Zapatos de danza

Primer día.

Hoy me levanté temprano, mi primer semestre de preparatoria ha sido muy tranquilo, he concebido algunas nuevas amistades, muy agradables...

–La verdad no me siento completamente de ánimo como para ir a la escuela en sábado, digo, ¿quien carajos se levanta a las 7:00 am en sábado? pero bueno, ni que hacerle, son actividades escolares y tengo que asistir si o si.

Me levanté de la cama y me estiré como suelo hacerlo durante las mañanas, me coloqué mis pantunflas para dirigirme al baño y hacer mi rutina matutina.
al salir del baño, agarré mi uniforme escolar, ya que, en la escuela a la que asisto aún utilizamos uniforme escolar, el uniforme deportivo tiene un color rojo horrible combinado con blanco que hacen ver mal hasta la persona que mejor pulcro tenga en si mismo, vaya ni hablar del uniforme de gala, ese si es una aberración.

–Aún no sé qué desayunar, estaba pensando en irme así y no desayunar, tal vez por allá encuentre algo de comer... o cuando regresé, puedo pasar al mercado y comer algo, digo no es algo malo, solo estaré en ese lugar hasta las 11:00 am.

Agarre mi mochila, una libreta y mis plumas de colores para tomar nota de los materiales necesarios para estar dentro del taller, el taller de danza.
Uno de los talleres más influyentes del plantel, con mayor número de ingresos en estudiantes, pero no todos se quedan. Se escucha un rumor por todo el plantel, se dice que la instructora no es lo que parece, al parecer es una señora de mal carácter, que se molesta por todo, pero eso si, es una persona muy disciplinada y eso es lo que la hace grande.

–Bien Ángel, momento de irnos

Me dije a mi mismo, tomé las llaves de mi casa y mi mochila con mis cosas para salir y tomar el camión. Ya era un poco tarde pero tuve suerte de alcanzar el primer camión de la mañana, me subí y tomé el asiento que regularmente suelo agarrar, me gusta irme del lado de la ventana y ver el recorrido que hago, digo, siempre veo lo mismo pero aún así me gusta ver por la ventana.
No tarde mucho en llegar a la escuela, había mucha gente, diría yo que media escuela se encontraba en el plantel, lo raro es que no veía a mis amigos o a alguien que conociera, me sentía algo incómodo así que tomé mi celular y me comencé a escribir con mis amigo para ver si había alguien. No sabía en qué parte se encontraba el taller de danza por lo que busqué en mi celular un archivo donde decía los lugares en que se ubicaban cada uno de los talleres, vi que decía "audiovisual" y estaba en la entrada así que me dirigí a este mismo.
Dentro de él vi a varios chicos y chicas preparándose para bailar, yo supuse que eran los chicos que ya sabían todo lo que es el zapateado, también vi un grupo de gente que estaba solamente sentada, por ahí busqué a alguien que conociera, pero mi suerte era mala, no había nadie que fuera mi conocido. De repente veo una notificación en mi celular

-Me encuentro en las canchas, ven.

Como aún no llegaba la maestra dejé mis cosas y me salí de la sala para dirigirme a las canchas de basket, en ese momento, me sentía raro, no encajaba dentro de los grupos sociables que habían en danza o en otro lugar.
Al momento de llegar a las canchas, mucha gente se me quedaba viendo, yo solo corrí a buscar a mis amigos.

- ¿Qué tal Carlos? ¿Cómo estás?
-Estoy bien bro, ¿y tú? ¿cómo va el taller de danza?
-Desgraciadamente va todo mal, la maestra no ha llegado, me siento excluido, no tengo el valor de socializar, necesito ayuda.

Mi compañero se me quedó viendo y me dijo:

-Vamos Ángel, eres un amor de persona y no entiendo, ¿cómo rayos no has hablado con alguien? amigo, eres el chico más sociable que conozco
- Lo sé, lo sé, pero la verdad es que todos se ven muy mamones y no quiero tener roces con alguien, no por el momento...

