Pétalos del corazón

Capítulo 1: Quién soy

''Soy un ser humano, uno que comete errores a menudo''

Estaba ahí sentada en la orilla de ese edificio, pensando y divagando en las profundidades de mi mente, miro al cielo oscuro y nublado, todas las estrellas y gran parte de la Luna estaban siendo cubiertas por esas densas nubes, a veces siento que mi voz y mis pensamientos son como esas estrellas, cubiertas por ruidos y por otras cosas, un poco peores que otras. Quisiera saber si, esas nubes ven a las estrellas que brillan y tengan un poco de remordimiento por cubrir ese brillo y hacer más apagada la noche, en eso miro mi teléfono, las dos y media de la mañana quizá debería ir a casa, siento como una gota de agua cae en mi rodilla, luego son dos, ahora son tres y empieza la lluvia.

Por cierto, qué grosero de mi parte, soy Gwon Bora y tengo 15 años, nací el 16 de abril del año 2008, vivo en la ciudad de Seúl, actualmente estoy de vacaciones, pero falta muy poco para regresar a clases, será mi primer día en el bachillerato, me gusta mucho la música, los libros, a veces compongo canciones. Mi color favorito es el blanco y el verde, mi comida favorita es el bibimbap.

Entro al edifico y me pongo la capucha de mi sudadera para salir rápidamente hacia mi casa, no tardé mucho en llegar, pero tenía que entrar con cuidado de no despertar a mamá, aunque dudo mucho que esta noche haya llegado a casa. Tomo unas cajas de madera que habían tiradas para subir a la ventana de mi habitación, abro la ventana con cuidado para entrar y en eso escucho como unos pasos se van aproximando a mi habitación, no sé cómo lo hice, pero en un dos por tres estaba metida en las sábanas de mi cama acostada, cierro los ojos fingiendo estar dormida y sólo escucho a mi puerta abrirse para luego cerrarse lentamente, escucho los pasos que se aproximan a mi cama y siento una gentil mano acariciar mi cabeza junto a un leve olor a alcohol, para después marcharse, lentamente me levanto para quitarme lo que tenía puesto y ponerme mi pijama, agradezco que sea sábado porque podré levantarme más tarde en unas cuantas horas, caigo en un sueño profundo donde está él...

Ese chico alto que tanto aparece en mis sueños, pero al que nunca logro verle la cara, está tomando mi mano para ir a caminar en lo que sería un campo o un parque con mucha hierba y flores, siempre está de espaldas y ocurre lo de siempre, justo cuando va a voltear a verme hay algo o alguien que me despierta y ese algo era mi gato. -Otra vez tú Misho- acaricio el pelaje de Misho, un gatito color naranja con blanco que es muy juguetón y le encanta comer. Me levanto para darme cuenta que ya son las 10:00 de la mañana, rápido me cambio y bajo a desayunar, una vez en la cocina veo un notita de mamá: "Compré unas cosas para que te prepares de desayunar y comer, hoy salgo temprano, te quiere: Mamá." Y sí, había unas cosas para preparar mi desayuno: Fruta fresca, leche deslactosada, pan, crema de avellanas y almendras, mermelada, etc. Me preparé un batido de frutos rojos, tosté dos panes y me preparé un huevo sencillo, cuando termino de desayunar me puse a hacer mis quehaceres como limpiar, lavar ropa, ordenar mi cuarto y más cosas así, en eso dan las 2:00 de la tarde y practico con mi guitarra las canciones que compuse. En eso se me fueron las horas hasta que empiezo a sentir hambre, me preparo arroz y verduras para comer, cuando termino no me queda nada más leer o hacer otras cosas para entretenerme sólo que a veces me gustaría saber ¿mi día cambiará?, es decir, fuera de clases mi rutina es siempre la misma y lo único que cambia es la hora en el que realizo cada cosa.

Más tarde llega mamá, me da un abrazo y prepara algo de cenar, después de una breve plática de nuestro día recojo los platos y me voy a dormir. La verdad me gustaría cambiar un poco el ambiente porque a pesar de que mi mamá pasa tiempo conmigo y pregunta lo básico de mi día siento que hablo con una pared, me da una que otra respuesta y opinión, puedo darle la razón, pero muchas veces en el fondo no siento que pienso igual y sólo quiero saber qué se siente que te escuchen realmente, que te presten esa atención y no quedarte con el sentimiento de hablar con una pared. Es por eso que me gusta componer canciones y me gusta leer mucho, siento que ahí puedo sacar y proyectar mi día a día ¿cuándo dejaré de estar así? En fin, mucho drama mental.

Más noche me quedé despierta viendo videos de terror, me encantan los casos de fantasmas y cosas paranormales, aunque termino con esa paranoia de ver cosas que no están, eso junto a la salida al edificio que está a 20 minutos de mi casa son lo que me sacan de la rutina, pero me gustaría que hubiera algo más que me dé plenitud, quiero llenar mi vacío.

Dan las 3:00 de la mañana, ¡mierda!, prometí no desvelarme tanto así que mejor cargo mi celular y me quedo dormida. Unas horas más tardes me da el olor a wafles y sé que mamá está cocinando, bajo somnolienta y con un "buenos días" empiezo a desayunar. Todo lo que quedó del día me la pasé en mi casa leyendo y preparando tareas para al día siguiente hasta que llega la hora de dormir, tengo todo listo para mi primer día de clases.

Me di cuenta que me faltaban tres cuadernos, ya estaba anocheciendo así que salí lo más rápido que pude a la tienda más cercana, veo una abierta y entro para comprar las tres primeras libretas que encontré, lápices y unos marcadores que estaban de oferta, cuando termino de pagar y me doy la vuelta para salir sentí que choqué contra algo o bueno, alguien...

-¡Disculpa!- haciendo una leve reverencia dije -No fue mi intención, de verdad que soy descuidada-. Con la vista baja pude ver unos tenis Converse blancos y unos pantalones de mezclilla, -Descuida, sólo mira bien por dónde vas- escucho esto y levantando la cabeza me doy cuenta que es un chico, uno bastante lindo. Me quedé un poco perpleja, a decir verdad me llamó la atención sus ojos negros y su pelo castaño oscuro, era bastante alto y con una sonrisa termina de entrar a la tienda pero yo ya tenía que irme estaba oscureciendo y hoy quiero dormir temprano.