Chompuro es un chismoso

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(Relación establecida)

Endoyuki se estaba cansando de buscar a su novio por todas partes. Lo había buscado por el jardín en la parte trasera y delantera, sin encontrar rastro del peli morado por alguna parte. Incluso había llegado a preguntarle a Crazy Dave sobre su paradero, pero este le explicó —luego de preguntarle más de sesenta veces a causa de que no entendía ni una palabra— que no lo había visto en toda la mañana.

Lo cual lo estaba preocupando grandemente.

Chompuro no es de esas personas que desaparece sin avisar, mucho menos sabiendo lo preocupado que a veces puede llegar a ser el peli celeste.

—Cálmate de una maldita vez, blue pea. Ya me tienes estresado de tanto escucharte preguntar por ese come zombies —se escuchó por parte de Mikuro más de una vez, pero ninguno de los presentes parecieron inmutarse ante su comentario. No es algo anormal escucharlo hablar en ese tono.

—Pero es que simplemente no entiendo, ¿dónde podría estar metido?

—Ni él ni Seno-chan están presentes, que raro —Wataronawa habló, en aquél tono que causaba malos pensamientos en los demás.

Inmediatamente se ganó una mirada de todos, incluido Mikuro.

—Pero, Seno-chan y yo somos pareja —el de cabellos verdes en tonos suaves se rascó la mejilla, entre pensativo y dudoso—. Además, ninguno de los dos sería capaz de hacer algo así.

—Esta nuez de mierda solamente está diciendo tonterías, ni siquiera sé por qué se molestan en escucharlos.

Endoyuki asintió sin más, agachando la cabeza con inseguridad. Realmente no podía opinar nada sobre su novio, Chompuro es el perfecto ejemplo de «que nadie sepa tu siguiente movimiento» por lo cual no puede decir nada al respecto.

Suspiró.

Lo mejor será buscarlo en otro momento, o tal vez aparezca...

***

—¡Endoyuki, ven! —llamó Shiyura con una sonrisa divertida, susurrante.

El mencionado levantó una ceja, caminando hacia él.

Shiyura se encontraba escondido detrás de una pared, mirando dentro del garaje a Dios sabrá quién o qué cosa.

—¿Qué pasa?

—Encontré a Chompuro y Seno-chan —señaló con la mirada hacia dentro, pidiéndole que vea lo que pasaba en el interior del garaje.

Endoyuki no pudo evitar abrir levemente los ojos, parpadeando mientras se aguantaba una escandalosa risa.

Dentro del garaje no estaban nada más ni nada menos que: Chompuro sentado en una silla con el cabello colocado hacia atrás, dejando la vista de sus ojos esmeraldas, mientras Seno y Kakuto se dedicaban a maquillar cada parte de su rostro a la par que contaban cosas al azar.

—Y él me dijo «¿Qué, me vas a pegar con una de tus espinas?», ¿y qué creen que hice?

—Déjame adivinar, le pegaste tan fuerte que le desfiguraste la cara.

—Exactamente.

—Eso le pasa por meterse con la persona equivocada —concluyó el peli morado, cruzándose de brazos con seguridad.

El ojiazul no puede evitar sentir diversión de tan solo ver el bálsamo en sus labios, su cabello algo rizado y el como Seno se preparaba para echarle algo de polvo.

—Efectivamente confirmé mis sospechas, Chompuro es un chismoso.

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