— Vamos, Sam — su voz suena como un quejido al notar como niego con mi cabeza.
Osvaldo está intentando convencerme de que me quede un rato más en la fiesta.
— ¿Es por que Ari no ha venido aun verdad? — se cruza de brazos, mirándome con una ceja elevada. Me quedó un poco sorprendida por sus palabras, haciendo que voltee mi rostro para mirarlo con mis ojos más abierto.
Tal vez sea verdad lo que dice.
Abril había jurado venir y no se había aparecido en toda la noche.
— Por supuesto que no. Tengo cosas importantes que hacer mañana, ¿sabes? — ahora sueno un poco fastidiada ante su insistencia.
Después de unos minutos de escuchar a Osvaldo insistiéndome que me quedara un tiempo más, miro hacia la puerta de entrada en la que logro divisar la figura de ari y Juan como si estuvieran hablando, o mejor dicho ¿discutiendo?
Veo la figura de ari que camina hacia nosotros, dejando a Juan atrás. Cuando llega nos dedica una sonrisa y se sienta a nuestro lado.
Me quedó analizando un momento sobre que haya llegado tan repentinamente, mientras Osvaldo apoya su antebrazo en mi hombro.
— Creo que ahora ya no te quieres ir, ¿verdad? — me susurra, aprovechando que ari está un poco distraída hablando con nuvia. Miro hacia mi amigo el cual me mira con una sonrisa divertida. Solo le ruedo los ojos y me siento enfrente de ari, mirándola un momento.
— ¿Y Juan? ¿No vendrá? — nuvia le pregunta a Ari, haciendo que Ari solo chasquee su lengua como un quejido.
— No lo sé, que haga lo que quiera. — su tono de voz suena con disgusto y molestia. No puedo evitar que se forme una pequeña sonrisa en mi rostro al escucharla.
Al fondo me llama la atención la imagen de Juan con alguien más que no conozco. Me quedó un poco confundida al darme cuenta de como prefiere estar con esa persona que con ari, ¿como puede ser tan imbecil?
Unas horas después, la gente del lugar se empezaba a ir, indicando que la fiesta se estaba acabando.
Ari estaba pegada su celular, escribiendo y llamando, con una cara de notable enojo.
Me levantó de mi lugar y me siento a su lado, dando un suspiro, tratando de mirar sus ojos, pero está totalmente concentrada en el teclado de su celular.
— ¿Sucede algo? — preguntó, notando aún su expresión enojada.
La escuchó suspirar y quita un momento su mirada del celular para mirarme.
— El hijo de puta de Juan se fue y no sé cómo me iré ahora. — suena relajada, pero es notable que esta frustrada. Regresa su mirada a la pantalla.
— ¿Por qué no pides un taxi? — ofrezco con voz relajada. Ella vuelve a mirarme con una sonrisa y sus ojos un poco entrecerrados.
— Buena idea, Sam. — dice con un tono más alegre y toma su teléfono de nuevo. Sonrió igual, cerrando mis ojos por un momento y luego escuchó una maldición de su parte, haciendo que abra los ojos de nuevo.
— Se me acabó la batería. — dice y su celular cae sobre su regazo. — ¿Y tú? ¿Podrías pedirme un taxi? — me pregunta y saco el celular de mi bolsillo, dándome cuenta que tampoco tengo batería.
— No. — digo y vuelvo a guardar mi teléfono, escuchando más quejas por parte de ari.
— Carajo, ¿y tú auto? —
— Se lo llevo Osvaldo. No preguntes. — niego un poco con mi cabeza al recordar porque lo tiene él.
Los quejidos de ari hacía Juan parecen no parar.
— ¿Por qué aún no has terminado con ese pendejo? — le preguntó a ari haciendo que ella me voltee a ver. — digo, yo no te hubiera dejado al cargo de que alguien más te llevara y pegada al celular. — me encojo de hombros.
Siento su mirada confundida posada en mi. — ¿Que? — susurra. Su mirada ahora está un poco incrédula.
— No tengo que decirte todas las cosas en las que él no es suficiente. — su mirada se vuelve más incrédula. — ¿que carajos buscas en él? ¿Un caballero? Hasta yo podría ser más hombre que esa mierda que llamas "novio" — ya ni siquiera sé de que es lo que estoy hablando. Todo el alcohol consumido en la noche me ha hecho efecto.
— ¿Que estas diciendo? — su voz suena sorprendida por todo lo que estoy diciendo.
— Él no está aquí, ari... — tenso mi mandíbula un poco antes de hablar. — Déjame demostrarte que podría hacer toda esa mierda que él nunca ha hecho. — siento como si me llenara de emoción al saber que podría quitar a ari de los brazos de Juan. — podría estar toda la noche demostrándote que yo sería mejor que ese cabrón. — ari traga saliva al sentir mi presencia más cerca de ella — Déjame demostrarte que yo podría ser mucho mejor novio que él. — digo en un pequeño susurro. Nuestras miradas conectan por un largo momento.
— Que se joda. — la escuchó decir, antes de sentir sus labios presionándose con fuerza contra los míos, haciéndome cerrar los ojos y suspirar pesado mientras se lo correspondo. Ella acaricia mi mejilla mientras el beso se hace más profundo cada vez.
No puedo creer que estuve a punto de irme a casa. Son de las primeras veces en las que le agradezco a Osvaldo por no permitírmelo.
Mi lengua entra sin previo aviso en su boca, haciéndola soltar un jadeo mientras su lengua se enreda con la mía. Me toma más fuerte del rostro.
¿Que probabilidades habían de esto? ¿De que Juan la dejara sola en algún momento? Posiblemente pocas.
Enredo mis dedos en su cabello para presionar más sus labios contra los míos y succionó su labio inferior con fuerza, posa su mano en mi pecho.
Después de unos segundos, nos separamos, con los labios húmedos por el intenso beso. Entreabrimos los ojos al mismo tiempo, le dedico una sonrisa cuando veo sus mejillas sonrojadas, su respiración agitada, sus labios rojos y luego se los relame.
Era una vista hermosa.
— Creo que definitivamente eres mucho mejor que él. — susurra, riendo suavemente, aún agitada.
————
Hola (con intenciones de tener frío)
Por si no es muy obvio, este one shot está inspirado en la canción "boyfriend" de dove Cameron, escúchenla, es increíble.
Pasen ideas para más one shots, porque luego me quedó sin ideas
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