CAPITULO 2

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Al salir de su casa se topo con un auto súper lujoso y caro que jamás había visto, era un deportivo azul oscuro, el conductor, un joven muy apuesto de 28 años, actitud prepotente, mirada de superioridad, cuerpo firme y muy trabajado, vestía un traje justo a su medida.

No sé molestó en bajar del auto, se limito a darle una mirada rápida y hacer un ademán para que subiera al auto, Altagracia subió con todo los nervios del mundo.

- Ho..la.

- No tartamudees.

- Eh?

- No respondas con Eh?

- Lo siento. -prefiere guardar silencio.

- Habla firme, sin dudar- le dice él, con la mirada en la carretera.

- Un placer conocerte- responde ella con sarcasmo.

- No puedo decir lo mismo- Dice frunciendo el ceño.

- Puedo saber a dónde vamos?.- preguntó mirando por la ventana de auto.

- A cenar.

- Pero a donde?

- Aunque te diga no sabrás a donde, es obvio que nunca has ido a ese tipo de lugares.

- Podrías dejar de usar ese todo tan despectivo, y aunque sea mirarme a los ojos cuando te hablo.

- Podrias tu dejar de hacer tantas preguntas estúpidas. -le respondió mirándola fijamente a esos ojos verdes.

- Eres un idiota.-no pudo sostenerle la mirada por lo que decide mirar al frente.

El la mira con una ceja alzada.

- Yo soy el idiota?, sabias que vendría por ti y ni siquiera te molestaste en arreglarte, usas jeans, una sudadera y una.. mochila? que eres una niña de 10 años acaso?.

- Disculpa no todos tenemos el mundo a nuestros pies, además hace menos de una hora que me entere que estaba comprometida, además debiste ser un poco más amable o abrirme la puerta a entrar, no llevo ni una hora de conocerte y solo me mandas a callar.

- Eso no va conmigo, ya llegamos.

Altagracia decide mejor bajar de el auto y ir entrando al restaurante, el cual es bastante elegante para decir verdad se arrepiente un poco el no haberse arreglado mas pero en su defensa no sabia a donde la llevarían. Mientras José luis toma un poco de aire antes de bajar del auto y darle las llaves al ballet parking, no entiende porque su abuelo está tan empeñado en que debe casarse. le parece una estupidez.

- Disculpe señorita si no tiene reservación no puede entrar.

- Si vengo con...

- No insistas personas de tu clase, no son bienvenidas, son políticas de la empresa tenemos una imagen que cuidar y se nota que nunca has entrado a un lugar como este, así que por favor ret..

- Ella es Altagracia Sandoval viene conmigo, así que si no quieres perder tu trabajo pídele disculpas.

- Señor Navarrete!! discúlpeme, no tenía idea, por favor pase señorita y discúlpeme.

Altagracia un poco avergonzada, se queda viendo como José Luis la toma de la mano y ingresan al restaurante siente una electricidad en el momento en que se toman de las manos como si fueran conocidos de hace mucho tiempo, incluso cambia la forma en que la miraba, parecía un hombre completamente enamorado y orgulloso de su acompañante, altagracia terminó ruborizada por la forma en la que él la miraba y como al llegar a la mesa le rueda la silla para que ella tome asiento, como todo un caballero. Esa nueva actitud desconcertó a Altagracia y la puso nerviosa pues no entendía cómo fue que cambio tan rápido.

MATRIMONIO POR CONTRATODonde viven las historias. Descúbrelo ahora