Mi amigo me vio y sonrió, chocamos las palmas de las manos y él se fue a entrenar, yo me regresé al audiovisual de la escuela mientras pensaba en lo que me dijo Carlos. Suelo ser una persona muy insegura y por ende suelo darle muchas vueltas a todo lo que me pasa en la vida.
Cuando llegue al audiovisual escuché una voz fuerte, una voz de alguien que sabe cómo mandar, una persona que sabe lo que hace y es segura de sí misma, con mucho cuidado me acerqué a la puerta y me asomé, ahí estaba, la maestra Arlet, caminando en el escenario del audiovisual mientras les explicaba a mis compañeros nuevos cómo funciona el taller de danza, también hablaba un poco sobre la cultura del estado.
En cuanto me vio me dijo "adelante, llegas un poco tarde pero pasa" yo solo sonreí y me senté en el lugar que había dejado mis cosas ella seguía hablando y hizo una pregunta, los demás no supieron responder.

-Jóvenes. ¿Alguno de ustedes sabe qué significa la palabra de México?

Todos estaban callados, yo con un poco de miedo levanté mi mano y le respondí.

-México es una palabra de origen náhuatl y quiere decir "El ombligo de la luna"
-Muy bien, ¿Cuál es tu nombre?
-Soy Ángel, miss, mucho gusto.
-Ángel... tú nombre no se me va a olvidar

Ella me vio y me sonrió, desde ese momento me di cuenta que mi estancia ahí iba a ser agradable (por el momento), prosiguió con su plática donde explicaba lo que era el huapango, que significa, en donde se baila, etc...
El rato fue agradable hasta que me preguntó si sabía bailar.
En ese momento yo solo la miré, sentí un escalofrío que me recorría todo el cuerpo y por ende mi subconsciente respondió por mí y dijo que sí. Yo ya había bailado pero nunca baile folclórico, yo venía de bailar otras cosas como el dance cover, nada que ver con lo tradicional de las culturas.

-Ángel, ¿de qué número calzas?
-Soy 26 miss, pero no tengo el calzado adecuado por el momento
-No te preocupes, alguno de mis muchachos te prestará sus zapatos por el momento, quiero ver si zapateas.

No solo me escogió a mí, escogió a 3 chicos más y uno que ya formaba parte del grupo.

-Bueno antes de comenzar el zapateado, ¿alguien sabe qué es una onomatopeya?

Había un silencio abrumador dentro del salón

- ¿Nadie? bueno, la onomatopeya es una palabra a la que se asemejan sonidos, por ejemplo el zapateado de 3 podemos hacer aplausos mientras en nuestra cabeza repetimos la palabra "México"

Nos demostró cómo lo hace y los 5 que estábamos en el escenario, uno por uno fuimos haciendo la onomatopeya.

-Muy bien Ángel, ahora quiero que zapatees, se supone que sabes bailar. ¿No?
-Ehh, si miss, si sé.

En ese momento me puse muy nervioso, no sabia que hacer, todos me veían, los chicos que estaban en el escenario del audiovisual y en las gradas sentados me veían, tenía miedo, mis manos me sudaban y mis piernas temblaban.

Tomé el valor necesario y levanté mis pies, no supe como lo hice pero el zapateado me había salido, me sorprendí mi mismo, el simple hecho de escuchar los aplausos de mis compañeros y la voz de la maestra en un tono de felicidad.... fue algo "mágico" 

-Muy bieen Ángel,  sabía que lo harías bien, ahora puedes tomar asiento.

Regresé a mi lugar con una sonrisa. Después de eso vimos el programa del grupo seleccionado.

-Muy bien jóvenes, de esto trata el taller de danza folklorica, espero y sigan aquí, muchos que entran al grupo se van saliendo conforme va pasando el tiempo. Esto es todo por hoy, se pueden retirar a sus casas, se van con cuidado a casa.

Tome mi mochila, me dí cuenta que ese había sido un lindo ensayo, solo me quedaba irme a mi casa y descansar, me rugía el estomago pues tenia hambre. Lo demás ya es una simple historia que después tendré que contar.