Una cita peligrosa parte 3

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Escoltadas por dos camionetas negras, Kara, Lena y Kate, se encontraban en la parte trasera del Bentley de Lena, el nuevo chofer de Lena, que era parte de su nuevo equipo de seguridad, seleccionado personalmente por Kate, las llevaba hacia un muelle abandonado lejos de la ciudad.

-Bien.- comenzó Kate quien iba muy elegante en un traje negro con detalles rojos.- Cuando lleguemos nos pedirán la palabra secreta para ingresar, Kara tendrás que escucharla antes de que llegue nuestro turno para entrar, no dejaran pasar armas ni escoltas, por lo cual no tendré mi traje conmigo.

-Pero me tienen a mi.- dijo Kara.- soy letal.- la chica movió las cejas de arriba a abajo a modo de broma.

-Si cariño.- dijo Lena acariciando la barbilla de Kara.- lo eres.

-Es un alivio tener al cachorro letal con nosotros.- dijo Kate.- dentro tendremos que dividirnos para identificar a los villanos que estarán presentes, debemos inutilizar las armas antes de que empiece la subasta, Kara deberás ir a donde están las armas antes que todo comience para destruirlas.

-Una vez que las armas estén inhabilitadas, me comunicare con Alex para que entren a arrestar a todos los villanos.- dijo Lena- tendré que decirle que me arresten también, a si no se vera sospechoso.

-¿ Arrestarte?.- dijo Kara

-Buena idea.- respondió Kate.

La camioneta que iba frente a ellas se detuvo y en seguida el auto también lo hizo, esperaron hasta que las escoltas de Lena estuvieran colocadas en sus posiciones y su chofer abrió la puerta para dejarlas salir, Kate salió primero, tendiéndole una mano a Kara para que esta saliera después, Kara ayudo a Lena a salir y la tomo de la mano. El nuevo equipo de seguridad de Lena, conformado por 3 hombres y 2 mujeres, eran los agentes de elite más letales que tenían los cuervos, se aseguraron de cerciorarse que todo estuviera bien antes de que las chicas procedieran a adentrarse al lugar, el muelle a simple vista parecía desierto, pero Kara utilizo su super oído para detectar la entrada.

-Es por allá.- Kara señalo un pequeño cobertizo lejos de las farolas de la calle..- la contraseña es Leviathan.

Kara y Lena se miraron.

-Lena no puede estar aquí.- dijo la rubia con preocupación.- tiene que irse.

-Es muy tarde para eso.- dijo Kate observando como un par de mastodontes se ponían en la entrada del cobertizo.

-Entonces Lena ira conmigo en todo momento.- dijo Kara con seriedad.- y no es algo que este a discusión.

Kate levanto las manos en señal de rendición.- Ire yo primero.- nos vemos a dentro.

Vieron como la chica se acercaba a los guardias y la revisaban, Kate procedió a decir la palabra de seguridad y enseguida entro al lugar. Las chicas se pudieron en camino, Lena rodeo el brazo de Kara mientras caminaban, los super sentidos de Kara se pusieron super aleta en caso que ocurriera algún incidente o alguien intentara atacar a Lena.

-Buenas noches.- dijo Lena despreocupadamente.

Los guardias se voltearon a ver algo recelosos, Kara pensó que tendría que actuar rápido, pero solo se limitaron a revisarlas.

- Palabra.- dijo uno de los guardias.

-Leviathan.- respondió Lena con tranquilidad, les abrieron el paso y se encontraron en una sala obscura, de pronto vieron como un pasillo se iba iluminando de apoco y siguieron esa dirección, caminaron hasta encontrarse en un enorme salón lleno de personas, estaba adornado elegantemente, meseros con mascaras iban de aquí para allá repartiendo copas de champaña al rededor de las mesas altas, a los lejos, Kara pudo ver a Kate cerca de la barra coqueteando con una chica.

Nada es igual sin ti- (Supercorp)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora