Capítulo 56

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Cambios.

Siempre en nuestras vidas habrán cambios, algunos buenos, otros malos, siempre inesperados, esperando a que sea el momento justo para hacer su aparición.

Por desgracia, aunque a veces sea por algo bueno, a los humanos nos cuesta acostumbrarnos a lo nuevo, por lo que inevitablemente, en ocasiones no queremos aceptarlos.

Tal y como dijo Jin, él y NamJoon empezaron a guardar sus cosas en cajas para poder llevárselas a lo que sería su nuevo hogar, ya habían hecho los trámites necesarios para que la casa fuera habitable, por lo que solo era de pasar todas sus pertenencias, ni siquiera tuvieron que comprar muebles, esos ya los tenía la pequeña casa alta que pertenecía a la señora Han que se encontraba encima de la cafetería, así que incluso en ello se ahorraron mucho dinero.

Mentirían si dijeran que no se sentían tristes, era una sensación nostálgica extraña, los cuatro amigos intentaron pasar más tiempo juntos, incluso hicieron cosas que hacían antes de empezar a fijarse en sus propios asuntos, fueron a patinar sobre hielo, comieron varias veces en el puesto callejero que se encontraba a unas pocas cuadras de su casa, en una ocasión fueron junto a TaeHyung y Yoona a un centro de juegos de árcade, se sentían como adolescentes de nuevo a pesar de estar casi en los treinta, muchos jóvenes los miraban raro pero no les importaba, querían pasar todo el tiempo posible juntos, pronto se separarían, en esa enorme casa ya no vivirían los cuatro, ahora lo harían Hoseok y Yoongi.

Ambos se perdían en ocasiones en sus recuerdos, mostrando imágenes de su niñez y adolescencia, recuerdan las bromas que le hacían a Jin de niños, sus travesuras en las diferentes casas (Menos la de Yoongi y TaeHyung por obvias razones), como hacían planes para robar las galletas que hacia la abuela de Jin, la vez que los padres de NamJoon los llevaron a los cinco a pescar y casi pegan el grito al cielo al ver a su hijo cayendo de la canoa, incluso podrían incluir cuando ambos hermanos Min se habían escapado de la casa de sus padres y estuvieron quedándose por mucho tiempo en las casas de sus amigos hasta que decidieron comprar una casa, claro que esa casa después le quedó a TaeHyung para que viviera con Yoona y los cuatro mayores decidieron vivir juntos.

Cuando el día de la mudanza llegó, tanto Jung como Min no pudieron evitar llorar a moco tendido, era sorprendente para la pareja Kim que Yoongi siendo tan serio en ocasiones estuviera tan sensible, aun así lo entendían, entre todos se apoyaron y cuidaron desde niños y estuvieron ahí para él en el momento en que tuvieron problemas por el embarazo de su hermano menor, por lo que se entendía porque lloraba en esos momentos como un niño que miraba a sus padres partir.

Jin no lo soportó, se abalanzó a los dos menores y les abrazó y lloró de igual manera, NamJoon también lloraba pero les miraba con una sonrisa triste, hasta que el omega ya estuvo listo y se separó de los dos menores, sin esperarse ninguno de los tres que el omega les diera un pequeño golpe en la cabeza a Hoseok y a Yoongi.

-No sean tontos- sorbió su nariz –Nos seguiremos viendo, la cafetería no está lejos- trató de sonar despreocupado, pero su rostro manchado de sus lágrimas y medio deformado por el llanto no ayudaba mucho.

-Lo sabemos Hyung... pero una cosa es verlos todos los días y otra es verlos unas cuantas veces a la semana...- Hoseok también sorbió su nariz –Ya no comeremos tu deliciosa comida- sollozó.

-Yo sé cocinar- dijo el alfa peli-negro.

-No es lo mismo-

La pareja Kim solo negó con algo de diversión, Jin terminó de limpiar sus lágrimas y sonrió nuevamente, les avisaremos cuando tengamos la casa lista, para que puedan verla ustedes primero-

Ambos menores asintieron limpiándose sus lágrimas. Finalmente la pareja se montó en el auto y marcharon hasta la cafetería, un hueco quedó en el estómago de Hoseok y Yoongi y al entrar a la casa se sentía tan vacía como el día en que se mudaron, tal vez no faltaran tantas cosas, pero ellos que vivieron ahí tanto tiempo sabían que faltaban unos cuantos adornos que la pareja quiso llevarse, pues eran regalos que les habían dado sus padres para adornar la casa, como un jarrón de porcelana importado de China que era de Jin, NamJoon también se llevó unos pocos adornos que él había comprado, aun así quiso dejarle a Yoongi un adorno que su abuelo le había regalado y que según el alfa, estuvo en su familia por generaciones, consistía en una curiosa figura de tigre tallada en madera, sus ojos rojos parecían dos rubíes relucientes que realmente eran pintados pero era tan minucioso el trabajo que parecían dos piedras preciosas incrustadas en la madera.

Luz en la Oscuridad  [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora