3

107 10 0
                                    

Mario: Ola de mar.

Smg4: .... Hola de nuevo Mario.

Mario: ¿Qué cuentas?

Smg4: Nada, ¿y tú?

Mario: Números.

Smg4: Se ríe Ay Mario, no tienes remedio.

Mario: ¿Remedio para que?

Smg4: Olvídalo mejor.

Mario: Bueno.

Entonces se quedaron callados unos segundos, ya que, pues ninguno de los 2 son personas calmadas (Smg4 si, pero no mucho tiempo), así que, minutos después, se habían ido a buscar a alguien porque si.

Mario: Hola wenas tardes.

Smg3: No pues.... Hola Mario, oh, hola Smg4.

Smg4: Hola, supongo.

Mario: Ha, gay.

Smg4: Tu hermano.

Mario: Canon.

Smg3: Bueno, al menos tiene razón Se ríe

Mario: ¿Pa cuando la boda?

Smg4: Prefiero morir solo.

Smg3: No seas exagerado tampoco.

Smg4: ¿Quién dice que exagero?

Mario: Smg3 y yo.

Smg4: Tu ni hablaste.

Mario: Pero lo pensé.

Smg4: ... Por eso nadie te quiere.

Mario: No es cierto, tu me quieres porque eres mi amigo, y los amigos se quieren.

Smg4: Pero-

Mario: Además, el otro día estábamos volando y todo y te gusto :>

Smg3: Que ganas de ser Mario ahora mismo.

Smg4: No.

Smg3: Ow :<

Mario: Mario tiene hambre, Mario quiere palomitas.

Smg3: Yo igual.

Smg4: .... Parecen niños de primaria, pero tienen suerte de que tengo buen humor y dinero, vamos.

Entonces Smg4 se llevo a estos 2 a esas tiendas que se ponen en el parque para vender botanas o dulces, luego Smg4 les compro a estos weyes sus palomitas y el prefirió comer unas gomitas de pingüino.

Mario: Invita.

Smg4: No, ya les compre, ahora se aguantan.

Smg3: Chale.

Mario: Tu sabes que te quiero mucho Smg4.

Smg4: Solo cuando te conviene.

Mario: No es cierto!

Smg4: Si lo es.

Mario: No.

Smg3: No peleen.

Smg4: Cállate, tu opinión no cuenta ahora mismo.

Smg3: ¿Desde cuando la opinión de Mario cuenta?

Smg4: ¿Desde cuando TU opinión cuenta?

Mario: ¿Desde cuando me defiendes Smg4?

Smg4: Desde siempre.

Mario: Aww

Smg4: Cállate antes de que me arrepienta de decir lo que dije.

❤️💙Como enamorar a tu guardián (Mar4)💙🤍Donde viven las historias. Descúbrelo ahora