Te amo en todas partes

veinte

Juanjo POV

Algunos se habían ido a casa, pero ya eran las 3 de la mañana y todavía quedaban unas 5 personas y decidimos que podían dormir allí ya que no había trenes a esa hora. Dos podían dormir en el sofá y luego Martin recogió el colchón doble inflable que teníamos en el depósito para colocarlo en la sala de estar. Todos nos dijimos buenas noches y Martin y yo fuimos a nuestra habitación. Tan pronto como cerró la puerta, lo empujé contra ella. Sentí sus manos en mi cuello jugando con mi cabello. Me incliné y lo besé, nuestras lenguas inmediatamente jugaron entre sí. Lo agarré por debajo de las piernas y lo llevé a la cama para acostarlo. Lo miré a los ojos mientras le bajaba los pantalones, ambos sonriendo. También me quité la camisa y los pantalones, probablemente demasiado rápidamente porque Martin se rió de mí. Puse encima de él nuestros entrepiernas rozándose entre sí solo separando la tela de nuestros ropa interior  "Juanjo, los otros están afuera en la sala" dijo Martin contra mis labios "bueno entonces será mejor que te calles" le dije y se mordió el labio. Sus manos fueron a su camisa comenzando a desvestirse "no" dije quitándoselas "déjala puesta" dije. Me sonrió "¿Qué pasa contigo y este conjunto?" preguntó feliz "no lo sé, te ves tan bien" Metí mi mano dentro de su ropa interior provocando un gemido de él, haciéndome sonreír. Me di cuenta de que Martin estaba desesperado porque sus manos fueron a mi espalda baja y me empujaron más contra él. Entendí la indirecta y me quité los dos boxers. Me separé de él y me acerqué a la mesilla de noche para coger un condón y un poco de lubricante. "No" dijo Martin tirando de mí hacia atrás "Te necesito ahora" dijo desesperadamente y me mordí el labio al verlo. "mañana no podrás caminar" me reí "me da igual" dijo besándome. Sonreí contra sus labios y abrí sus piernas usando mis muslos. Entré en él por completo sin previo aviso, haciéndolo gritar. Puse mi mano sobre su boca "cállate" dije. Creo que todos estaban dormidos en la sala debido a la cantidad de bebida que habían bebido, al menos eso esperaba. Comencé a moverme entrando y saliendo de él lentamente mientras sentía sus uñas arañar mi espalda dejando marcas. "Joder", gimió mientras yo aceleraba el ritmo chupando su cuello. Martin era un desastre que gemía debajo de mí y eso solo me hizo aumentar el ritmo "¡Cállate, carajo!" escuchamos a alguien gritar llamando a la sala de estar. Nos miramos por un segundo ambos con la frente sudorosa y las mejillas rojas. No pudimos evitar reírnos un poco "¿Crees que podrás estar callado?" Yo pregunté. Él asintió claramente un poco avergonzado "oye, me encanta más que nada, pero por ahora" dije acariciando su mejilla asegurándole que no hizo nada malo. Mientras mi mano estaba en su mejilla, moví mi pulgar hacia su boca para que pudiera morderla. Continué entrando y saliendo de él, y él cerró los ojos por el placer. Pasaron un par de minutos "Juanjo" dijo Martin en voz baja mirándome indicándome que estaba cerca. Le subí un poco la camisa para que no se arruinara. Llegamos al mismo tiempo ambos soltando un gran suspiro. Caí encima de él y los dos sonreímos.

Supongo que nos habíamos olvidado de cerrar las persianas porque me desperté con la luz del sol que entraba por la ventana. Me froté los ojos y suspiré. Miré a mi izquierda para ver a Martin acurrucado entre las sábanas, haciéndome sonreír. Comencé a besar su mejilla suavemente y repetidamente "amor" le susurré. Se estiró y abrió los ojos lentamente. Instantáneamente enterró su rostro en mi cuello "¿Por qué hay tanta luz aquí?" se quejó "Nosotros no cerramos las persianas" Me reí y acaricié su cabello. Se inclinó ligeramente hacia atrás y me miró. Le di un beso rápido "a ver si los demás están despiertos" le dije. Martin se sonrojó "¿qué?" "Va a ser muy vergonzoso salir ahí" suspiró "oye, no dejaré que digan nada, ¿vale?".

Nos levantamos y nos pusimos unos pantalones de pijama. Martin tomo la ropa de anoche y la dobló sobre la cama "será mejor que uses algo así cuando nos casemos" dije sin pensarlo mucho buscando en el armario una camiseta. "¿QUÉ?" dijo sorprendido "¿qué?" Le pregunté volviéndome hacia él "¿Crees que nos casaremos?" preguntó con una tierna sonrisa "bueno claro, a menos que no quieras" dije sonriendo. Tiró la camiseta y saltó sobre la cama corriendo sobre ella para saltar a mis brazos. Lo abracé fuerte alrededor de su cintura mientras sus piernas se envolvían alrededor de mi cintura. Besó mi mejilla repetidamente "Martin Martin no te pregunté" me reí "lo sé, pero no sabía que habías pensado en esas cosas" dijo alejándose sonriendo tanto con los ojos como con la boca. "Bueno, nunca había pensado en eso antes de conocerte, en realidad no me gustaba la idea, pero realmente quiero casarme contigo" dije y vi sus ojos llorar "ay Martin, por favor, ¿cómo estás tan lindo?" dijo y lo beso. Nos separamos y abrimos la puerta del salón. Vimos a todos nuestros amigos despiertos en sus teléfonos pero volteándonos a mirarnos "ni una puta palabra" dije agarrando la mano de Martin arrastrándolo a la cocina.