Por El Cabello Verde

Capítulo 7: ¡Al Museo De Los Dinosaurios!

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Izuku se miró en el espejo y se dio unas palmaditas para estar presentable. No había pasado demasiado tiempo desde que empezaron a salir, pero hasta ahora parecía que todo iba estupendamente. El incidente que había ocurrido con Setsuna y la misión de entrenamiento conjunto le ayudaron a darse cuenta de que la quería más de lo que pensaba. Aunque podría haberlo hecho sin que ella corriera peligro de perder la vida.

Mirándose una vez más para comprobar si había alguna discrepancia, Izuku se consideró digno de reunirse con Setsuna.

Era domingo, y hace unos días había comprado las entradas para un museo de dinosaurios, un lugar que quedaba lejos, pero accesible en autobús. Una vez que salió de su habitación, encontró a Mina apoyada en la pared fuera de su habitación con una expresión seria en su rostro.

« ¿Uh... qué te trae por aquí, Mina?». Izuku se ajustó el cuello de la camisa.

«Puede que sea un rumor o algo así, pero ¿es verdad que estás saliendo con Setsuna Tokage?». preguntó Mina mientras se llevaba una mano a un lado de la boca como si estuvieran intercambiando secretos.

«¿Quién te lo dijo?»

«¡Una de las chicas de la clase 1-B! Desde que hicimos las dos sesiones de entrenamiento conjuntas, nos acercamos más a ellas en general, ¡y ahora hablo con algunas de ellas con regularidad!». exclamó Mina, volviendo a su habitual alegría.

«Ah, eso lo explica...». Izuku reflexionó sobre qué decir a continuación. No quería decírselo directamente, ya que a ella le gustaba contar chismes sobre sus intereses amorosos con los demás, pero todo el mundo iba a enterarse de su relación muy pronto. «Yo... en realidad estoy saliendo con ella. No vayas por ahí contándoselo a todo el mundo».

«¿Yo? ¿Contárselo a todo el mundo? Por favor. ¿Por quién me tomas? ¡Creo que los dos se ven perfectos juntos! El pelo verde y hasta los ojos verdes a juego». Mina apretó las manos y sonrió, aunque sus ojos tenían otra historia.

Izuku la señaló acusadoramente. «Vas a contárselo a todo el mundo, ¿verdad...?».

Mina se rió mientras agitaba la mano en el aire para desestimar su acusación. «¡No te preocupes ni un segundo por eso! Ahora vete, ¡seguro que Setsuna te está esperando!».

«Tengo la sensación de que me estás espiando...».

«¡ Nah! Quiero decir, ¿quién más se vestiría tan bien si no fuera para quedar con alguien? Y para ti, ¡es 100% que es para reunirte con Setsuna!»

«Quizá deberías invertir el tiempo que pasas hablando conmigo en estudiar para sacar mejores notas».

Mina se echó a reír, pero se interrumpió al negar con la cabeza. «Por desgracia, las relaciones románticas son mucho más divertidas de ver. Más que estudiar. Dicho esto, ¡dime si hay más novedades!

Mientras Izuku bajaba las escaleras, se giró para mirarla y sonrió. «Bueno, nos abrazamos y besamos hace un rato».

«¿Qué? ¡Espera! ¿Cuándo?» gritó Mina, despertando interés.

Pero antes de que Mina pudiera sacarle una respuesta, Izuku ya se alejaba de ella riendo. Probablemente iba a contarle a todo el mundo que estaba saliendo con Setsuna, así que bien podía burlarse de ella ahora para vengarse de antemano.

Cuando salió, Setsuna se dio la vuelta y lo saludó. «Empiezo a pensar que tengo que echar tu puerta abajo cada vez que salimos porque siempre llegas unos minutos tarde».