Ephemeral - KTH+JJK

My New Live

Restregó sus manos nerviosas en su abrigo, volviendo a secar el sudor en ellas debido a la emoción.

Jungkook mordió su labio inferior, suspirando por milésima vez y el oxígeno en sus pulmones parecía quemar en ese momento, ese día parecía ir de cabeza, con su corazón agitado y el estómago revuelto.

Soltó una risa para si mismo, observando a lo lejos de la recepción del aeropuerto, permitiendose ignorar el bullicio de la gente al rededor, aguardando por amigos y familiares.

Tragó con fuerza y, mierda.

Iba a vomitar su propio corazón en cuanto divisó a lo lejos la silueta de aquella persona, de la razón por la qué yacía allí aquel día de invierno. Suspiró de nuevo, tembloroso esta vez, el sudor de las palmas remplazado por un picor ansioso y vaya mierda que era el sentimiento.

Cuando confirmó la ropa que le mostró en la foto antes de llegar, sonrió inconsciente, ansiado poder divisar mejor aquellos preciosos ojos qué se acercaban cada vez más.

Y Jungkook se enamoró de nuevo.

¿Podías enamorarte de nuevo de alguien que ya amabas? Al parecer sí, incluso más fuerte.

Porque Jeon Jungkook estaba conociendo en persona a Kim Taehyung luego de siete años de amistad por chat.

Jeon Jungkook podía morir feliz.

Alzó su mano con una sonrisa, su nariz poniéndose más roja por el inminente llanto. Tan pronto el contrario cruzó las puertas, él corrió como si su vida dependiera de ello, y lo hacía, porque después de verlo de lejos, Jungkook podría morir si no lo abrazaba para confirmar que esto era real.

Se frenó justo frente a él, apretando los labios y arrugando las cejas para no dejar ganar a su lloriqueo. Esperó por un permiso que fue recibido cuando Taehyung abrió sus brazos y no esperó más para apretar al contrario entre los suyos.

Joder.

Su llanto se desató con fuerza en el instante que sintió su calidez, su aroma, su cabello rozarle el rostro. Joder, porque el mayor lo abrazó igual o más fuerte que él, llevando una mano a enterrarla en el cabello de su nuca y cuabdi juró sentirlo temblar bajo la ropa, Jungkook lloró con más fuerza.

"Hola, bonito" El menor chilló aún más fuerte, escuchando la voz directo a su oído, esta vez en persona, en vivo y en directo. "No llores más, ya estoy aquí, kook, ya estoy aquí"

Sorbió su nariz, ajustando el abrazo, suspirando cuando fue separado con suavidad y luego de observarlo directamente a los ojos, Jungkook sonrió, entre lágrimas parecía una mueca rara, pero se sentía tan feliz ahí, en ese preciso momento.

"Hola... hola, mi vida" tembló en el milésimo suspiro, cerrando los ojos para juntar su frente con la ajena, amando sentir la piel con piel, deseando más cuando buscó tomar sus manos frías, sosteniendolas fuertemente para obsequiarles calor. "Finalmente te tengo conmigo"

Y podría morir ahora mismo, porque Jeon Jungkook solo podía vivir para la persona frente a él, porque Kim Taehyung era su vida.

Y ni todos los años del mundo iban a cambiar eso.