𝐿𝑎 𝑓𝑖𝑒𝑠𝑡𝑎...

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1997, Ciudad de México, casa de Alberto

Alberto era anfitrión de esa fiesta, había invitado a sus amigos más íntimos, incluyendo a Ana, Verónica y otros más, estaban en bohemia cantando y haciendo las típicas bromas de adultos, comiendo y tomando bebidas alcohólicas, la estaban pasando muy bien pero la única que tenía prisa por irse era Verónica, había dejado a sus hijos solos. Ana ya se había hartado pero tenía que guardar silencio por respeto a su mejor amigo.

"Necesito irme ya,llegaré muy tarde y es de noche" rectificó Verónica miente tomaba sus cosas lista para salir. Tan pronto como tomó sus cosas Alberto se dio cuenta y corrió a detenerla desesperado, no quería que se fuera por el peligro y además estaba un poco tomada.

"Déjala, si se quiere ir que se vaya, de todas maneras estaremos bien sin su "ya tengo que irme", déjala Alberto " replicó Ana viéndolo completamente harta de la situación "Además su problema si la policía la multa".

Alberto solo guardo silencio mientras las miraba cansado de la situación dignandose a hablar. "Me tienen cansado de su comportamiento, por favor dejen de pelear, tú no te vas Verónica, la niñera de los niños está en tu casa ¿No?, cálmate y bájale dos rayitas mi reina".

Verónica se sentó enojada con Ana, pronto pusieron música y la bola de amigos se paró a bailar, claro que eran felices, se divertían y bailaban unánimemente,menos Verónica que bailaba a la fuerza mientras miraba a Ana con mucho coraje, "Es una metiche, se mete donde no la llaman, claro no tiene hijos y por eso se comporta así, envidiosa" pensó Verónica.

Bailaba atrevidamente con Tatiana quien reía y bailaba, la verdad es que tenía buena relación con los que estaban allí, Daniela Romo, Rocío Durcal bailaban juntas divertidas mientras invitaban a Ana y a Vero a que se unieran, Ana no tuvo problema y se unió felizmente pero Verónica le costó unirse y bailar en grupo con las mujeres, Ana se cansó de inmediato y se alejó del grupo yendo a tomar agua, no siempre se cansaba de tal manera pero últimamente sí, Verónica no se había dado cuenta asi que se fue a tomar agua topándose con Ana.

"Eres tú..." Dijo Verónica mientras agarraba el vaso de agua.

"Sí,soy yo. Mira no quiero oír tu voz lo que resta de la noche,solo te quejas y te quejas y te quej..." Verónica le tapó la boca molesta mientras tomaba agua, Ana le quitó la mano y la observó por un momento algo molesta "Que grosera eres, ya entiendo las referencias de Alberto al  decirme algunas cosas".

Verónica respiró profundo tratando de no explotar contra Ana ya que se veía que también tenía carácter fuerte, solo notó los labios de Ana y luego inspeccionó el cuerpo de la misma muy detalladamente hasta llegar a sus ojos chinos, Verónica sonrió sarcásticamente mientras seguía tomando agua. Era verdad que solía ser un poco aburrida para las fiestas pero no tanto, le gustaba, pero esa noche no estaba de humor para fiestas.

"Mira chiquilla, entiendo que estás soltera y no tienes responsabilidades, se que te estás divirtiendo pero en el pasado tuve malas experiencias y por eso ahora te detesto, de verdad no es por ser mala onda chica, además necesitas sentar cabeza" decía Verónica mientras miraba como Ana hacía caso omiso.

Verónica se molestó al no ser escuchada y se fue con los demás, Ana se quedó sentada algo molesta por lo que Verónica le había dicho, pero se sentía muy cansada, fue a la sala viendo que todo estaba en paz mientras miraba algunos premios y medallas que tenía Alberto, sonrió al ver sus fotos, se dirigió a la habitación principal donde Alberto se quedaba con Ana cuando ambos estaban ebrios o Ana tenía problemas con su pareja, se quedó dormida mientras escuchaba a los demás hacer fiesta.

Mañana siguiente...

Ana estaba abrazando a Alberto dormida mientras sentía unos chinos en su nariz, abrió los ojos por la picazón que causaban esos rizos y miró a Verónica dormida enfrente de ella, se intentó mover pero Alberto y Verónica la tenían abrazada dejándola inmóvil.

"Sería más cómodo si quitarás tus manos de mi cintura Verónica" Ana se movió despertando a Verónica quién la miró totalmente enojada sin darse cuenta que la abrazaba.

"Sería más cómodo si tú te fueras de esta casa, ya diste lata toda la noche" dijo Verónica mirándola mientras la abrazaba.

"Primero suéltame señorita perfecta, luego me iré, sí Alberto despierta dile que tuve que irme por unos asuntos" dijo mirando a Verónica fijamente a los ojos muy enfadada mientras le quitaba las manos de su cintura. Se paró y colocó sus zapatos agarrando su bolsa y saliendo de la casa, la verdad es que le empezaba a caer muy mal Verónica pero no podía hacer nada más que aguantarse.

Después de ese día pasaron algunos años... Tiempo en el que Ana y vero llevaban una muy mala relación llegando al punto de no hablarse más que por trabajo, Alberto seguía llevando  una muy buena relación con la china, Ana había dejado a su pareja quedándose sola, con la compañía de su fiel amiga Diana Verónica, Ana estaba apunto de experimentar lo peor de su vida o lo mejor, a veces siempre pensamos en el futuro agobiandonos por lo que tenemos que hacer y que no, Ana había echo muchos planes a futuro, Verónica por otra parte disfrutaba su trabajo pero siempre se ponia a pensar en si a lo mejor iba a encontrar el amor en un futuro, siempre nos agobiamos por el futuro pero no se si sabían que tenemos que preocuparnos por el "Hoy".

7 de junio del 2004...

"Señora Ana, de verdad siento al no poder ayudarla, no tenemos los recursos necesarios para hacerlo, le dejaré medicamentos y eso aliviará los síntomas" anotando en la receta indicaciones y medicamentos que tenía que tomar "Al principio será un poco molesto pero prometo que aliviará sus síntomas, mandaré a hacer unos estudios, de verdad espero no sea lo que estoy pensando porque si es así... Solamente tendrá 6 meses de vida".

Las palabras del doctor resonaban en la cabeza de Ana, sentía como aire frío rodeaba todo su cuerpo haciendo que Ana temblará de miedo, por primera vez se sentía derrotada. Se despidió del doctor y caminó echa trizas por los pasillos del consultorio.

"Fíjese, no estorbe" dijo la mujer ya que Ana la había empujado sin querer, levantó la mirada y pronto la reconoció, sonrió al verla despues de tantos años dudas surgieron pero no quiso preguntar ya que Ana llevaba una cara de pocos amigos.

"Perdón, no fue mi intención, discúlpeme por favor" dijo Ana alzando la mirada quedando frente a frente con Verónica.

¿Sigo?👀

Hola hola,les traigo una historia nueva, aquí voy a actualizar cada dos semanas o una, esta idea fue muy especial ya que mi querida strawberryverana me ayudó y me instó a publicarla, está echa con mucho amor, esta hermosa niña me dijo,me animó me dio la idea y vaya, que más puedo decir, muchas gracias y espero sea de su agrado y la apoyen mucho,hasta pronto bye. ❤️‍🩹👋🏻

Pd. Te quiero chiquitina💖

𝑈𝑛 𝑔𝑖𝑟𝑜 𝑖𝑛𝑒𝑠𝑝𝑒𝑟𝑎𝑑𝑜Donde viven las historias. Descúbrelo ahora