El Reencuentro

26 3 0
                                    

                   Capítulo I "parte III"

En el momento en que Kaan iba a dar vuelta en una intersección, un coche que iba en la misma dirección chocó contra él en la parte de atrás.

—¡Carajo!, ¿Qué le pasa a ese imbecil? — dijo quejándose del dolor en su cuello.

—No fue tan fuerte el golpe y tienes dolor en el cuello, JÁ, no seas tan dramático y vámonos— le decía Dorian a Drystan.

—Parece que el señor no quiere terminar este asunto rápido — Kaan miró el retrovisor y después de decir esas palabras volteó la mirada sin interés.

—Iré a conversar con el señor ustedes quédense aquí —decía Dorian mientras salía del auto ya que él era el más calmado del grupo y el que más podía llevar una conversación tranquila con una persona.

—¡Malditos! Miren como quedó mi coche —dijo el señor enfurecido.

—Discúlpeme señor, pero usted fue el culpable de este accidente. Mi amigo se lastimó por su culpa y al parecer usted salió ileso, así que no creo que esté en posición de quejarse. Agradezca que no fue un accidente grave, si fuera ese el caso...

—¿Quién te crees que eres para hablarme así, niño estúpido? Al parecer no te enseñaron a respetar a tus mayores.

Dijo estas palabras mientras golpeaba el hombro de Dorian con su mano para intimidarlo.

—Oye, ¿Qué crees que estás haciendo?

—Drystan entra al auto déjamelo a mi.

—Como vas a dejar que te esté humillando, oye tú, métete con uno de tu tamaño si es que eres tan valiente—decía enfadado Drystan.

—Mira lo que tenemos por aquí, otro niño mal educado. Dejen que los adultos se hagan cargo de esto. Señor, ¿por qué deja que estos niños hablen por usted? Salga y hable conmigo —le gritaba a Kaan, quien tenía las ventanas cerradas, no dispuesto a intervenir.

—Sal, tenemos que irnos ya —Kaan estaba cansado de estar pendiente de Darius como para preocuparse por algo tan insignificante.

—Mmm... —Salió Darren del coche para hablarles a Drystan y Dorian—, tenemos que irnos, entren al coche.

—Darren, ¿No ves que este viejo está siendo grosero con nosotros? Tenemos que darle una lección —decía Drystan enojado.

—El que necesita una lección eres tú, niño mal educado —alzó la mano para darle un manotazo a Drystan, pero fue detenido por Darren con mucha fuerza, haciéndole sentir la mano adormecida—.

––¡Suéltame, ustedes son unos desgraciados, están agrediendo a un señor mayor! ––Gritaba mientras se safaba del fuerte agarre de Darren.

—Ahora sí eres un pobre señor, pero qué se puede hacer, ya me hiciste enojar —Drystan miró a Darren para pedir su consentimiento, y al ver que éste asintió, su semblante cambió a uno de persona maliciosa.

—Ahora sí eres un pobre señor, pero qué se puede hacer, ya me hiciste enojar —Drystan miró a Darren para pedir su consentimiento, y al ver que éste asintió, su semblante cambió a uno de persona maliciosa

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: May 16 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Un Amore Senza MoraleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora