La parte de Lucifer

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Habían pasado siete años, siete años desde que Lucifer había abandonado a su verdadero amor para irse con la perra de Lilith. Todavía recuerda como había comenzado todo

Lucifer se despertó con el sonido de su hija llorando en la otra habitación, el demonio se levantó y le dio un rápido beso a su esposo sin despertarlo. Salió de la habitación en silencio para no despertar a Al, él pobre estuvo cuidando a charlie las últimas noches mientras él dormía, ya era hora de que Lucifer le devolviera el favor.

Cuando entro en el cuarto de su linda hija se congeló al ver la figura vestida de morada y cabello rubio sosteniendo al bebé que lloraba mientras lo balanceaba para callarla

"Shh no llores linda niña tu papá ya está aquí" Dijo Lilith con una sonrisa dirigida a la pequeña

"Que haces aquí" Dijo Lucifer en voz baja para no molestar a Charlie que había dejado de llorar

"Hola viejo amigo" Dijo Lilith con una sonrisa

"Tú y yo no somos amigos, no después de que fueras la razón por la cual me echaron del cielo por ayudarte a rebelarte contra dios" Dijo Lucifer frunciéndole el ceño a la mujer

"Aún me guardas rencor por eso, vamos es agua pasada" Dijo Lilith restándole importancia

Lucifer intentó recuperar a su hija, pero no lo consiguió, la mujer lo esquivo fácilmente

"Viejo amigo tengo un favor que pedirte" Dijo Lilith con una sonrisa que significaban problemas

"No pienso hacer nada para ti" Dijo Lucifer de brazos cruzados

Charlie fue dejada en su cuna nuevamente y de las manos de Lilith aparecieron unas cadenas verdes de las cuales la mujer tiro, el otro extremo llegaba al cuello de Lucifer , el tirón lo hizo acercarse a la mujer que tenía enfrente

"Olvidas una cosa rey~ Soy tu dueño" Dijo Lilith mirando al gobernante del infierno a los ojos "Y harás lo que yo dija o cosas terribles les pasarán a tu amada familia"

Lucifer se calló sus réplicas y asintió

"Así me gusta" Dijo Lilith con una sonrisa y soltó la cadena que sujetaba al rey

"Ahora agarra tus cosas nos vamos" Dijo Lilith

"¡¿QUÉ?! ¿A dónde?" Pregunto Lucifer

Con una sonrisa dulce Lilith dijo "A casa mi amor"

Lucifer no pudo hacer nada más que asentir

"Y como le cuentes algo a Alastor mientras estemos juntos ten por seguro que ni tú ni tu linda princesita sobreviviréis a mi ira" Dijo Lilith seriamente

Lucifer asintió y chasqueo los dedos, al lado suyo aparecieron todas sus cosas y las de Charlie empacadas en un montón de cajas

"Bien rápido y eficaz, como me gusta a mí" Dijo Lilith agarrando a Charlie de su cuna para sujetarla en sus brazos

La primera mujer del edén chasqueo los dedos y apareció un portal por el cual los tres pasaron junto con las posesiones materiales y nunca más miraron atrás

Su casa en el Limbo era bonita y el lugar era pacífico, pero no era la casa en la que Lucifer quería estar

"Oh, no te pongas triste, querido, todos vamos a disfrutar nuestra estancia aquí" Dijo Lilith con una sonrisa y le dio un beso en la mejilla

A los pocos meses Lilith y él estaban casados y habían anunciado el nacimiento de Charlie al mundo

Pero eso fue hace siete años, siete años de estar separado de su verdadero amor y estar casado con esta loca. El día que Lilith se fue Lucifer lloro de alegría y de tristeza, alegría porque ya no tenía que fingir que amaba a aquella mujer ante el público y tristeza porque aquella bruja había conseguido que su relación con su hija fuera nula. Lucifer fracasó como esposo y padre y todo había sido culpa de Lilith.

El día que las puertas se cerraron detrás de aquella bella mujer para no mostrarse más en su casa, Lucifer se sacó el anillo que había usado para casarse con ella y se dirigió a su habitación donde abrió el cajón secreto de debajo del escritorio.

El cajón se abrió mostrando una caja de anillos azul oscuro como la noche estrellada. Lucifer abrió la caja para ver el hermoso anillo rojo sangre que contenía la cajita. Y con una sonrisa amorosa se puso la joya en su dedo anular.

Lucifer la cagaste a lo grande pero no es tu culpaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora