❛❛ ¡𝗪𝗵𝗮𝘁 𝗖𝗵𝗮𝗻𝗴𝗲𝗱; ❜❜ Dnf

𝟬𝟳

Al día siguiente Dream tendría que portarse bien en la casa de la amiga de su madre.

No sabía ni porqué había aceptado en ir, podría haber dicho fácilmente que no, como lo hizo su hermana, quien se quedó en casa.

Ahora frente a la puerta estaba arrepentido de la decisión que había tomado.

En primer lugar, no tenía idea de quien era la dichosa amiga de su madre.

En segundo lugar, le habían comentado que aquella señora tenía una hija de su edad.

Cuando accedió a ir, no estaba enterado de aquello, ahora sabía porque su madre quería que la acompañara.

Pero ya no tenía tiempo de arrepentirse, la amiga de su madre abrió la puerta, invitándolos a pasar.

—¡Mary! Que bueno que viniste. —

—Buenas tardes, Carmen, ¿qué tal tu hija? —

—Kenya está bien. ¿Y este muchacho? ¿Es tú hijo? Es muy atractivo. —

—Sí, sí lo es. Saluda, Clay. — ordenó Mary.

—Buena tardes, señora Carmen, mi madre ya me había platicado de usted. Muchas gracias por invitarnos y por el cumplido. —

—No hay de que. ¿Por qué no mejor pasan adelante? Mi hija vendrá en unos momentos. —

La señora se hizo a un lado, dejando que Dream y Mary pasarán adelante.

Dream tenía que admitir que la casa era muy bonita.

Las paredes pintadas de un nítido color amarillo pastel, una sala con un sofá grandes y dos más pequeños de color beige, con una mesa de cristal en el centro y una televisión puesta en medio de la Sala.

El comedor se trataba de una mesa café, con un hermoso mantel blanco decorado con pequeñas rosas pintadas a su alrededor, un hermoso centrado de cristal con unas margaritas.

La casa estaba llena cuadros, distintas fotos de Carmen, su esposo y de quien Dream supuso, su hija.

Al sentarse a comer, estuvo un rato respondiendo las preguntas de Carmen, quien procuraba ganar tiempo en lo que la comida terminaba de estar lista.

Cuando sirvieron la comida, Dream podía decir que se miraba bien.

Una ensalada de frutas, un bistec bañado en lo que supuso que era salsa (o tal vez barbacoa) con una hoja de colilantro en medio de la carne acompañada de arroz perfectamente puesto.

Dream solía ser un juzgador de primera, no criticaba a lo estúpido, solo que si miraba algo fuera de, solía hacer una crítica 'constructiva'.

—¡Kenya baja, ya está la comida servida! —

—¡Ya voy, mamá! — una dulce y femenina voz respondió.

Unos segundos después, apareció una chica con su cabello castaño claro medio recogido, ondulado con dos mechones rosas cayendo a cada lado de su rostro.

Cargaba una falda blanca que le quedaba un poca más arriba de su rodilla, luciendo un bonito escote rojo pastel, y unos accesorios en sus muñecas y otras partes de ella.

Dream no le prestó mucha atención, solo siguió comiendo la ensalada, que cabe decir que le gusto mucho.

—¡Que linda es tu hija! — chillo Mary.

—Gracias, señora Mary. — contesto con una risita y un pequeño sonrojo adornando su rostro. —

Fue ahí donde Dream medio levanto su vista de la comida hacia la chica.

Vio que la chica ya lo observaba con curiosidad y una pequeña sonrisa en sus labios rojos.

—¿Él quién es, mamá? — pregunto Kenya, mirando a Dream.

—Es el hijo de Mary, es apuesto, ¿verdad? —

—Sí..., bueno. —

Kenya se sentó frente a Dream, quien volvió a observar su comida, ignorando su alrededor.

Solo prestaba algo de atención cuando le preguntaban algo, para luego seguir comiendo.

El almuerzo estuvo bien, pasando entre pláticas de Mary e Carmen, y la mirada ansiosa de Kenya sobre la presencia de Dream.

Cuando termiran, Dream lavo su plato y fue a la sala, mientras miraba su teléfono, estando en su propio mundo unos minutos.

Dicho mundo propio se acabó unos minutos luego, cuando Kenya llegó a sentarse a la par suya.

—No tienes porque estar aquí si no quieres, pued-. —

—Sin embargo, sí quiero, no lo hago porque me lo pidieron, solo quiero conocerte más.—

—Bien.— Dream soltó el teléfono unos momentos, mientras su mirada se posaba en Kenya.

Reconocia que era linda, pero no de su agrado total.

—Y dime, ¿cuál es tu nombre? Todavía no se como llamarte. —

—Clay. Supongo que el tuyo es Kenya, escuche que así dijiste. —

—¿Estabas escuchando todo lo qué decíamos? Pense que estabas perdido en tu mente. —

—Sinceramente no preste atención, solo medio escuchaba por momentos. —

—Oh, bien, supongo. —

Kenya siguió platicado con Dream, quien respondía de la forma más seca y fría posible.

O al menos hasta que se fueron.

Dream se despidió de ambas mujeres, para luego ir al coche a esperar a su madre.

Esperaba que esta no se quedará platicando y se diera prisa, ya quería irse de ahí.

Por suerte, no tuvo que esperar mucho, pues su madre pronto apareció.

A mitad de camino, su madre decidio hablar.

—¿Qué tal te llevaste con Kenya. —

—Algo es algo. —

𝘌𝘴𝘱𝘦𝘳𝘰 𝘯𝘶𝘯𝘤𝘢 𝘷𝘦𝘳𝘭𝘢 𝘥𝘦 𝘯𝘶𝘦𝘷𝘰.

Pensó para sus adentros, y su Alfa estuvo de acuerdo con él.

Lástima que no todo era como lo deseaba él.

ʿ 🐇 ꜝꜞ

Intentando sobrevivir 😸.

━𝗟𝗲𝗼𝗻𝗼𝗿! 🧠