Me puse de pie, tomé mi copa y de un trago me terminé el vino. Sentía el delicioso y dulce sabor recorrer toda mi boca, lo saboree por unos cuantos segundos y lo dejé resbalar poco a poco por mi garganta, sentía el fresco vino por dentro, era una sensación maravillosa, pero no se comparaba con esta sensación de saber que tengo a la persona que amo frente a mi dispuesto a recibir el castigo que se merece.
Algo duro. Él así lo dijo desde antes que iniciara el juego. Y algo duro le daré.
Le tendí mi mano, Tae aún estaba un poco enfurruñado por su derrota, pero poco a poco se relajaba, está consciente que perdió y bien, no hubo algún truco ni nada por el estilo, me subestimó y bueno aquí están las consecuencias. Cuando se levantó lo tomé de la cintura y con fuerza lo hice girar para que me diera la espalda, la acerque a mí y sentí su espalda desnuda en mi pecho. Lentamente mis manos fueron de su cintura hasta su abdomen, quiero hacerle algo a esta preciosa y suave barriga, mi dedo dibujo su ombligo, su hermoso y pequeño ombligo, también tengo que hacer algo con él. Con las palmas de mis manos bajé hasta sus caderas, aun tenía sus pequeños calzones puestos, eran de un encaje fino, más bien era como un cachetero color lila, un color tierno y dulce, me gusta.
Deslicé mis dedos índices por dentro de la prenda y con fuerza la rompí. Escuchar cómo se rasga el encaje es un sonido muy excitante.
—¡Oye! —me regañó.
—Tranquilo cariño, esto forma parte de mi castigo... dejarte sin ropa interior. —Quiso decir algo más, pero se contuvo. Sabe que no puede decirme nada, solo esperar el castigo que le corresponde. Aventé el pedazo de encaje en que se convirtió su cachetero y lo lance a no sé dónde y tampoco es que importe mucho ¿no? Con mi nariz acaricie su cabello y la hundí hasta sentir su nuca, inhale su delicioso aroma y posé un dulce beso en su cuello, fui hasta su oreja y la acaricie también y pose otro beso detrás de ella.
—Para que veas que soy un niño bueno, te daré la opción de atarte, pero, si tu respuesta es no, debes prometerme no moverte —le dije susurrándole en su oído mientras una de mis manos que aun con la palma acariciaba la piel de su estómago, bajo lentamente hasta su entrepierna y sin darle tiempo a nada tomé su erección y comencé a bombear.
Taehyung se arqueó lleno de placer, recargando su cabeza en mi pecho al tiempo que la echaba hacia atrás, cerraba los ojos y abría la boca con un grito en silencio. Estaba húmedo y eso que apenas y lo he tocado, me encanta ponerlo así. Retiré mi mano de su miembro y recogí su liquido preseminal, ahora llevé mis dedos hacia su agujero y comencé la tortura en su ano.
—¡Jungkook! —gimió y yo sonreí de lado, mis dedos están haciendo un excelente trabajo.
—¡Shhh! —saqué mis dedos y volví a meterlo haciéndolo arquearse más —Dime mi amor, ¿atado o no?
—At... atado —dijo con esfuerzo, estaba inmerso en su viaje de placer al cual yo lo estoy guiando.
—Buena elección.
Mis dedos continuaban llenándolo, con la mano que aun tenía en su estómago lo apreté más a mí, sentí su trasero en mi erección que aún estaba prisionero por el bóxer, él al sentirlo movió las caderas sobre mi miembro, ya lo desea, pero para que ese momento llegué aún falta. Mordí su hombro y volvió a gemir, sentí como su ano se contraía en mis dedos, se que está a punto de terminar.
—No te vengas.
—¿Eh? —preguntó confundido.
—Esta vez no te vas a venir hasta que yo te lo ordene, si te vienes antes no habrá Garu después de tu castigo ¿entendido?
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TERRENO PELIGROSO. [ J.JK + K.TH ] (ADAPTACIÓN)
FanficJungkook es un exitoso arquitecto, tenia la vida perfecta, dinero, una novia hermosa y una gran familia, hasta que un día descubre que tiene una peligrosa atracción por su sobrino, Taehyung, pronto se darán cuenta que están pisando terreno peligroso