudando, siento que si se lo doy crearía muchos problemas, pero sino se lo doy la prensa aprovecharía para dejarme mal parado. Una vibración en mi mano interrumpe mis pensamientos.

- Perdona. - Le digo para después concentrarme en mi móvil.

Escucho un 'no pasa nada' de su parte pero no le tomo mucha atención ya que Savannah por fin me responde.

'Pablo sé que me querrás matar pero me he perdido dentro del aeropuerto y me da vergüenza preguntar... puedo pasarte foto de dónde estoy y que vengas a buscarme? Te prometo que te lo compensaré pero por fi ven YA.👹'

'En serio me siento una estupida estando parada aquí'

No puedo evitar reírme, está chica no para de sorprenderme.

'Espero que valga la pena salvarte damisela'

Le escribo y a los dos segundo ella me envía la foto. Dispongo a darme la vuelta e ir donde se encuentra ella, pero esa misma mano que tocó mi hombro ahora me agarra de la muñeca.

- ¡Espera! ¿No me darás tu número? Pensé que podríamos conocernos más y ser amigos, quien sabe podríamos ser mejor amigos... o algo más.

- Perdona, pero ahora estoy concentrado en el fútbol. - Le respondo cortante, vuelvo a intentar irme donde Savannah pero otra vez vuelven a interrumpirme.

- Gavi es tarde tenemos que irnos. - Me avisa el mister.

- Tranqui han venido a recogerme. - Le informo para que me deje ir.

- De acuerdo descansa que en dos días tienes que volver a darlo todo. - Me sonríe por última vez antes de marcharse con los demás.

Creo que fue una mala idea dejarme que los chicos me dejen solo, ahora tengo que lidiar yo solo con los fans, las prense y por lo que veo con mi fan premium.

- ¿Alguien ha venido a recogerte? ¿Puedo saber quien es? Si quieres te acompaño hasta esa persona.

- No lo siento, es mi madre y a ella le gusta la privacidad. - Le digo para al fin marcharme del lugar.

Me costó un poco librarme de esa avalancha de fans pero por fin puedo encontrarme con Savannah y eso me alegra bastante. Estoy en el lugar al que se suponía que debía estar Savannah pero no la veo por ningún lado. Cuando me disponía a darme la vuelta para buscarla, escucho una risa bastante conocida... pero esa risa está acompañada de una risa masculina.

Savannah está en el suelo acompañada de un chico que no es Adam y se ve que los dos se lo están pasándolo bien y no sé porqué, pero no me gusta nada verlos así.

💜⚽️💜

Mierda, ¿Cómo puede ser que me haya perdido en un maldigo aeropuerto de la ciudad en la que vivo? Dios es todo por culpa de ese tonto ¿Tanto le costaba no verme hasta mañana?

- Hola niña ¿Te has perdido? - Escucho a alguien no le tomo mucha importancia hasta que me fijo que aquí solo estoy yo...¿Espera me ha llamado niña?

Me doy la vuelta para decirle a ese sin vergüenza que yo era ninguna niña, pero me encuentro con la sorpresa de que esa persona era Jonathan.

- Te hice una pregunta amiga. - Me sonríe con su caracterizada sonrisa arrogante.