Lindo Omega

Extra 4

Taehyung suspira una vez más y observa su reflejo en el gran espejo frente a él. Los recuerdos invaden su mente, haciendo que su corazón duela una vez más.

Ya habían pasado cuatro largos y dolorosos años desde que jungkook se fue, sin darle nisiquiera una explicación. Taehyung había intentado olvidarlo, lo intento muchas veces a lado de Jackson, su ex pareja, pero simplemente no funciono, por que nada lograba llenar el vació que sentía.

Lo único que sabía del alfa era que estaba bien y ya había regresado a Seúl, pero nisiquiera se tomo la molestia de buscarlo, no cuando lo dejo de una manera tan cruel.

Con el paso de esos años, taehyung logro terminar la Universidad y ahora era un gran maestro de baile de pequeños niños de diez a doce años. El baile llenaba un poco su corazón, y más al saber que con ello ganaba la admiración de lindas personitas como lo son sus estudiantes.

Los pensamientos de taehyung son interrumpidos por el sonido de alguien entrando a la sala de baile, el omega observa por el espejo a su mejor amigo, hoseok, el cual carga a su pequeño hijo de tres años y lo mira con una linda sonrisa.

- Te buscan, taehyung.- El nombrado mira con extrañeza a su mejor amigo, ya que no esperaba visitas.

- ¿Quién?

- Solo ven...

- No tengo ánimos de salir, mejor dile que pase.- El omega menor asiente con la cabeza y sale de ahí, taehyung vuelve su mirada al espejo y espera con paciencia a que quien sea que lo busque aparezca.

tan solo segundos la puerta se abre con lentitud, y ahí, por el espejo taehyung mira a la persona, sintiendo su corazón acelerarse y su mundo pararse de repente.

- Hola, osito...- Sus ojos se cierran con fuerza intentando retener las lagrimas y se levanta del frío suelo con un poco de dificultad, enfrentando a aquel alfa.

- jungkook...- taehyung no soporta más y sus lagrimas caen unas tras otras, sintiendo como su lobo llora ante la presencia del alfa.

- Yo... necesito hablar contigo.

- Y, ¿qué pasa si yo no quiero que hablemos?.- El omega se acerca con pasos lentos al alfa hasta tenerlo a menos de un metro.

- Por favor, taehyung, te lo ruego.- En esos instantes el corazón de ambos latía con gran rapidez, y sus lobos lloraban ante el reencuentro.

- No sabes cuanto te he esperado... no sabes cuanto he soñado con este día.- taehyung golpea con sus puños el pecho de jungkook y este no deja que se detenga, lo deja desahogarse.- ¡No sabes cuanto he sufrido por tu maldita culpa! No sabes cuanto...- El llanto de taehyung se vuelve más fuerte y recarga su frente en el pecho del contrario, oliendo su embriagante aroma.

- Yo... se que con un lo siento no lograré tu perdón, pero dejame volver a intentar ganarme tu cariño, te lo suplico, taehyung.- Los ojos de ambos se encuentran, transmitiendo su dolor.

Se miran un largo tiempo hasta que sus miradas recaen en los labios del contrario, con lentitud se acercan hasta que estos chocan. La calidez y la conexión se sienten de inmediato.

Sus labios se mueven con lentitud, mientras las saladas lagrimas caen por sus mejillas. Extrañaban tanto al otro, que ese reencuentro paraba su mundo, siendo solo ellos.

Aunque después vendrían las explicaciones.

Se separan del beso por falta de aire.

- Mi cariño hacia ti jamás se irá, pero no será fácil que te perdone...

- Haré lo que sea por que lo hagas.

- Eso no lo sabemos, el único que decidirá eso es el tiempo, nadie más, estúpido alfa.