Las dos caras

Parte 1 Nuevo día

Mi primer día en un instituto extraño y sin nadie que pudiese hablar, genial. todo el mundo me miraba raro y riéndose de mi a mis espaldas, a lo mejor seria... por que tenia una mecha azul o tenia el pelo muy rizado. No lo se pero vamos lo único que me limitaba a hacer era a quedarme quieta y callada en mi asiento en la segunda fila de la clase. Encima en parejas. A mi lado estaba un muchacho mucha atractivo, pero ni si quiera me dió una mirada o un "Hola, que tal". La profesora entro en la clase y el silencio se apodero de ella, se sentó en un mesa a la izquierda de la clase y se presentó.

- Hola , yo soy vuestra nueva tutora, Lucia. Algunos ya os conozco de otros años , pero otros habéis venido nuevos.

En ese momento sentí ojos clavándose en mi nuca en todas direcciones, había un silencio extremo llenando toda la clase.

-María, no te vas a presentar a la clase.

Dios , me quería morir, ella menciono mi nombre, pero si ya me menciono ella para que me iba a presentar ya que lo había hecho ella. Que tontería.

-si... Hola me llamo María. - dije tímidamente en mi asiento tapándome la mitad de la cara con el pelo.

-No seas tímida, vamos di tu nombre más alto.

-Me llamo María. - dije otra vez un poco más alto.

Lucia preguntó a la clase si habían oído lo que yo había dicho, claro que ellos dijeron que no solo para fastidiar. Ella me obligo a ponerme de pie en mi propia mesa, que para más desgracia casi me mato, y a decir mi nombre en voz alta para que todo el mundo lo oyese mejor.

Fue la peor clase de mi vida, nada más terminar con el espectáculo todos empezaron a reírse de mi, y la profesora siquiera dijo nada para remediarlo.

Cuando me senté de nuevo , él no paraba de mirarme de reojo y soltando risitas a lo tonto. Aunque me seguía pareciendo mono.

-Robert, ven un momento.

-Si claro.

No me lo podía creer, se llamaba igual que mi actor favorito, Robert Pattinson, si me gustaban los vampiros, y mucho sobretodo si les brillaba la piel como los diamantes. Pero él, era tan guapo y tan simpático con esa sonrisa y ese pelo rubio rizado. No podría parar de mirarle a los ojos ni un segundo.

De repente sonó el timbre del recreo, la verdad es que se había pasado el tiempo muy rápido. Cuando...

-Hola me llamo Estefania, María ¿verdad?

-Si...

-Si quieres para no estar sola te puedes venir conmigo y mi amiga, ella se llama Clara. No seas tímida ven con nosotras.

Me dirigí con ellas al pasillo. No había nadie solo profesores rondando por allí para que los alumnos no se metieran en las clases a hacer el ganso en esa media hora de recreo al sol.

Salimos al patio enorme del instituto y todos se me quedaron mirando, ellas me cogieron de los brazos y me llevaron hacia un pequeño rincón del patio y empezaron a atacarme con preguntas. Como es que estaba en este colegio , si me gustaba algún chico de aquí o tenia novio, porque tenia esa mecha azul ... etc.

Esa media hora se me hizo eterna, cuando sonó de nuevo la campana de entrada a las clases, subiendo las escaleras tranquilamente, bueno no tanto no la avalancha de chicos y chicas subiendo por las escaleras. A unos tres muchachos más adelante mía estaba él, Robert. Mi cámara visual se paro por unos instantes, hasta que... Alguien me puso la zancadilla nada mas subir todos los escalones, haciéndome caer escaleras abajo quedando Estefania y Clara con los ojos desorbitados viéndome caer y todos riéndose de mi.

Ellas cogieron y fueron en mi busca para ayudarme a levantarme del suelo, pero lo hice por mi misma, suavemente con el pelo tapándome la cara y asomando una mirada nunca vista en mi rostro por nadie , ni siquiera por mi misma. Era la mirada de una asesina, loca y retorcida. Jure vengarme de todos los que se rieron de mi.