◣𝙏𝙝𝙚 𝘿𝙖𝙢𝙣◥

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Hace unas horas, Alex se despertaba lentamente, sintiendo el dolor punzante en su cabeza, como si un martillo estuviera golpeando su cráneo desde dentro. Su mente, confusa y mareada, luchaba por encontrar claridad en medio de una nube de dolor. Todo a su alrededor parecía borroso, y el zumbido en sus oídos lo mantenía al borde de la inconsciencia.

☯- Mierda...
- Murmuró, intentando enfocar su visión.
- Siento mi cabeza caliente, pero duele... maldita sea...

Al llevarse la mano a la cabeza, notó las vendas manchadas de sangre que envolvían su frente. Cada pequeño movimiento le provocaba un nuevo dolor que lo hacía estremecerse. Sacudió la cabeza de un lado a otro, intentando despejarse y recordar lo que había sucedido. Con un esfuerzo considerable, se sentó en la camilla donde había estado recostado, respirando hondo para calmar su mente y su cuerpo.

La habitación era blanca, fría y estéril, con un silencio que lo hacía sentir aún más solo. Era la enfermería de su escuela, un lugar al que no había tenido que volver en mucho tiempo, y ahora, de repente, se encontraba ahí, en un estado lamentable. Trató de ponerse en pie, pero sus piernas no respondieron como esperaba. Un mareo repentino lo obligó a recostarse de nuevo, y dejó escapar un suspiro frustrado.

☯- ¿Dónde está todo el mundo?
- Murmuró, mirando a su alrededor en busca de alguna señal de vida
- Ni siquiera escucho un murmullo...

Justo en ese momento, la puerta de la enfermería se abrió de golpe, y una figura familiar entró apresuradamente. Era Elisa, una de sus amigas por no decir la única, con el rostro lleno de preocupación, sus ojos recorriendo rápidamente la figura herida de Alex.

🌺 - ¡Alex!
- exclamó, su voz llena de angustia
- ¿Estás bien? ¡Por Dios, te ves del asco!

Elisa se acercó rápidamente a su lado, su presencia era un rayo de luz en medio de la tormenta que lo envolvía. Alex intentó sonreír para tranquilizarla, pero el dolor que sentía hizo que su intento fuera más una mueca que una verdadera sonrisa.

☯ - He estado mejor..
- Dijo con voz ronca
- ¿Qué pasó exactamente?

Elisa suspiró profundamente y se sentó en una silla junto a la camilla, su rostro mostraba la carga de lo que había presenciado.

🌺 - Fue ese tipo... el que estaba intentando golpear a su novia. Estabas en el lugar equivocado en el momento equivocado, Alex. Nadie hizo nada para detenerlo, salvo algunos docentes que lograron intervenir antes de que fuera peor. La enfermera te encontró inconsciente y te trajo aquí.

Alex cerró los ojos mientras trataba de procesar la información. La ira comenzó a hervir dentro de él, pero pronto fue reemplazada por una abrumadora sensación de impotencia.

☯ - Ni siquiera tuve la oportunidad de hacer algo más, siento que no hice nada realmente.
- Murmuró, la frustración evidente en su voz.

Elisa negó con la cabeza, su mirada firme y con determinación.

🌺 - Eso no es verdad, Alex. Salvaste a esa chica de un golpe que podría haberla matado. No sé qué hicieron con ese tipo, pero no está aquí. Por ahora, deberías concentrarte en descansar. La enfermera dijo que necesitas tomarte unos días para recuperarte.

Alex asintió lentamente, sabiendo que Elisa tenía razón. A pesar de ser un chico impetuoso y lleno de energía, entendía que forzarse ahora solo empeoraría las cosas. Suspiró, mirando al techo de la enfermería mientras intentaba calmar su mente. Los recuerdos del incidente aún estaban borrosos, pero las palabras de Elisa le ofrecían un pequeño consuelo.

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⏰ Última actualización: Aug 18, 2024 ⏰

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