El que se enamora pierde y cuanta razón tenía quien lo dijo,
Porque volví a enamorarme y perdí el sentido y la cordura sin rumbo fijo.
Me tiré al abismo sin pensarlo dos veces por intentar volar a tus brazos,
Y no importaba si caía y mi corazón se volvía a romper en mil pedazos.
Me volví a enamorar pensando lo increíble que eras sin ver los defectos que te rodeaban,
Porque para mí no eran defectos, sino destellos genuinos que te iluminaban.
Me enamoré y perdí, perdí el buen juicio que mantenía mi mente intacta,
Me enamoré y mi alma volvió a quedar rota e inexacta.
Me deje llevar por sus bonitas palabras que herían cual afilada espada,
Porque parecían dulces y tiernas pero esperarlas dejaban mi vida desesperada.
No se enamoren porque la vida no es justa ni con el más bueno,
Aunque parezca bello al principio pero termina contigo cual mortal veneno.
Deberías pensarlo dos veces antes de caer rendido ante los besos de un mentiroso ser,
Porque la lujuria y el engaño llegan muy lejos y no volverás a lo que solías ser.
