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Un religioso caminaba por la isla junto a su amigo del alma, Zekee, Le habian dado una semana de descanso a los campistas, asi que no tenian nada que hacer, Julia no estaba, solo eran ellos dos, y era algo aburrido, asi fue hasta que el espantaviejas termino con el silencio
—Bueno... te gustan los momos? - Zekee solo dijo lo primero que se le ocurrio, ganandose una mirada confundida de parte de Justin —Yo... nisiquiera se que es eso, dios te perdone - Fue lo unico que dijo, para seguir caminando en silencio, algo incomodo, algo tortuoso para los dos —La vieja... es una pecadora, no creo que haya sido buena idea dejarla participar - el Religioso estaba genuinamente preocupado, el era fuerte, pero ella era el diablo encarnado
—Tiene mal temperamente, pero no te preocupes papu! Si algo pasa, yo te protejo - Zekee poso como si tuviera musculos, haciendo reir a Justin, sinceramente la unica forma en la que pensaba que Zekee lo pudiera defender era si se sacrificaba, eso no ayudaba mucho, pero era tierno ver como su amigo estaba dispuesto a defenderlo —Posiblemente te mataria... pero rezaria por ti, talvez tengas una oportunidad
Ambos carcajearon alegres, risas comodas, llegando a su cabaña, compartian cabaña pues era mas barato, aunque obviamente no dormian juntos, entraron, sentandose en el sofa principal, habian caminado por un buen tiempo, estaban bastante exhaustos —Quien crees que gane? - Fue Justin quien inicio la conversacion —Defnitivamente Miriam... o Talvez Sierra, es una morra chida - Respondio con sinceridad el grasoso —Yo le voy a Heather, parece no tener enemigos, y es muy cercana a Sierra - Justin estaba bastante convencido de sus propias palabras
—Crees... que lo estoy haciendo bien? - zekee estaba acostumbrado a los cambios de humor de Justin, asi que no se sorprendio al notar como Justin se ponia serio de golpe —Tranquilo mi skibidi, lo estas haciendo genial, talvez esos morros ZZZ sean algo llorones y raros, o talvez los nombres sean algo... cristianos? Aun asi, no podria elegir un mejor representante para este programa - Consolo el menor en altura, Justin sintio sus mejillas enrojecer, aunque rapidamente se intento controlar, para Justin, la homosexualidad era un pecado, este pensamiento fue inculcado por su familia y religion, aun asi respetaba a las parejas homosexuales, sin embargo, por la presion que siempre pusieron en el, se sentia nervioso y con miedo al pensar estar enamorado de su mejor amigo, pues seria fallarle a su propia gente
—Y-Yo... gr-gracias, siempre s-sabes que decir - Justin solo pudo decir eso, decir que Justin se sentia encantado con la presencia de Zekee era poco, aunque el mismo no lo aceptara —No me agradezcas papu, venga, Abrazito - Ofrecio el menor, Y justin no tardo en aceptar, Zekee se recargo en el pecho de Justin, emocionado, pues le gustaba recibir abrazos del contrario, mientras el religioso sonreía aceptando la calidez del cuerpo ajeno
Siguieron hablando toda la tarde, sin separarse, compartiendo risas y anecdotas, como siempre ha sido, como amigos, aunque personalmente, ninguno de los dos se sentia comodo con esa etiqueta, preferian por mucho una mucha mas personal, aunque no lo dijieran en voz alta
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