Zoro, un niño de 10 años, ya había atravesado lo más doloroso que podría vivir un mejor amigo.
La última vez que vio a Kuina, su querida mejor amiga, fue un día como cualquier otro, pero el destino tenía algo distinto preparado para ellos.
Se llevaban muy bien, eran inseparables, siempre estaban juntos. Practicaban kendo, y siempre que lo hacían, Kuina era la que salía victoriosa. A pesar de ser un año mayor que él, Zoro siempre la veía como una rival, alguien con quien podría enfrentarse algún día en igualdad de condiciones. Sin embargo, nunca hubo un atisbo de algo más que una profunda amistad, aunque, en sus corazones, había una conexión única.
‧₊˚🖇️✩
Una noche, ambos se encontraban fuera, bajo el manto oscuro del cielo estrellado. Estaban en silencio, compartiendo la quietud de la noche, hasta que finalmente, Kuina rompió el silencio.
—¿Sabes, Zoro? —dijo suavemente la joven, mirando las estrellas, mientras el chico la observaba en silencio— Tienes suerte de ser un chico... Yo, por ser mujer, jamás en la vida podré ser una espadachina.
Kuina abrazaba sus piernas, mirando al cielo con tristeza, y Zoro se quedó paralizado por un momento, observando cómo una lágrima resbalaba por la mejilla de su amiga.
—No digas eso... —respondió Zoro rápidamente, levantándose y acercándose— No porque seas mujer, no podrás ser una espadachina. Eres la más fuerte del dojo, ¡y hasta me derrotas a mí, que soy uno de los mejores!
—Pero... aunque sea más fuerte... Mi padre y la sociedad nunca me dejarán. Las mujeres solo sirven para ser amas de casa...
—¡Claro que no! —Zoro se enfureció, levantándose del suelo, su rostro enrojecido por la frustración— ¡Las mujeres pueden ser más que amas de casa! ¡Pueden hacer todo lo que hacen los hombres, y más!
—¡Claro que no, Zoro...! —Kuina intentó interrumpirlo, pero Zoro la tomó por los hombros con fuerza, sacudiéndola ligeramente.
—¡Las mujeres son iguales que los hombres! ¡Son personas! Lo único que nos diferencia son nuestros cuerpos, pero por dentro, todos somos iguales. —Zoro gritó, su voz llena de ira y desilusión— ¡No importa que seas mujer, ¡jamás dejes de luchar por tus sueños, Kuina!
El tono de Zoro bajó al final, su rabia desvanecida por una profunda decepción. No podía creer que su amiga pensara de esa manera.
—Pero... —Kuina intentó hablar, pero Zoro no la dejó.
—Pero nada. Tienes que entender que no porque tu padre o la sociedad te discriminen, tienes que abandonar tu sueño. Si realmente deseas algo, ¡lucha por ello! ¡Nunca dejes que nada ni nadie te haga rendir!
Las lágrimas caían de los ojos de Kuina, sin que ella pudiera detenerlas. Observaba a Zoro, quien hablaba con una pasión que jamás había visto. En ese momento, se dio cuenta de que, aunque fuera más joven, Zoro no era solo su amigo, sino alguien con una gran comprensión.
Finalmente, Kuina lo abrazó con fuerza, mientras el chico hacía lo mismo.
—Ahora, no quiero verte llorar por esto nunca más, ¿me oyes? —dijo suavemente, mientras la abrazaba, escuchando su llanto silencioso— No seas tonta.
Kuina, entre lágrimas, solo pudo sonreír levemente. Cuando finalmente se calmó, se separó un poco de él y le miró con una sonrisa que reflejaba más determinación que nunca.
—Prometeme que algún día serás el mejor espadachín, para que pueda ser tu rival... Zoro. —Extendió su dedo meñique, y Zoro sonrió, también levantando su pequeño dedo.
![](https://img.wattpad.com/cover/369239509-288-k989232.jpg)
ESTÁS LEYENDO
♥︎┆Quiero Ser Tuyo┆♡『Zosan』
Romance"Sanji siempre ha sido un hombre marcado por las sombras de su pasado: una infancia rota, un padre cruel y cicatrices que nunca terminan de sanar. Sin embargo, todo cambia cuando conoce a Zoro, un espadachín de pocas palabras pero con una presencia...