-Sunghoon es perfectamente descrito por seis cortas letras "oscuro" desde su vestimenta, hasta su hostil personalidad. Muchos lo verían cómo un jefe sumamente atractivo, sin embargo, su mal genio, arrogancia y poca paciencia hacia que la mayoría de...
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Sunghoon se sujeta del volante, mirando desde el espejo retrovisor la escena de padre e hijo riendo y conversando animadamente, ambos en su propia burbuja. Sunghoon escuchaba atentamente todo lo que Ni-ki y su pequeño hijo conversaban y se permite mirar el brillo en los inocentes ojos del menor al escuchar a su padre prometerle que le compraría algodón de azúcar y que ganaría cientos de peluches para él. El alfa sonrie inconscientemente, junto con una extraña sensación cálida en el pecho.
-"Señor gruñón!"- una animada sonrisa Hyunjin le llama con -"¿Ya llegamos?" -
Sunghoon sonrie y niega lentamente. Realmente prefería mil veces el apodo de "Hoonie"
-"Aún no, pequeño"- dice sin dejar de mirar al frente y sin borrar su sonrisa -"La feria está un poco lejos, está fuera de la ciudad"-explica.
Hyunjin asiente ante la respuesta con un ligero puchero en sus labios, pues aunque el realmente está emocionado por llegar ya a la feria, sabía que debía ser paciente. Tal y cómo su papi le ha enseñado.
El camino no era para nada silencioso, había música infantil sonando en el auto, a petición del pequeño Hyunjin quien con un simple puchero logró convencer a Sunghoon para poner música. Ni-ki tarareaba y miraba con una sonrisa brillante a su pequeño hijo, quien disfruba de la música y cantaba a todo pulmón con su vocecita ligeramente chillona.
Pero pronto el alfa da un ligero brinco desde su asiento al escuchar al omega y al pequeño chillar de emoción.
-"I got a ponytail, I got a pony tal!"-comienza a cantar Hyunjin con una gran alegría, mientras intentaba bailar desde su asiento la coreografía que su tío K le había enseñado.
-"I got a Pp-p-p-pp-p-ponytal"- Ni-ki le siguió alzando sus brazos al aire con Hyunjin imitandole y siguiéndole cómo podía.
-"¡Vamos señor gruñón! ¡Cante!"- le dijo el pequeño Hyunjin y sin pensarlo mucho Sunghoon se les unió, mientras reproducían una y otra vez aquella pegajosa canción infantil que el menor le comentaba una y otra vez que su tío K le enseñó.
Cuando finalmente llegan, Sunghoon paga la música y estaciona su auto memorizando en que fila del estacionamiento se estacionó. El alfa es el primero en salir y con grandes pasos rodea su auto para abrir la puerta del copitolo, ignorando la mirada confundida de su asistente y simplemente le sonríe inocente. El pequeño Hyunjin ya los espera con los brazos abiertos y con su bonito rostro expresando toda la emoción que sentía, pero esta vez no extiende sus brazos en dirección a su padre, si no hacia Sunghoon y este mira al omega pidiendole su permiso, pues él pequeño quería ser cargado por él.
-"Está bien, puedes hacerlo"- Ni-ki le da luz verde y el alfa asiente con una ligera sonrisa.
Sunghoon toma al pequeño en sus brazos después de desatarle el cinturón de seguridad a Hyunjin. El menor suelta una risita al ser llevado por el alfa en sus hombros y prenden marcha hasta la entrada de la feria, con Sunghoon jugando con Hyunjin al avión mientras que el pequeño extendía sus bracitos por los lados y el alfa hacia soniditos de avión con su boca. Ni-ki sólo iba detrás de ellos asegurándose de que su hijo no cayera de espalda, listo para extender sus brazos y salvarlo. El alfa paga las entradas y Ni-ki se compromete a pagar la cena, pese a saber que la invitación había sido hecha por el alfa.
