capitulo 1

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-Meses atrás-

Mal.... Todo estaba simplemente mal.

Había pasado solo una semana desde el exterminio y la reconstrucción del hotel cuando llego a Charlie un citatorio para comparecer ante el tribunal celestial.

Ya se lo esperaban, sabían que solo era cuestión de tiempo y todos estaban listos para escuchar lo que el cielo tuviera que decir, dispuestos a enfrentar las consecuencias de haberse defendido y de matar al primer hombre o al menos eso creían.

La primera sorpresa les llego con la petición de que la princesa Morningstar acudiera sola.

Intento por todos los medios que tenía apelar, pidió poder acompañar a su hija o ser el quien subiera en su lugar, no podía dejar que fuera allí sin tener algún apoyo, incluso Alastor sugirió recordarles que tanto el cómo Charlie eran los responsables del hotel y la "rebelión", adicionando que él era el dueño del alma de la pecadora que extinguió la vida de Adán por lo tanto tenía que estar ahí.

Pero todo fue en vano. Como siempre no lo escucharon y no dieron su brazo a torcer, le recordaron que debido a su caída tenía prohibido volver a pisar su antiguo hogar, pero le aseguraron que su hija regresaría a casa sana y salva, y con eso la cuenta regresiva comenzó.

La segunda sorpresa vino al leer todo el papeleo para la reunión, en específico el apartado donde venia brevemente descritos los temas a tratar y uno en especial capto la atención de todos "la redención".

Charlie estaba más que emocionada, pensando que tal vez el cielo había cambiado de opinión, que le darían una oportunidad a su proyecto y que todo cambiaria a partir de ese momento. No quiso bajarle el animo a su hija, pero sospechaba que las cosas no iban a ser tan fácil, nunca lo eran, pero al verla tan feliz solo pudo callar.

Así que no tuvieron más opción que aceptar y dejar a Charlie hacerse cargo.

Días antes del juicio Charlie lo paso frente a su tablero, lleno de anotaciones regadas por este, miles de post-it de diferentes colores, y hojas dispersas por todo el piso. La joven casi no había dormido por pensar en los mil y un escenarios que podrían darse, sobre pensando sobre cada una de las acciones que podrían tomar, había estado aguantando a base de café, se sintió mal, ya que ni siquiera sabía que le gustara, después de todo cuando vivían en el castillo ella prefería el chocolate caliente, pero claro eso había pasado hace mucho, cuando solo era una niña.

El abuso de cafeína le estaba pasando factura, lo notaban en sus temblores cada vez más recurrentes y en el tic de su ojo. Vaggie logro hacer que fuera a la cama por un par de horas antes de que colapsara, estaba demasiado ansiosa y solo faltaba un día para la cita.

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Al día siguiente, estaban sentados esperando la hora en que se abriera el portal, se sentía el nerviosismo y la impaciencia en el ambiente; parecía que todos querían decir algo, lo que fuera con tal de ya no sofocarse ante el abrupto silencio que reinaba en el vestíbulo.

Charlie fue la primera en hablar, asegurándole a todos que estaría bien. Dio un abrazo a cada uno; cuando llego el turno de su padre pudo sentir como temblaba levemente, por su mente paso la idea de no soltarla, no dejarla ir, temía por lo que pudiera pasar, que estuviera ahí indefensa y sola, como él lo estuvo alguna vez. Sabía que el cielo no era el lugar maravilloso en el que su niña se empeñaba en creer, pero a pesar de todo lo que habían pasado ella seguía creyendo que serían justos; que la escucharían y comprenderían.

No podía hacerla cambiar de opinión, ya lo había intentado una vez y después de todo era su hija, terca y determinada en defender sus ideales hasta el final, así que solo pudo apretarla más en sus brazos y desearle la mejor de las suertes.

Entre pétalos y sangre [Radioapple]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora