The Archer

2

Viernes 1 de septiembre de 1972

Remus Lupin.

Hogwarts.

Otra vez a hogwarts.

No es que no quiera ir,pero ayer fue luna llena y aún me duelen las cicatrices del cuerpo.

Me siento cansado,irritado,molesto.

Lo peor de todo es que tendría que mentirle a mis amigos.Ya hasta tenía planeada que excusas iba a ponerles.

Este año les diría que conseguí un gato.

Mi padre me saca de mis pensamientos.

-Es momento de que subas.-Dijo el.

Lyall Lupin.Mi querido padre.Estaba muy serio, más de lo habitual.

-¿Esta todo bien padre?-pregunté.

-Si,remus,solo....no quiero que nadie sepa lo que eres.

Yo sé que el se siente avergonzado de mi.Se que el odia cada luna llena tanto como yo lo hago.Pero el la odia por qué yo arruine su reputación.

-Nadie lo sabrá,padre.-yo me odio tanto como el lo hace.

Ojalá madre estuviera aquí.

Subí al tren sin despedirme ni darle una última mirada.

Saque uno de mis libros favoritos por si ninguno de mis amigos estaba en el vagón aún y así poder entretenerme.

Encontré el vagón donde mis amigos y yo habíamos quedado en reencontrarnos el año pasado.

Entre y ahí estaba mi amigo Peter.

-Hola remus.-dijo el sonriente.

Me senté frente a el-¿Que hay peter? ¿Que tal las vacaciones?.

-¡Geniales! Francia es muy bonito.-dijo Peter-¿Que hay de las tuyas?.

-Normales, nada nuevo.

Sostuve mi libro en mis manos.

En ese momento la puerta del vagón se abrió mostrando a un chico pelinegro de ojos grises.

-Hola chicos!-acomodó su baúl-¿Que tal las vacaciones?-dijo Sirius, se sentó a lado de Peter.

-Bien ¿Vieron los grupos para el siguiente mundial de quiddicht?-dije algo emocionado.

Me gusta el quiddicht, pero no lo suficiente para querer jugarlo, me limitaba a ser un gran espectador.

Mis dos amigos asintieron.

Seguimos platicando de quiddicht hasta que la puerta del vagón se abrió.

Mostrando a James.

Atrás de el había una pelirroja muy nerviosa.

Sirius se levantó y abrazo a James.

-¡James!.

-¡Sirius!.

Gire mis ojos.Solo no se han visto por dos meses y parece que no se ven desde hace años.

James empujó levemente a la pelirroja quien dio una sonrisa muy nerviosa.

Espera...¡Yo a esta niña la conozco!

Pero ¿De dónde?

Bueno, por fin conozco a la hermanita menor de James al menos.Nos hablo demasiado de ella en el primer año.

James presento a Sirius y a Peter, y cuando llegó mi turno, sus ojos azules chocaron con los míos.

Sentí algo raro en mi interior, pero lo ignore.