𝘼𝙢𝙤𝙧 𝙙𝙚 𝙤𝙩𝙧𝙤 𝙢𝙪𝙣𝙙𝙤-𝘏𝘢𝘳𝘳𝘺 𝘗𝘰𝘵𝘵𝘦𝘳

1 // ᴇʟ ᴇsᴄᴀᴘᴇ //

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El fuego empezaba a invadir cada rincón que se le atravesará.
La sangre empezó a expandirse por el suelo formando rios y charcos, sangre de inocentes y sangre de asesinos mezclándose entre sí.

Personas empezando a morir haciendo parecer el lugar aún más lúgubre de lo que era; pero ellos, a ellos no les importaba eso. Ellos solo querían escapar, salvarse, comenzar una vida y destruir el maldito lugar que fue su pesadilla.

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----𝙉𝙖𝙧𝙧𝙖 𝘾𝙖𝙨𝙨𝙖𝙣𝙙𝙧𝙖----

-Corre- me repetía por mi mente, la adrenalina que estaba circulando por mi cuerpo me impedía ver lo cuan cansada y debil que me encontraba en ese instante, por un momento, el pensamiento de que todos moririamos en el incendio que yacía en el inmenso laboratorio empezaba a invadir mi mente, pero el deseo de sobrevivir y hacer una nueva vida con la gente que amo era aún más fuerte, haciendome luchar sin importarme nada.

Maldecia internamente el hecho de que no podía usar mis poderes para intentar protegernos, pues el laboratorio encontró la manera de bloquearlos y mantenerlos debilitados por medio de un chip situado en la parte de atrás de nuestros cuellos, en dado caso que cometieramos algún disturbio.
Así que, si salíamos todos a salvó de esto, le pediría a Tony o a Carlisle que me ayudarán a retirarlo y así poder volver a tener mis preciados poderes.

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-Fuego- el fuego no paraba de hacerse más y más grande, estaba casi rozandonos los pies, y nos habia hecho ya más de una quemadura mientras corriamos.

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-El humo- el humo, además de no dejarnos respirar correctamente hacernos sentir como si nuestros pulmones quemaran, nos dificultaba la visión, y acompañado de las llamas constantes que habían lo hacía mucho peor, pues fácilmente podríamos sufrir un accidente.

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-El laboratorio- sus pasadizos tan inmensos, largos, las paredes teñidas de sangre y con marcas por el fuego, hacían el lugar digno de una película de terror.
Pero nosostros, nosotros solo pensábamos en sobrevivir mientras ignorabamos todo el dolor que sentíamos, intentando salir de ese infierno.

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Éramos un gran grupo de sobrevivientes. Tony, Carlisle y otras personas iban adelante de todos encabezando al grupo guiandonos hacia la salida; otras personas, algunas de ellas Thomas, Jackson y Newt iban en el medio cuidando, y al final del grupo ibamos Gally y yo ayudando a los que se hayan caído, tropezado o lastimado, e ibamos ayudando al pequeño Théodore pues se había tropezado a medio camino.

Después de doblar e ir por varios pasillos por fin estabamos acercándonos a la salida, lo sé pues recuerdo perfectamente como había llegado aquí.
Recuerdo como estaba tan confundida. Mis padres apenas habían llegado de un viaje de trabajo y ellos en vez de ir sus oficinas como siempre lo hacían, me pidieron que me alistara pues ibamos a salir. Yo estaba tan feliz pues hacía mucho que no pasábamos tiempo en familia, entonces, sin preguntarles nada me prepare rápidamente y partimos.

Cuando habíamos ya llegado estaba confundida, el lugar estaba rodeado de grandes muros y rejas de color gris, las cuales dentro de ellas resguardaban un gran edificio también de colores grises con algunas personas afuera vigilando.
Salimos del carro y empezamos a caminar hacia la entrada, la cuál era custodiada por dos personas. Cuando llegamos, mis padres dieron la tonta excusa de haber olvidado algo dentro del auto y que volvían pronto, pero también me dijeron que siguiera a uno de los hombres pues me iba a guiar al lugar a donde ibamos a estar.
Yo quize negarme y esperarlos, pero uno de los hombres rápidamente me tomo del hombro y me empezó a llevar a fuerzas por ese horrible pasillo al lugar que se convertiría en mi nuevo hogar lleno de maltratos por los próximos cuatro años.

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- ¡𝘊𝘢𝘴𝘴𝘪𝘦, 𝘎𝘢𝘭𝘭𝘺! Grito Teo, haciéndome salir de mis recuerdos. Gally y yo volteamos a verlo tratando de averiguar porque había gritado, volteamos levemente sin dejar de correr y vimos cómo el techo había empezado a desmoronarse detrás de nosotros y siendo consumido por el fuego, así que, si antes estabamos asustados, ahora lo estabamos aún más, pues nos habíamos quedado un poco atrás del grupo. Sacando más fuerzas de Dios sabrá donde empezamos a correr más rápido acercándonos cada vez más a las grandes puertas que indicaban a nuestra libertad; sus puertas ya estaban abiertas pues parte del grupo ya había salido.
Nosotros tres apenas pusimos pie afuera de las puertas, caímos desplomados en el suelo del lugar mientras este explotaba y se derrumbaba a la vez trayendo consigo polvo y escombros.
Nosotros debido a que apenas estabamos saliendo de ahí, la explosión nos afecto más que a los demás provocando que fuéramos empujados por lo ya mencionado, quedando así inconscientes y con un molesto pitido rondando en nuestros oídos.

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:)