Mi esposo se arrepentirá de esto

Capítulo 115

Kiicck, kiick.

La silla de ruedas se movía ligeramente con el viento que soplaba desde algún lugar. El chirrido de las ruedas sin engrasar era lo suficientemente molesto como para ponerlo de los nervios.

"¿No puedes, por favor, deshacerte de esa maldita silla de ruedas?"

Eric no pudo aguantar más y gritó.

"¿Por qué debería deshacerme de él? Es una prueba de que Su Excelencia sobrevivió. Lo mantendré a tu lado".

Mientras Daniel respondía con indiferencia, Eric hizo una mueca y apretó con más fuerza la pinza que sostenía.

"Han pasado más de tres meses desde que pude usar ambas piernas. Estoy harto de mirar esa silla de ruedas. Así que deshazte de él".

"Me niego."

"Daniel."

"La señora me dijo que me lo quedara".

"...."

Eric se detuvo, con ganas de gritar. Si era una orden emitida directamente por Chloe y nadie más, no podía argumentar en contra.

"... ¿Por qué Chloe dijo eso?"

"¿No te lo dije? Es una prueba de que Su Excelencia sobrevivió. La señora también pensaba así y quería conservarlo".

"Inútil."

Aunque respondió, la leve elevación de sus labios delató su buen humor. El mero hecho de que Chloe estuviera pensando en él lo hacía eufórico.

Después de arreglar su corazón y regresar del borde de la muerte, se convenció de que el verdadero amor era exactamente eso. La sonrisa que seguía apareciendo cada vez que pensaba en ella, la claridad que surgía cuando pronunciaba su nombre, la calidez que llenaba sus dedos cuando recordaba su aroma...

Todo contenía amor por Chloe. Lo hizo aún más feliz.

Después de mirar el reloj, apretó aún más el tornillo giratorio. Tenía que arreglar este trozo de chatarra rápidamente para llegar a tiempo a su cita con ella.

"Realmente pensé que Su Excelencia iba a morir".

Sin embargo, Daniel no parecía dispuesto a poner fin a la conversación. Añadió.

"Lo digo en serio. ¡Has estado dormido durante meses como muerto con el rostro pálido, así que pensé que en realidad estabas muerto...!"

"No moriré".

Respondió con indiferencia mientras miraba a Daniel, quien estaba inquieto.

"¿Cómo podría morir y dejar atrás a Chloe?"

Eric se rió entre dientes.

"Nunca había sido tan feliz con Chloe, así que no podía morir porque sería injusto. Por eso volví con vida".

"Ahora que eres feliz, ¿está bien morir?"

"No."

Él arqueó levemente una ceja.

"Tengo que sentirme aún más feliz".

Después de dejar la pinza y quitarse los guantes, se arregló la corbata desaliñada y miró el reloj.

Era mediodía.

Fue un buen momento para almorzar con Chloe.

"Ocúpate del resto hasta que yo regrese".

"¿No puedo almorzar?"

"Morir de hambre."

Eric habló con firmeza.