Estudiar no es sencillo mucho menos poner atención cuando la clase es aburrida, pero agregar pies a la ecuación lo hace mucho mas sencillo. Como siempre muchas chicas hermosas deciden saltarse una que otra clase o se distraen en el celular y se perdieron la clase, realmente no las culpo a todos nos pasa.
Pero ahora es la historia de Mónica una chica normalita, tes clara, cabello negro, lacio le llegaba hasta los hombros, media como 1.65 m era flaquita y no tenía realmente nada espectacular. Pero si tenia una carita preciosa, tenía unos ojitos de ángel pero una boca de demonio. Se estaba metiendo al gym para mejorar creo, la verdad es que estaba adquiriendo unos muslos muy deseables. Sin embargo era una chica bastante infiel a leguas un día estaba con un chico, al otro con otro y teniendo novio. Ya era su reputación.
Ella engañaba a los chicos como si nada, no le importaba realmente sabía que podía andar con cualquiera. Yo era su amigo porque había estado en una clase con ella y nos encontramos en otra, ella debido a su reputación tenía pocos amigos así que cuando me vio entrar por el salón y decidió "hablarme" más porque estar con alguien a pasarla sola en el salón.
El tener a tantas chicas pidiéndome favores pues me llevo a conseguir confianza y en un trabajo me pidió ayuda, yo sabía que debía pedir. De modo de "broma" le dije:
- Claro por 50 fotos de tus pies.
Tan pocas?
- Si claro, ando de humilde
Okey...
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Así te gustan ?
Ya sabía que eso podía pasar, no era la primera vez
- Pues sí, pero no son mi tipo.
Qué?
- Si ya sabes están bien pero meeeh
Creo que afecte su ego o algo por el estilo.
Entonces cuál es tu estilo.
- Eso que importa, mejor ya dime en qué te puedo ayudar.
No no no, ahora dime qué tienen mis pies.
- acaso eso importa?
Para mí si... Sabes es debido al gym, el trabajo es bastante pesado, tengo que cuidarlos.
-Okey, pero pues no se que tan importante sea eso ahora. Solo pásame el trabajo y que debo de hacer y ya.
Muy bien, te parece que puedas venir a mi casa y te digo que hacer.
- No sé suena a un engaño, no te parece algo peculiar esa petición.
Tienes razón, la verdad es que te quiero besar como no tienes idea.
- A bueno así sí.
Obviamente era una broma, pero pues aún así era raro para mí que ella me haya invitado a su casa, era extraño pero tenia que aprovecharlo.
Te espero el sábado para que puedas ayudarme.
- A cuál quiera hora esta bien? a
A las 11:00 esta bien.
Llego el día y estaba afuera de su casa, toque pero no me abría nadie, la espere un rato pero pasaron 15 min y ya me iba cuando llega corriendo con ropa del gym, creo que era más que obvio que estaba pasando, su plan esta siendo descubierto.
Aaaaaa hola, estaba aúnto de irme
- Bueno, perdón es que estaba en le gimnasio y pues se me olvido que ibas a venir.
Cómo se te va olvidar si literalmente te mande mensaje de que iba a venir.
- Eso no lo recuerdo, mejor pasa pasa.
Entre a su cuarto y como era de esperarse no paso ni 30 min cuando ella se estaba descalzando frente a mí, yo trataba de no poner atención, pero ella no decía nada, no me preguntaba por la tarea simplemente comentaba que estaba cansada mientras se quitaba sus tenis.
El olor se sentía en la habitación, el calor, cansancio y sudor que desprendía esos tenis me tenían en un trance pero tenía que tratar de hacer la tarea o lo que estaba haciendo e irme, digo no es que no quisiera sus pies pero la verdad es que su reputación no le ayudaba, si vendía a sus novios que no me vendiera a mí, era casi imposible.
Bueno entonces hay que hacer el trabajo.
- Aaaa si, hablando de eso lo acabe
a bueno... entonces me voy.
- No no no, ahora quiero que me masajes los pies para ver si sigues creyendo que son feos.
No, pero si están todos sudados
- Y eso que tiene?
Como qué que tiene?
- Si, adelante no huelen tan mal. Dijo mientras me aventaba sus calcetas sudadas, podía sentir todo el sudor en ellas.
La verdad es que el aroma que estaba llenando la atmósfera me estaba exaltando, al final tome sus pies y comencé a masajearlos.
Ya, esta bien tienes pies lindos, okey, te los masajeo y me voy.
Sus pies estaban sudados, muy calurosos, podía sentir una especie de piel que se desboronaba cada que rozaba mi mano con su piel, poco a poco iba tomando mas confianza y estaba acariciando su pie, desde el talón hasta los dedos de sus pies, todo el sudor de sus arcos estaba quedando impregnado en mis manos.
El sudor y el olor a queso estaban siendo mas intensos, para descansar puse sus pies en mis regazo pero las curvas de sus pies rojizas estaban rozando mi miembro.
Ya, lo admito tus pies son lindos ahora ya me voy. Me estaba levantando cuando... ella me sentó y puso su pie en mi cara estaban pegajosos y calientes.
- Lámelos y te puedes ir.
Eran las palabras que esperaba, lo tome desde el talón y pase mi lengua por sus arcos hasta llegar a sus dedos, ahí ella me metió todos sus dedos a mi boca de imprevisto haciéndome comer todo su sudor del pie, salado y ácido.
Fingí demencia y escupí su pie.
Qué te pasa?
- Vamos no te hagas el tonto ambos sabemos que esto es lo que quieres.
No sé que quieres decir con eso pero ya me voy....
La verdad lo que dijo me puso en duda conmigo mismo... era mas que obvio a que se refería pero... pero había muchas cosas que pensar
