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Narradora:
Al pasar unos minutos ambos se separaron para tomar aire y regular sus respiraciones agitadas, sus miradas se cruzaron notando que el brillo de sus ojos volvía y junto con ello volvía la tensión, kenji se alejo de su esposa cuidadosamente sentándose junto a ella aun en la cama.
"Perdóname por no ser el esposo que mereces" kenji hablo acariciando la mano de su esposa donde estaba la sortija de matrimonio que los unía hasta la muerte.
La mujer solo lo miro a los ojos tratando de encontrar las palabras correctas pero no pudo mas que siquiera asentir en silencio.
"Desde que nació denki forjaste un vinculo con el, había veces en donde ni siquiera me hablabas por estar cuidándolo y debo admitir que me sentía celoso" kenji explicaba mirando a su esposa.
"¿celoso de tu propio hijo?" la mujer pregunto mirando incrédula a su esposo.
"se escucha infantil pero es verdad" kenji miro a otro lado avergonzado, "siempre estabas con denki en todo momento y de cierto modo yo me encerré en el trabajo para evitar pensar en ti y en nuestro dijo"
"estas de acuerdo que si lo hubieras dicho desde un inicio nos hubiéramos evitado todos estos problemas" t/n miro a su esposo mientras acomodaba su cabello, "fuiste muy inmaduro kenji"
"lo se, por eso mismo te pido perdón" kenji sonrió tomando el mentón de su esposa haciendo que se acercara para besarla.
T/n sonrió ante el beso y puso sus manos en el cuello de su esposo sentándose sobre su regazo con cada rodilla a los costados de kenji, kenji por inercia puso sus manos en la cintura de su esposa bajando poco a poco a las caderas de su mujer.
"¿ya te he dicho lo loco que me tienen tus caderas?" kenji pregunto separándose del beso mirando a su esposa totalmente enamorado.
"ya tenia tiempo que no me lo decías" t/n dijo sonriendo
"pues...te...lo...digo...de...nuevo" entre cada palabra kenji le daba un beso a su esposa en el cuello, "me encantan tus grandes caderas, las grandes caderas de mi mujer"
T/n sonrió ante los besos y caricias que su esposo le decía, la tensión aumento y sus labios volvieron a chocar soltando pequeños jadeos; todo iba a pasar a mayores cuando de pronto...
"mamá sigues dormida? ya me dio hambre" denki dijo tras la puerta de la habitación.
Kenji rodo los ojos y gruño molesto, "ya voy denki, deja me lavo la cara" la mujer dijo sonriendo con burla al ver las reacciones de su esposo.
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