Pétalos del corazón

Capítulo 3: Creo que te conozco

''En algún lado te vi, creo que fue en mi mundo'' 

Cuando nos terminamos de presentar el maestro nos dio lo que quedaba de la clase para que platicáramos entre nosotros y conviviéramos un rato, yo pensaba ponerme de pie para ir al baño cuando escucho una voz o bueno, esa voz. -Hola, creo que ya me escuchaste pero por si acaso,me llamo Kang Seojun, vengo de la secundaria Choong Ang, espero que nos llevemos bien-.

Puedo sentir cómo mi cara se sonroja (lo acabo de confirmar, es muy lindo de cerca este chico) a pesar de la pena le respondí -Mucho gusto, me llamo Gwon Bora, yo vengo de la escuela secundaria Duksung y bueno, espero que nos llevemos bien también- me responde -¿Escuela Duksung?, creo que es la escuela para niñas ¿no?-.

Y sí, estuve en una escuela para niñas, en ese entonces me quedaba cerca de mi anterior casa y según mi mamá me vendría bien un cambio de aire ya que siempre estuve en escuelas mixtas pero cuando estaba en segundo de secundaria nos tuvimos que mudar de casa (como aclaración, mi mamá trabaja en un buffet de abogados y constantemente nos tenemos que mudar por los casos en los que ella debe estar, así que nunca tuve una casa fija hasta ahora) obviamente no le iba explicar todo eso así que... Sólo atiné a decir que sí, estuve en una escuela para niñas. -Wow, eso suena genial, espero que no te incomode si me siento aquí o algo- y yo le respondí que no, no me incomodaría -Oye, me resultas algo familiar, ¿te conozco de algún lado?-tenía ganas de decírle que sí, que me tropecé con él por estar distraída al salir de la tienda pero mejor no, sólo como corazonada le dije que él también me resulta familiar pero no sé de donde, debo admitirlo, a pesar de lo que pasó en la tienda me da un sentimiento de haberlo conocido desde mucho antes, de verdad, muy aparte de la tienda siento que lo he visto antes pero no sé de dónde, igual decidí cambiar el tema de la conversación, desde gustos, comida favorita, color favorito y sí, le pregunté sobre su pin de Audioslave.

Después de platicar todo lo que quedaba de la clase dieron el timbre para la siguiente clase, el maestro se despidió de nosotros para que tuviéramos nuestra siguiente clase, llegó nuestra maestra de matemáticas y álgebra, una mujer joven y muy bonita, de cabello negro y largo, llegó con una mochila color crema y se empezó a presentar, repetimos la rutina de la clase anterior, presentarnos para que al final de la clase nos conociéramos y platicáramos entre nosotros. Así continuaron las dos últimas clases de la mañana antes de que saliéramos a nuestro receso, yo no había hecho casi amigos más que a Seojun, justo cuando pensaba ponerme mis audífonos para salir sola al patio, Seojun me invita almorzar con él y la verdad por mí no hay ningún problema. Fuimos a una parte que era jardín, había un pasto muy verde y un gran árbol de manzana, era el ícono de la preparatoria. Todo el receso nos la pasamos platicando sobre nuestra vida en la secundaria o bueno, por mi parte no quise compartir mucho, pero él se agarró contando tantas cosas que me hacían reír a carcajadas, una vez dijo que estaba comiendo en clase unas papitas y como castigo tuvo que llevar una bolsa de papitas a todos sus compañeros y profesor, o la vez que le escondieron la mochila en un bote de basura sus amigos y como venganza, les llenó sus mochilas con basura.

Pero todo lo bueno acaba y dieron el timbre para regresar al salón, cuando regresamos estaba un profesor que daba clases de música, era un hombre no mayor de 30 años, a pesar de ir formal su personalidad no combinaba con su apariencia, a diferencia de su descolorido traje su forma de ser era una verdadera explosión de colores alegres y divertidos, se repitió la misma rutina de las demás clases hasta que nos mencionó y pegó unos afiches donde avisaba de una banda escolar que él estaba formando, necesitaba vocalistas, bateristas, guitarristas y demás ya que la escuela hacía competencias de bandas y la nuestra nunca había ganado el primer lugar, era mi oportunidad para brillar.

El resto del día transcurre con normalidad hasta que llega la hora de irnos y me despedí de Seojun, justo pasamos por aquel jardín y yo iba detrás de él, en eso me dí cuenta de dónde lo había visto antes...

Fue en mis sueños.